Destino o Casualidad - jhs & myg

Extra: Altura

—No.

—Hyung. –murmuró en tono de reproche, pero el omega continuó testarudo.

—Dije no. No quiero que te vayas, me vas a abandonar.

—¡Sabes que eso no es cierto! —El mayor negó—. Serán dos meses y hablaremos todos los días, ni siquiera notarás mi ausencia.

—No.

—Hyung, de verdad debo irme, no puedo perder el tren —Volvió a negar, enterrando los dientes en el cuello del alfa—. Posesivo... —Yoongi gruñó obstinado. HoSeok supo que no sería fácil sacárselo de encima sin convencerlo de que volvería—. Mi amor, iré con mis abuelos, solo eso. No hay nada que me mantenga allá más que ellos.

—A ella la conociste en Gwangju. Puede haber vuelto a su nido de víbora y te la vas a encontrar.

—Aunque sea cierta tu teoría no me interesa, hyung. Yo solo te amo a ti, ni siquiera la miraré —El omega lo observó con carita triste—. No me hagas pucheros, sabes que soy débil ante ti, mi vida.

—Me quieres dejar solo.

—YoonGi, eso no es cierto.

—¿Entonces por qué no me llevas contigo?

—Porque debes ir a Daegu.

El mayor lo sabía, su familia estaba a sólo unos metros esperando por él, todos con una sonrisa burlona en el rostro, aunque Jeonghyun la disimulaba muy bien a diferencia de su esposa e hijo. YoonGi aprovecharía las vacaciones al igual que su alfa para ir con sus abuelos paternos, disfrutar del campo sin la contaminación de la ciudad y ser mimado por los mayores. Planeaba irse sin escándalos, pero cuando supo que la familia de HoSeok lo esperaba en el mismo lugar de donde provenía esa serpiente, se negó colgándose a él tal cual koala, sin soltarlo por más que se lo pidiera. El menor había mirado a JungKook con súplica más de una vez, pero solo volteó la cabeza ignorándolo, hizo lo mismo con su suegro, quien sólo negó, dejándole claro que no lo ayudaría.

—Yo volveré un día antes que tú. Serán veinticuatro horas más sin verte, mil cuatrocientos cuarenta minutos, ochenta y seis mil cuatrocientos segundos, ocho millones seis-...

—Hyung, ya —sentenció serio, cortando su diálogo. El omega gimoteó como cachorro abandonado, escondiéndose en su cuello—. Estamos enlazados, YoonGi. Incluso a kilómetros de distancia seguiremos unidos, tú me vas a sentir, y yo a ti. Podremos vernos por videollamada, y si eso no es suficiente, iremos al segundo plano.

De cierta forma, luego de la primera vez, pudieron volver a reunirse en sus sueños, al principio les pareció extraño, así que fueron al templo a consultar, pero la anciana solo les sonrió diciéndoles que no existía motivo alguno de preocupación, que era normal para las parejas con un lazo unirse de forma inconsciente en el plano espiritual si ya lo habían hecho antes por cuenta propia.