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TW: Fantasía de abuso sexual.
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Por supuesto que mi pequeño Pétalo se escapó.
Una parte de mí está orgullosa del ardid que usó con Enzo, cómo llegó a la embajada en Italia aunque su italiano no es tan bueno. Aunque tal vez fue a Palermo y encontró el camino desde allí.
Incluso se llevó los malditos gatos. Se necesita una mujer de acero, especialmente en una tierra extranjera donde no conoce a nadie.
La otra parte está jodidamente lívida, y esa es la parte en la que me he centrado las últimas semanas.
Mientras me recuperaba de la tortura, tomé algunas decisiones de negocios en Italia y dejé a De Marco a cargo de las tierras.
Enzo, Angelo y yo nos quedamos aquí ahora. Es inútil atraer al enemigo de vuelta a Sicilia cuando podemos tenerlo en su propio puto terreno.
Ahora que tenemos a Stephan en el interior, se está formando un nuevo plan.
Y sí, parte de la razón por la que estoy aquí es por ella, Jennie, mi pequeño Pétalo. Mi jodida obsesión.
¿Solo que ya no es solo una obsesión?
Empiezo a pensar que se está transformando en algo más que eso, algo potente y fuera de control.
No he entrado al dormitorio en Sicilia porque me recuerda mucho a ella. La idea de entrar en esa casa, sin oírla cantar o hablar con sus malditos gatos me deprime.
Así que volví a mis viejos hábitos, observar desde lejos.
Ahora que está con Taeyang, no puedo desatar mi modo acosadora por completo considerando que se ha vuelto más estricto sobre la seguridad, pero la veo cuando sale.