Destino o Casualidad - jhs & myg

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ADVERTENCIA: Este capítulo cuenta con contenido homosexual +18. Si no es de tu agrado o interés, por favor, continúa hasta el final de la escena y evita malos comentarios.

Gracias.
B.S.

El aroma a canela se intensificó de golpe, llenando toda la habitación, los orbes del menor se tornaron de un azul profundo y su cuerpo ardió por completo.

YoonGi intentó retroceder cuando fijó la mirada en él, llena de deseo, lujuria, totalmente hambrienta. Ya no había rastro de cariño, ni preocupación alguno, solo un apetito infinito por una presa.

Y él era la presa.

El lobo se lanzó sobre su cuerpo tirándolo al suelo, colocándose entre sus piernas abiertas.

Sintió sus labios ser tomados con fuerza, en movimientos bruscos y desesperados, una mano fija en su cadera mientras la otra se coló por su ropa, pellizcándole un pezón.

YoonGi trató de resistirse, tanto al menor como a su omega, que luchaba por tomar el control y seguirle el juego.

No podía permitirlo.

Su mente comenzó a funcionar con rapidez, ignorando con mucha dificultad pero de manera exitosa, el aroma del alfa. Pensó en alejarlo, sin embargo, sabía que tomaría sus muñecas y lo inmovilizaría por completo, si no podía moverse no tendría forma de pararlo. La segunda idea fue en detener suavemente sus toques, no obstante, el resultado sería el mismo, se sentiría rechazado y lo sometería; lo mismo si mordía su labio en el beso, podía funcionar con él en celo, pero solo haría enojar al lobo sin su lado racional activo. YoonGi debía aprovechar que no había voz de mando ni feromonas de dominación sobre él.

Barajó y calculó diversas opciones, llegando a una conclusión. Si quería que volviera en sí, tenía que calmar parte de su calor.

Quiso maldecir y besar a NamJoon cuando se le ocurrió la idea más vergonzosa y acertada de todas.

Pero primero debía tener la atención del alfa sobre sus palabras y no sobre su cuerpo.

—Alfa. —lo llamó sintiendo mordidas fuertes, pero no dañinas, en su pecho descubierto.

El malnacido era rápido.

Unos minutos más y ya estaría completamente desnudo.

Ni siquiera se dio cuenta de cuando le quitó la ropa de la cintura para arriba.

Estúpido animal. Estúpido celo. Estúpido HoSeok.

Lo golpearía en cuanto tuviera la oportunidad.

—Alfa —repitió ahogando un gemido cuando lamió su pezón erecto, el otro siendo torturado por sus dedos—. Alfa... Hobi... —no, su nombre no funcionaría— Lobito... —aún nada. Ya estaba perdiendo la paciencia y sentir las manos del menor tratando de quitarle el pantalón lo hacía peor— Alf-... ¡JODIDO LOBO DE MIERDA, ESCÚCHAME!