Mi dulce dama de hermosa sonrisa, ibas caminando con tu hermoso vestido color azul, eres una chica muy tímida, solo te la pasabas viviendo de libros. Intenté acercarme pero Barnes me lo impidió me dijo que si me acercaba a ti estaría acabado.
Pero eso no era un problema para Tony Stark, en la salida te vi en una banca, tan solitaria como de costumbre, me acomode el cabello y con una sonrisa me acerqué hacía a ti.
"¿Esta ocupado?" pregunte.
Tu asentiste con la cabeza, luego me sonreíste, estabas jugando conmigo lo sabía pero no iba a intimidarme. . . .
Mi dulce dama de cabellos rubios y ojos azules, siempre tan hermosa como siempre.
Mi dulce dama de mejillas rosas y hermosa sonrisa, por que tu lo eres, esta vez llegaste con un vestido rosa que traía un moño atrás.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Nunca entendería tu estilo de moda, eres una chica muy sencilla y eso es lo que amo de ti, porque ese vestido representaba tu manera de ser te representaba a ti como persona y a decir verdad se te veía muy hermoso; incluso llevabas un sombrero en la parte de arriba, te veías muy mona, hasta parecías una de esas muñecas de porcelana.
Me enteré que lo hiciste por que querías impresionar a rumlov, no pude evitar sentirme celoso, vi como te acercabas hasta la mesa donde se sentaba con todos sus amigos, cada uno te veía de reojo, como si de una presa fácil se tratara, uno de ellos hablo antes que aquel muchacho de cabellos negros te diera una respuesta.
"¿De donde lo sacaste?" apunto a su vestido "¿de la tienda de antigüedades?"
Tu rostro se volvió rojo, pude notar que te hizo incomodar ese comentario, no sé qué hacías ahí, nunca esperes nada de ellos siempre buscan lastimar personas.
Vi como ese estupido se levantaba y te tomaba del brazo, te dio una vuelta como si tuviera que verificar algo, ese bastardo.
"No eres más que una simple chiquilla" sonrió cínicamente "no eres mi tipo lo siento"
No pude soportar como tu carita se llenaba de lágrimas, corrí pero ya te habías marchado.
"De esta no te la vas acabar maldito" y le di un puñetazo dejándolo tirado.
Te busque por toda la escuela y no te encontré, me dejaste preocupado, ni siquiera entre a clases, le pregunté a Natasha pero ella al igual que yo estaba angustiada.
Una idea pasó por mi cabeza, no sabía a donde iba realmente, pero al parecer mis pies sí, corrí y corrí sin saber por qué me dirigía a la biblioteca pero ahí estaba.
Entre en silencio pues no quería que me regañaran, mi dulce dama ¿donde estas?, ¿donde esta mi dulce chica de cabellos rubios y ojos azules? ¿Donde este mi dama de hermosa sonrisa? Pase de librero en librero para buscarte, pero no te encontré por ningún lado, suspiré, estaba por retirarme pero entonces un estornudo se escuchó debajo de una de las mesas, sin saber por qué sonreí y me volteé, ahí estabas, no sabes cómo me dolió verte así.
Oh mi dulce dama de ojos bonitos, no llores por alguien que no merece, hay más peces en el agua, no desgaste tus lágrimas por hombres como el, me agache y toque tu hombro.
"Hey rubia" dije en un susurro.
"¿Vienes a burlarte de mi?" No sabes cómo me dolió que pensaras eso de mi.
"Para nada" sin dudarlo te abrace "eres hermosa" susurre "te vez hermosa con ese vestido" volví a hablar.
"Rumlov dijo que era horrible"
"Lo se, pero él no sabe lo que dice" volví a susurrar "es hermoso igual que tu, mi hermosa dama de mejillas blancas"
"Tony"
"¿Si?"
"¿Por qué haces esto?" Te separaste de mi y me miraste fijamente mientras te limpiabas las lágrimas con la manga de tu vestido.
"El amor es bastante raro, haces lo que sea para estar con esa persona, no importa las veces que te rechace, sigues aferrándote por que la amas a pesar de que nunca será tuya" antes de que pudieras preguntar te caye con un beso corto en tus labios "me gustas stephanie"
