Steve había salido corriendo de la Torre, sin decir nada, escuchaba los gritos de Tony pero no quería voltear por qué sabía que sedería de nuevo ante las súplicas del castaño y eso ya no estaba en sus planes, tomó su casco para colocárselo y subir a su moto.
—¡No Steve espera!—lo sujeto Tony del brazo—¡déjame explicarte!
—apártate Tony—sentenció Steve.
No quería decir nada por que temía a lastimar a Tony, tenía que tranquilizarse o el castaño lo llevaría todo y cosa que a él le había enseñado era nunca herir a las personas sean malas o buenas, ni juzgarlas sin ningún motivo.
—¡tienes que escucharme!—decía entre lágrimas.
—lo siento—quito su brazo del agarre de Tony y encendió la motocicleta.
Nunca le había gustado huir de los problemas pero ahí estaba el, escapando de Tony, por que no podía esperar por lo menos por hoy hablar
con él por que le terminaría diciendo burradas el castaño cosas que no valía la pena decir así que prefirió guardar, iba tan metido en sus pensamientos que no escuchó el pitido de un camión que debo haber sido por eso estaba seguro que el camión no hubiera dejado nada de él. Aunque pensándolo bien ¿que le quedaba ahora? su amor lo traicionó, sus amigos le echaron la culpa por lo ocurrido y le habían dicho que se lo merecía, sus padres habían muerto, ya no podría ver a Peggy para pedir consejos, su había peleado con su amigo Bucky por lo mismo, su mejor amigo, hermano de toda la vida y su amor Tony, traicionado por las personas que más amaba en ese mundo que daría la vida por ellos ¿y él que recibía a cambio? reclamos, ofensas. Su vida ya era un asco a pesar de perdonar todas y cada una de aquellas palabras que lo herían mentalmente e ignorándolas como le había dicho Peggy había continuado en la torre y juntó su novio quien también le decía que no le diera importancia ¿pero que se llevó acabo? una gran sorpresa, su novio había pasado la noche con otro hombre y para acabarla no era más ni nada menos que su mejor amigo.Ahora todo encajaba bien, él por que su amigo se puso de lado de Tony, estaba enamorado de él.
Estaciono la moto y llegó al bar al que tanto visitaba con Tony de vez en cuando, todo le recordaba a él, a donde que fuera siempre estaría esos recuerdos.
—¡Hey steve!—saludo scott mientras limpiaba un copa pero al verlo Tan decaído dejó la copa de lado y decidió preguntar—¿Que ocurre?
—oh no es nada—desvío su mirada nunca había bebido en su vida siempre declinaba las ofertas que Tony le ofrecía pero esta vez haría la excepción—me sirvas una por favor.
—claro—scott se fue para preparar su bebida.
Escuchó la campanilla del bar, eso significaba que alguien había entrado dirigió su mirada y como si hubiera visto un muerto, rápidamente se agachó pero no resultó puesto que Tony ya lo había visto y ya se dirigía hacia él a pasos rápidos.
Cubrió su rostro con ambas manos, ¿donde estaba scott con su bebida pensó? Se iba a levantar pero Tony ya lo había tomado del hombro.
—Steve...—eso bastó para que las lágrimas salieran por sus ojos.
Desvió su rostro apoyándose en la mesa, Tony repitió la acción mirando hacia la nuca de Steve, no dijo, levantó su mano para acariciar aquellas hebras rubias que tanto amaba, lloro en silencio pero eso bastó para que steve volteara mirarlo también estaba llorando, Tony pasó su mano por su mejilla para limpiar las lágrimas, Steve colocó su mano sobre la de Tony, este le sonrió, Steve lo miró luego apartó su mano con cuidado y se levantó para salir corriendo.
—Steve tu be—-miró a Tony—¿y Steve?
—iré a buscarlo—salió detrás de él rubio.
Scott miró confundido pero siguió en lo suyo.