¿Quien eres tu?..1/?

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La noche parecía prometer mucho bajo el brillo de la luna, Tony miró por última vez aquella estrellada noche y dirigió sus pasos hacia el salón de baile. Su padre había decidido hacer una de las tantas fiestas en el palacio, se supone que todos irían con mascaras por lo que colocó la suya antes de comenzar a bajar por las grandes escaleras cuando su nombre fue anunciado, las luces parecían acapararlo al igual que la mirada de toda la gente, bajo con elegancia y con una sonrisa radiante saludando a todos.

—sean todos bienvenidos al palacio Stark, espero que esta fiesta sea de su agrado—dichas palabras fueron pronunciadas por su padre antes de anunciar aquel afamado baile.

Varias chicas comenzaron acorralarlo para que pudieran conseguir al menos una pieza con el muchacho de ojos cafés avellana, nada era tan dichoso que estar entre los brazos del único hijo y heredero de aquel gran reino.

El muchacho solo les sonrió a las señoritas quienes quedaron encandiladas con el, sin esperar que en realidad el joven sonreía ante la vista que habían enfocado sus ojos, un hombre de gran porte y traje azul, perdido entre la multitud con una copa en mano.

—Disculpen—con modestia que no sabía que tenía, se apartó de las doncellas.

Sus ojos seguían fijos sobre aquel rubio, que bajo la máscara podría reconocer un par de safiros que lo habían maravillado minutos atrás. Sin embargo en el momento de querer tomarlo del brazo para hablar con el, una muchacha de cabellos castaños apareció junto a él, ¿Quien era esa perra? se preguntó mentalmente, ¿y por qué le tomaba el brazo con tanta confianza? ¿Serían pareja? Uh....esperaba que realmente no fuera así. La muchacha pareció susurrarle algo al oído, el hombre lo miro unos minutos y después sonrió, Tony podía jurar que aquello casi le había robado todo el aliento, apenas y pudo hacer algo cuando el rubio comenzó a llevarse aquella dama de cabellos castaño hacia la pista de baile, eso no le pareció, dejó escapar un suspiro por sus labios frustrado por no conseguir lo que quería, aun así no se rindió, tenía toda la noche se animó un poco, aún quedaba algo de tiempo así que cogió la mano de la primera chica que se le atravesó, la chica casi parecía querer desmayarse al notar quien lo había tomado la mano y Stark pudo notarlo. Llevo una de sus manos hacia la cintura de la chica y con la otra tomo su mano comenzando a balancearse al compás de la música, Stark levanto su vista mientras intentaba localizar al rubio que había visto hace unos minutos, la chica realmente no parecía notar su acción puesto que con su sola presencia y aroma, la chica ya estaba dentro de un sueño. 

Hablando de aromas Tony logró localizar a cierto rubio, aquella colonia no pasó desapercibida por su nariz, dando un profundo respiro para impregnar sus pulmones,  rápidamente su vista se enfocó hacia el hombre que yacía bailando con aquella dama, cuánto desearía ser ella y estar bailando con aquel hombre de gran porte varonil que a Tony le encantaba.

 Sin esperar mucho paso lo inesperado,  escucho a JARVIS mencionar aquellas hermosas palabras que para el habían sonado como música para sus oídos.

—Es hora de cambiar de parejas—había anunciado el mayordomo.

Tony juro que le dio un vuelco en el estómago, miro al chico y cuando estuvo a punto de tomar su mano una chica rubia hizo su aparición tomándolo primero, el castaño esgrimió una maldición por lo bajo, hizo un leve puchero y tomó la mano de su siguiente pareja, subió su palma para que la contraria le siguiera, dando vueltas por la pista como lo había practicado, aún así su vista jamás se apartó del rubio, realmente ansiaba bailar con el, no le importaba que estaba mal visto bailar con otro hombre y que no fuera una muchacha, realmente era lo que más deseaba, de todos modos no era como si se fueran a casar ¿o si?

No quería admitirlo pero aquello sonaba tan bien y eso que no tenía idea de quién era aquel muchacho bajo de ese antifaz, solo podía decir que tenía un hermoso cabello donde podría enredar sus dedos, tampoco podría olvidar el hermoso color de sus ojos, un suspiro enamorado salió de sus labios, ni siquiera lo conocía del todo y ya lo traía como todo un hormonal de secundaria. Escucho a Jarvis volver a mencionar sobre aquel cambio de parejas y cómo ya sabía su destino, busco una chica como su nueva pareja de baile, pero antes de siquiera poder hacer un movimiento, una mano en su cintura fue colocada.

—¿bailarías conmigo?—susurro en su oído provocando que su piel se erizara ante aquella profunda voz.

Giro su cabeza encontrándose de nuevo con esa sonrisa.

 Sin pensárselo dos veces asintió.

El rubio lo miro divertido y se separó solo un poco para tomar su mano y entrelazar sus dedos.

 Tony se sentía en un sueño, un sueño hecho realidad por así decirlo, lo tenía enfrente y no dejaba de mirarle, no sabía el porqué pero sabía que esa mirada sería su perdición.

—¿Que?—le miró divertido el rubio—¿tengo algo en la cara?

—solo ese antifaz que no me permite ver tu rostro por completo.

Escucho la risa del contrario taladrar por sus oídos.

—bueno, no sería una fiesta de antifaces si no lo trajera.

Tenía buen punto aún así no le daba crédito por su respuesta.

—al menos podría ser el único que te conociera, no revelare tu identidad si es lo que te preocupa—arqueo una ceja tratando de convencerlo.

—no lo creo, está bajo la orden hasta que la fiesta termine.

—no soy un seguidor de reglas...¿Que dices?

Lo vio abrir la boca pero no pudo pronunciar nada ya que Jarvis de nuevo había hecho de las suyas.

—nos veremos después—besó su mano pero antes de que se retirara Tony lo tomo del brazo.

—¿Cuando?—lo miro a los ojos.

—en otro baile—le sonrió steve.

Lo vio partir de la pista reencontrándose con su pareja de antes, Tony no quería esperar a otro baile pero lo dejó escapar solo por esta vez.

Hoy las estrellas se encargarían de encubrirlo pero la siguiente vez que se vean no lo dejaría ir.

Pequeñas historias (stony)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora