La pequeña interacción que tuve con la hermana de Corey, sin duda me había molestado un poco, aunque no la culpo, soy la prometida del hombre que literalmente quiere matar a su hermano.
Mientras manejaba la conversación que tuve con Corey se me vino a la cabeza, yo no podía ser su Beatriz aunque una parte de mi me dijera que la equivocada era yo y no él, no podía, simplemente no es cuerdo que yo esté con Corey sabiendo lo que se podría desatar si Robbie se entera de semejante cosa. Llegué a la casa de los Prince más rápido de lo que pensé, tomé un respiro muy hondo antes de entrar a la habitación.
—Hola Corey —¿Es normal que me sienta tan extraña?
—Hola —pero claro, estaba con el torso desnudo ¿Por qué no? Se miraba en el espejo mientras se curaba la herida ¿Se está suturando de nuevo?
—¿También sabes suturar heridas?
—¿Por qué no? Es la pregunta correcta.
—No creo que deberías de estar haciendo eso, al menos no solo.
—No es la primera, tampoco la última —me miró por el espejo—¿Te pasa algo?
Creo que se dió cuenta de mi cara de horror o sorpresa, tenía varias cicatrices en la espalda y no son de esas que te haces con una caída, son de algo más, no sé de qué son pero se ven muy dolorosas.
—Lo siento, no creí que mi expresión dijera tanto —me di la vuelta para poder ir a dejar mi mochila sobre la cama.
Terminó de suturar y parchó su herida con una curita gigante, se apoyó en el banco para girarse y titubeante, caminó hasta la cama.
—Sé que la pregunta está demás pero ¿Cómo te sientes?
—No sé si me molesta más la rodilla o la cabeza, aunque no recuerdo haberme golpeado la cabeza, lo último que tengo en mente es —señaló al azar la habitación, tragué saliva—, no recuerdo nada después de llegar a la casa de Harry.
No sé si sentir alivio o sentir como si hubieran tomado mi corazón y lo hubieran apretado porque significa que no recuerda la plática que tuvimos.
¿No recuerdas nada más?
— No, solo cuando llegó Shan, tengo lagunas mentales, así me sucede por la fiebre ¿Dije algo que no debí? Si comencé a hablar de cosas extrañas, no te alarmes, mi subconsciente me traiciona.
Auch—, bueno no hubo nada importante, pero mi mamá vino a revisarte, de ahí en fuera nada extraño sucedió.
Parecía impresionado —¿Soy digno de la atención de Amanda Black? Wow.
—No querían llevarte a un hospital y mi madre sabía del tema —me encogí de hombros y saque un folder—, tengo copia de todo lo que vimos hoy en todas las clases, aquí tienes.
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▪️𝑰𝑵𝑭𝑰𝑬𝑹𝑵𝑶▪️
Teen FictionRachel Black creyó tener una vida perfecta: un novio ejemplar y padres talentosos e importantes para la élite de Londres; sin embargo, los oscuros secretos que aquellos guardan la posicionan en un ambiente de mafia, corrupción y parafilias sexuales...