Capítulo #13

1.4K 78 5
                                    

Así trascurre un mes, lleno de estrés, y de felicidad. Mi relación con Raphael continuó en ese tiempo como siempre, me invitaba a cenar, pasábamos tiempo juntos, conociéndonos y hacíamos planes con nuestros amigos en común. Aún no le hemos informado a  nadie sobre nuestra relación, bueno; a excepción de mi familia, mi padre no entiende porque lo quiero mantener así  por un tiempo, hasta que le expliqué mis razones;  ambos decidimos tomar primero un tiempo y ver como se daban las cosas. Es una maravilla. He logrado conocer un poco más a Raphael en estas semanas que han trascurrido. Sobre él me he dado cuenta de cosas que no había notado antes; es bondadoso, responsable, dedicado, muestra preocupación por los demás, es desinteresado y generoso. No tenía idea que ayudaba a sus empleados económicamente para que progresen.

Gracias a Jacob  me enteré que ayudó a su nieta a estudiar, le paga la universidad; a  otro de sus guardaespaldas le ayudó cundo su hermano tuvo un accidente automovilístico y quedo gravemente herido de salud, se encargó de todos los gastos del hospital.  Yo misma me he dado cuenta de su preocupación por los demás, sobre todo con sus empleados y familia cercana. Es un ser humano que tiene virtudes y defectos. Aún me intimida un poco, pero me he brindado a mí misma la oportunidad de conocerlo y tener la mente abierta. Por otro lado mi padre está feliz, el día que cenó en nuestra casa estaba dichoso, cada vez que ve a Raphael en  nuestra casa sus ojos brilla de regocijo. Sí,  Padres.

Hace unas semanas atrás conocí su casa por primera vez. Es de cuatro pisos, con el típico estilo de las casas de New York. El barrio es elegante y de clase alta. A diferencia de las demás esta es más grande. Raphael tiene buena seguridad alrededor de él, la fachada de la casa es preciosa, tiene un jardín delantero y escaleras típicas de new york. Es la casa de mis sueños. Literal. En el primer piso se encuentra la sala de estar, la cocina (que por cierto al verla tuve un orgasmo visual), armarios, un baño social, la habitación de su ama de llaves, y el jardín trasero. En el segundo se encuentra una gran biblioteca, ambientada con una chimenea y en frente de esta unos sillones, el lugar perfecto para perderse leyendo.

Se encuentran dos habitaciones que según Raphael son su estudio privado y la otra está vacía por el momento. En el tercer piso hay dos habitaciones  de invitados. El cuarto piso corresponde a la habitación de Raphael. Por ultimo esta  la azotea y es maravillosa rodeada de vegetación  y sonidos de la naturaleza.

Como dije, la casa de mis sueños.

 Hoy es viernes y Raphael me invitó como de costumbre a su casa para cenar. Miro el reloj y son las cinco de la tarde, quedó en pasar a buscarme en media hora. Así que comienzo a organizar mi escritorio y recoger mis cosas. Me avisa que está abajo y salgo de la oficina. Al pasar por la recepción me desipido de los empleados y el guardia de seguridad. Al llegar a la entra del edificio lo veo. Está apoyado en su auto, hoy está algo informal con jeans, un jersey y chaqueta. Seguramente viene de dar clases en el gimnasio. Me acerco y lo saludo de un beso en la mejilla. Tenemos que tener cuidado ya que aún nadie aparte de mi familia sabe lo nuestro.

Entramos al auto y se pierde por las calles de New York. Hablamos de lo básico, es algo que me fascina es el hecho de que no necesitamos estar hablando todo el tiempo, con sólo estar en silencio seguimos disfrutando de la compañía del otro. Al llegar me toma de la mano y entramos a la casa. Algo que se ha hecho una costumbre, me toma de la mano, me besa en la mejilla y la frente. Poco a poco ha ido dando pasos conmigo. No ha intentado nada más. «Que no se note mi frustración»…se ha tomado muy enserio lo de conocernos primero. Sé que quiere dar el siguiente paso, veo el deseo en sus ojos cada vez que estamos cerca, cuando mira mis labios mientras hablo. Es muy paciente. Lo cual es un efusismo ya que Raphael no lo es para nada, eso me trasmite que esa está esforzando. Entramos a la cocina y el olor  a pescado me vuelve loca.

Detrás de las cicatrices.🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora