O11

7.1K 681 276
                                        

La gente no sabe de qué está hablando cuando dice que está obsesionada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La gente no sabe de qué está hablando cuando dice que está obsesionada. Para ellos, que les guste mucho algo o estar demasiado interesado en algo equivale a obsesión.

No lo es.

Nunca sabes realmente que estás obsesionada hasta que pierdes todo el sentido común y el control. En el momento en que te consumes y te encuentras actuando de una manera compulsiva y esporádica, es cuando se convierte en una obsesión: cruda y fea en su forma más verdadera.

Mientras estoy junto al viejo Honda en el silencio de la noche, vuelvo a los acontecimientos que me llevaron hasta aquí.

¿Qué me obsesionó? Claro, comenzó con esa falsa sonrisa de mierda, pero eso no es todo, ¿verdad?

¿Fue cuando la seguí el primer día? ¿Cuando eché al chico del apartamento para quedármelo? ¿Cuando la vi desnuda por primera vez? ¿Cuando la vi cenar con otro hombre y decidí que no volvería a pasar?

O podría haber sido cuando entré, revisé sus cosas y decidí que había más que aprender.

O podría haber sido por la manera en que se sometió a mí cuando la follé tres veces el domingo. La forma en que su cuerpo se amoldó al mío como si siempre hubiera pertenecido allí, y siempre lo hará.

Si hubiera una pequeña posibilidad, la eliminaría de mi sistema y pondría fin a lo que sea esto, pero cualquier posibilidad de eso se evaporó en el momento en que me hundí en su interior e hizo esos pequeños ruidos de satisfacción, como si hubiera estado esperando toda su puta vida por mí.

Ahora que la he probado, no hay forma de que me detenga. Puedo, pero eso solo sucederá en dos escenarios; uno, un cuchillo en la garganta de mi pequeño Pétalo, haciéndola inaccesible. Dos, seguir follándola hasta que me aburra.

No me atrevo a realizar la primera opción, a pesar de que sea impropio de mi carácter. Por primera vez en mi vida, opto por la opción dos. En mi búsqueda por eliminar cualquier hábito que pudiera paralizarme, nunca me follé a la misma mujer más de una vez.

La idea de no volver a tocar a mi pequeño Pétalo es jodidamente trágica. Ni siquiera quiero considerarlo.

Emerge por la salida del personal, envolviendo un abrigo alrededor de su delgada cintura. Sus pasos recorren la distancia en un tiempo récord, su pequeña figura apenas notable.

Es curioso cómo una persona invisible fue capaz de captar mi atención de una forma tan morbosa.

Mientras la veo acercarse a mí, me invaden dos emociones diferentes. La primera, la odio por traer el caos a mi vida ordenada. La segunda, quiero follar su cuerpo para liberar ese odio, usarla y llenar todos sus agujeros con mi semen.

Mi pequeño Pétalo se detiene abruptamente frente a mí, al fin percatándose de mi presencia. Su expresión se transforma en una ligera sorpresa antes de disimularla.

# 𝗣𝗦𝗬𝗖𝗛𝗢 ; 𝐉𝐧𝐤 𝐱 𝐋𝐥𝐦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora