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El Instituto Nacional Surcoreano, o INS abreviado, abría sus puertas por primera vez a alumnos omegas, hasta entonces solo entregaba conocimientos a los primeros dos rangos de la jerarquía, siendo estos alfas y betas, sin embargo, y con el nuevo d...

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El Instituto Nacional Surcoreano, o INS abreviado, abría sus puertas por primera vez a alumnos omegas, hasta entonces solo entregaba conocimientos a los primeros dos rangos de la jerarquía, siendo estos alfas y betas, sin embargo, y con el nuevo director del establecimiento, la oportunidad para unirse a la que era la mejor institución del país estaba ahora al alcance de la mano, y nadie en su sano juicio desperdiciaría tan valiosa oportunidad.

Jung HoSeok, era un alfa que estaba en su penúltimo curso educativo, y anhelaba con todo su ser el poder terminar pronto e irse de allí.
No es que odiara estudiar en aquel lugar, al contrario, sus mejores amistades y recuerdos habían nacido ahí. No obstante, muchos de los estudiantes alfas creían en la superioridad que poseían ante un beta u omega, pavoreándose de ser el eslabón más alto y, por lo tanto, el más importante.

HoSeok agradecía a sus padres por no haberlo criado de la misma forma que a ellos, y enseñarle a que todos y cada uno de los cambiaformas eran igual a él. Nadie estaba por encima ni por debajo suyo.

Aquel día, su lobo estaba extrañamente ansioso, corriendo de un lado a otro y moviendo la cola sin parar. Prácticamente, lo había despertado tres horas antes de que sonara el despertador y el chico no pudo hacer otra cosa que maldecir y odiar a su animal, obligándose a prepararse para ir al INS mucho antes de lo habitual.

Al llegar, su lobo pareció calmarse un poco, dejando de revolotear en su interior y echándose en algún rincón de su mente, aún atento al exterior.

Pasaron un par de horas en las que el resto de los alumnos llegaron, entre ellos un chico alto y de delicadas facciones, era de los pocos a los que HoSeok podía llamar 'amigo'. El joven se acercó apenas lo vio por sobre la multitud, con una sutil sonrisa grabada en sus labios.

—Hobi, buenos días.

—Ojalá lo fueran. —su voz teñida de cansancio y ojeras bajo sus ojos dejaban en claro su pesar.

—¿Problemas para dormir?

El menor negó.

—Mi lobo me despertó antes, se puso como loco de la nada y me obligó a levantarme antes de que siquiera amaneciera.

—Qué extraño... A mí me pasó algo parecido, pero supe controlarlo.

—Vaya suerte.

—Supongo —respondió encogiéndose de hombros—. Fuera de eso, hoy es el gran día. —comentó con la mirada fija  en la entrada del establecimiento, donde se podía ver llegar en masa a los nuevos estudiantes. Su alfa se removió en su interior, levantando las orejas como si estuviese buscando a alguien.

'Ya basta. Cálmate'

—No sabría si llamarlo así, hyung. Con lo molestos que son los alfas con los betas, no quiero ni imaginarme como han de ser con los omegas.

—El instituto ya puso medidas contra eso, cualquiera que moleste a un omega, sea verbal o físicamente, será expulsado de inmediato.

—De aquí a que cumplan con eso...

—Todo estará bien, Hope. Ya verás.

Entró al aula luego de despedirse del mayor, caminando hasta su puesto para dejar caer la mochila en el suelo y tirarse sobre el escritorio

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Entró al aula luego de despedirse del mayor, caminando hasta su puesto para dejar caer la mochila en el suelo y tirarse sobre el escritorio.

Las voces no se hicieron esperar, indicándole la llegaba de sus compañeros al salón.

—¿Viste a los omegas? —habló un alfa de los que HoSeok podría considerar menos agradable— Joder, no puedo esperar a tirarme a uno, lo haré gritar de placer.

—Yo quiero llenar la boquita de uno con mi polla y obligarlo a tragar todo mi semen.

—Solo no lo vayas a romper, con lo frágiles y delicados que son. 'P-Por favor, no me lastimes'. —las carcajadas ante el tono burlesco y chillón no se hicieron esperar y HoSeok solo pudo apretar los puños en su lugar, tratando de no liberar feremonas al ambiente.

Por suerte para él, el profesor hizo acto de presencia, exigiendo silencio y orden.

—Buenos días, jóvenes y señoritas. Como todos ustedes saben, el día de hoy tendremos el honor de recibir a varios y varias omegas en nuestra institución —Nuevamente su lobo comenzó a alterarse, corriendo en círculos mientras ladraba sin cesar en su interior. HoSeok intentó calmarlo sin éxito, sintiéndolo más ansioso a cada palabra del profesor—, por lo que en esta sala se les otorgó el cupo a tres de ellos. —su mirada se dirigió hacia la puerta, haciendo una pequeña seña para invitar a pasar a los chicos detrás de esta—. Por favor, denle la bienvenida a sus nuevos compañeros. Ellos son; Lee HaeIn, Kim NamJoon y... Min YoonGi.

Y HoSeok supo porqué su lobo estaba tan alterado.

Destino o Casualidad - jhs & mygDonde viven las historias. Descúbrelo ahora