Capítulo 13: La confianza lleva a la paz

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Mientras Kushina y Goku resolvían sus dificultades en su misión; Naruto y Gohan proseguirán con el entrenamiento del primero, físicamente los avances del rubio habían sido considerables, tanto así que ya era capaz de correr, saltar, realizar acrobacias con la ropa de entrenamiento de cincuenta kilos. La alegría del chico no se hacía esperara, así como el orgullo de su joven maestro, el vínculo de los dos se había hecho indestructible se veían como hermanos y la soledad que sintieron por tantos años era cosa del pasado.

A pesar de todo lo anterior el hibrido había notado una extraña presencia que era enorme y parecía maligna dentro de su amigo, de hecho, la había sentido desde que lo conoció, sin embargo, nunca le había mencionado nada ya que en un comienzo no existía el vínculo que ahora tienen. El Son pudo darse cuenta que la enorme energía que esa otra entidad era lo que causaba que Naruto no tuviera control sobre su chakra y por ello no le fuera posible realizar jutsus.

· Naruto quiero felicitarte, tu progreso ha sido increíble, te has vuelto muy fuerte en poco tiempo – un Gohan lleno de orgullo reconocía a su amigo

· Gracias Gohan, nunca lo hubiera logrado sin ti –

· Aun así, hay algo que necesito preguntarte – el chico mestizo le comentaba con un rostro serio a su amigo

· ¿Qué sucede? – preguntaba el rubio con curiosidad

· Dentro de ti siento una enorme presencia, es muy contraria a ti; es fría, maligna y se siente una furia enorme en ella

· No sé de qué hablas Gohan, de veras – el chico de ojos azules contestaría sumamente sorprendido

· Hay un modo de averiguarlo, pero podría ser peligroso, ¿quieres intentarlo? – cuestionaba el pelipunta

· Si, hagámoslo Gohan – la respuesta del Uzumaki llena de seguridad le daba confianza a su joven maestro

· Bueno entonces acércate a mí y cierra tus ojos

Gohan se concentraba mientras cerraba sus ojos y ponía una mano sobre la cabeza de Naruto, en pocos instantes los dos habían logrado entrar al subconsciente del rubio. Este lugar tenía la apariencia de un corredor largo y oscuro; el piso estaba cubierto de agua, tanto que esta les llegaba a los tobillos, los dos chicos comenzaron a caminar hacía adelanta, a donde se sentía la otra presencia, el rubio le preguntó a su amigo sobre ese lugar, a lo que el semi saijayin respondió que era su mente más profunda.

Mientras se mantenían caminando ambos pudieron ver al frente una enorme reja con barrotes verticales y un sello en medio de la división de la puerta; detrás de la misma se vislumbraban dos enormes ojos que brillaban de color escarlata, así como una enorme sonrisa malévola son dos hileras de filosos dientes blancos. La bestia en cuestión tenía forma canina semejante a la de un perro o un lobo, aunque no era completamente reconocible debido a la oscuridad.

· Vaya así que tú eres una de las dos presencias poderosas que había sentido en tiempos recientes – una voz gruesa y amenazante sonaba al frente de los dos chicos, que pese a lo aterrador del momento se mantenían firmes

· Así es, entonces tú eres el espíritu que vive dentro de mi amigo Naruto –

· ¿Amigo? Jajajaj ¿Cómo un titan como tú puede ser amigo de este perdedor? – el enorme animal preguntaba en tono de burla haciendo referencia a Naruto

· Tal vez, yo también fui un perdedor como él – contestaba Gohan de forma tranquila

· Eso es difícil de creer, quien es un perdedor jamás podrá dejar de serlo – contestaba orgullosamente la enorme criatura

· Yo sé quien eres, eres el Kyuby, el zorro demonio, ¿no es cierto? – Naruto señalando al enorme animal gritaba enojado

· ¡Nunca me llames así mocoso estúpido! – el zorro de color naranja rugía con fuerza, mientras trataba de alcanzar con sus garras al Uzumaki

· ¡Y por qué no! ¡Tú eres el causante de que todo mundo me odie en este lugar! ¡Sabes por todo lo que he pasado por culpa tuya! – el chico de ojos azules gritaba al Kyubi mientras un montón de lágrimas recorrían sus mejillas

· ¡Y tú qué sabes de dolor chiquillos insolentes! ¡yo he sido cazado como un trofeo desde mi nacimiento por la codicia de los de tú especie! ¡únicamente visto como un arma para la guerra! – la enorme criatura le respondía al niño

· Cálmense los dos – Gohan intervenía en la discusión mientras se ponía en medio de ambos

· Gohan, ¿qué haces? – preguntaba un sorprendido niño rubio

· ¿De hecho sí, qué haces? – el Kyubi preguntaba igualmente confundido

· Por lo que puedo ver ambos están unidos de por vida, uno no puede vivir sin el otro, ninguno de los dos es culpable por la situación que están viviendo ni por las desgracias que han pasado

· Y ¿qué quieres, que olvide todo y me vuelva amigo de los humanos, así como así? – cuestionaba sarcásticamente el zorro

· No, quiero que ustedes dos se hagan amigos y trabajen juntos – la respuesta de Gohan sorprendió a sus interlocutores

· ¡Qué! – la respuesta fue simultanea y llena de asombro

· Tal como me escucharon, ustedes son uno, eso no cambiará además se honesto, zorro, Naruto no te ha hecho nada. En cuanto a ti Naruto, el Kyubi ha sufrido mucho, tanto como tú, eso debería valer, para los dos

· Tal vez tienes razón Gohan, pero ¿cómo puedo confiar en él? – el pequeño Uzumaki preguntaba lleno de desconfianza

· ¿Qué hay si me niego? – el zorro preguntaba de manera tramposa

· Entonces te convenceremos – La respuesta de Gohan era concreta

· ¿Cómo así?, con tu poder podrías prácticamente someter a este mundo a tu voluntad, ni Madara Uchiha o el primer Hokage tiene el poder que tú posees, me atrevo a decir que ni el sabio de los seis caminos

· Si ya me has observado sabrás que mi método, no es la violencia

· ¿Cómo es eso posible, los humanos siempre usan la violencia para lograr sus metas?

· Acerca tu pata y lo verás – Gohan se acercaba al biju con la guardia baja

· ¡Estúpido! – el zorro gritaba esto mientras lanzaba un ataque al joven mestizo

· ¡No!, Gohan – Naruto corría para intentar ayudar a su amigo, cuando de repente se detuvo de golpe, al ver algo increíble

· ¿Qué? ¿por qué no te moviste? ¿por qué no detuviste mi ataque? – preguntaba la gigantesca criatura sumamente sorprendida

· Porque no sentí malas intenciones, sabía que te detendrías

· Eres un tipo muy interesante niño, no seré amigo de ese mocoso rubio, pero si lo ayudaré, creo que esto será interesante

· Muy bien zorro, te demostraré que yo, Naruto Uzumaki seré el mejor Hokage y acabaré con las guerras y el odio de este mundo, de veras

· Jajajaja, eres muy gracioso enano, no creo que eso pase nunca, pero en definitiva tú y tu amigo son muy diferentes a los demás humanos. Convénceme y te ganarás mi gratitud

· Ya lo verás de veras

· Y tú el extranjero, será mejor que entrenes bien a este cabeza hueca, algo me dice que no estarás para siempre.

· Te lo prometo, ahora nos vamos. Gracias por tu tiempo zorro

· Te convenceré de que puedes confiar en mí, de veras – sonreía Naruto

Los Son Padre e hijo en el mundo shinobiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora