Capítulo 18: Corazones de hielo y fuego

1K 69 12
                                    

[Nota: como recordarán Goku tiene la capacidad de ver los recuerdos de las personas tocando su cabeza, hare que Gohan tenga la misma habilidad, así como Haku, o sea sean tacto psíquicos]

Gohan y Haku se vieron de frente, el momento fue contradictorio, por una parte, estaban sumamente emocionados de por fin verse cara a cara y ciertamente lo que contemplaron a primera vista era tan encantador como lo que pudieron sentir cuando estaban lejos; ergo, no tenían idea de que decirse el uno al otro, los segundos pasaban y el silencio comenzaba a tornarse incomodo, pese a eso sus ojos no podían dejar de mirar los del otro desconocido fijamente. Hasta que por fin la hermosa chica dijo en un tono ligeramente molesto

· Dígame ¿por qué me está siguiendo?

· No la estaba siguiendo... yo solo... busco a un amigo – decía el Son con un notable nerviosismo

· ¿Por qué está siguiéndome? – insistía la chica

· De verdad... no la estoy siguiendo señorita... yo... - si bien era cierto que Gohan buscaba a Naruto, también siguió los rastros de la desconocida encantadora.

· Entonces dime quién eres – exigía Haku con una voz amenazante mientras tomaba una postura de defensa, aunque detrás de esa maniobra, estaba realmente feliz de estar tan cerca del joven azabache

· Mi nombre es Son Gohan... pero puede decirme... - fue interrumpido por la chica mientras le ponía un kunai en su garganta

· ¡No existe ese nombre! – la joven creyó ser timada, pero eso también le presentaría la oportunidad para algo... diferente

· Es raro lo sé, pero... - el joven mestizo era interrumpido nuevamente

· ¡Silencio! ¡Dame tu mano! – exigía la chica

· ¿Perdón?

· Ya oíste – entonces el Son le extendía su mano derecha y ella hacía lo propio con la izquierda hasta que chocaron sus palmas, entonces Haku comenzaba a descubrir la identidad y los recuerdos de Gohan – Eres un viajero de otro mundo, vienes de un planeta llamado tierra y has estado en muchas batallas y viste mucha muerte y dolor; y pese a ello, tu corazón sigue siendo noble. Tu nombre... de verdad es... Gohan

· Si, me lo pusieron en honor al abuelo de mi padre – decía el semi saiyajin

· Yo soy Haku – contestaba la chica de kimono rosa

· Lo sé, disculpa, mientras tú indagabas sobre mí, no puede evitar hacer lo mismo contigo. Lamento si te ofendí – la disculpa de Gohan era sincera

· Y ¿qué fue lo que viste? – preguntó Haku

· Todo

Comienzo de flash back

Una joven pareja de campesinos estaba junta fuera de su granja, la joven mujer sostenía a una bebe en sus brazos mientras el padre observaba de cerca, lucían ser personas humildes pero sus carencias materiales eran suplidas con creces en amor y cariño. El paisaje era frio, el campo recubierto de nieve completamente blanca, solo comparada con la pequeña alma que tenía poco de haber llegado al mundo; en tiempo esa pequeña vida fue creciendo hasta ser una niña hermosa y radiante de vida, siempre agradecida con la vida por la fortuna de contar con amor y familia.

Pero, la felicidad puede ser efímera, semejante a un suspiro que se pierde en el viento a una llama que se extingue en un parpadeo; aquello que más amas puede abandonarte en un instante. La sangre llama y se hace notar, la madre y la hija no eran comunes, ellas eran... especiales, pero lo "especial" no necesariamente es sinónimo de valorado o apreciado, puede ser algo que genera miedo y desesperación; recordemos ese antiguo dicho, el hombre teme a lo que desconoce a aquello que es diferente.

La pequeña Haku jugaba afuera de su casa, había formado una esfera de agua y la manipulaba como si de un juguete se tratara podía hacerla levitar; la pequeña era tan feliz y sin dudarlo corrió a mostrarle a su madre lo que era capaz de hacer, quería que mamá estuviera orgullosa. Al ver esto la mujer quedó muda de la impresión, de forma inesperada dio una fuerte bofetada a su pequeña hija y esta soltó la esfera de agua con la que jugaba, la niña solo pudo llorar y peguntar que es lo que había hecho mal, su madre al ver el llanto de su pequeña la abrazo y le pidió perdón.

Desafortunadamente a una distancia no muy grande, el padre de Haku contempló todo, mientras dejaba caer sus herramientas de trabajo un sin número de lágrimas brotaron de sus ojos cual cascada. Al poco rato dentro de la casa el hombre completamente destrozado, dio muerte a su esposa, la mujer inerte yacía en el piso empapada de sangre, después fue con dirección a su hija, el hombre odiaba lo que estaba haciendo, pero sabía que era su responsabilidad, su deber sagrado acabar con esa maldición que tanto dolor le había traído en el pasado a su gente, aun cuando esto significara destruir a su familia y matar su propio corazón. Después de eso el recuerdo se volvía borroso, lo único que recordaba la chica de largos cabellos negros era que quedó inconsciente y al despertar su casa estaba destrozada con cientos de estacas de hielo y su padre muerto.

· Yo, lo siento mucho – Gohan cabizbajo decía eso a la chica

· No tienes por qué sentirte mal, eso pasó hace mucho – recomponía Haku

· Pero, tú eras inocente, no había ningún motivo para que eso tan terrible sucediera – el son trataba de entender

· Gohan, tú lo sabes tan bien como yo, el mundo es cruel, a veces ser inocente no basta, en ocasiones la verdad no es suficiente – la hermosa muchacha trataba de dar tranquilidad al hibrido

· Al menos... hay un por qué – el azabache buscaba una explicación

· Solo el miedo a lo desconocido, solamente el temor a que el poder en manos ajenas se utilizado para arrebatar a otros su tranquilidad y su estilo de vida, la falta de perdón y empatía; la rigidez ante la posibilidad de cambio. Mientras existan algunos que recuerden lo que fue, siempre habrá quien sea incapaz de ver lo que puede ser

Ante esa respuesta los dos quedaron en silencio, ambos estaban sentados en el césped, con sus piernas encogidas; semejante a como se colocan al estar meditando, sus cuerpos estaban inclinados hacía el frente tratando de estar lo más cerca el uno del otro. Esta vez a diferencia de la primera la falta de sonido y de palabras era tranquilizante, se contemplaban como si admirarán la más bella obra de arte jamás creada; podían ver cada detalle del rostro del otro: sus cabellos, sus cejas, sus bocas, sus mejillas, pero por sobre todo sus ojos; en el caso de ambos eran oscuros, pero si le preguntaran a cualquiera de los dos, irradiaban una luz, más cálida y hermosa que la de cualquier estrella o incluso el mismo sol.

De momento ambos se pusieron de pie, pero sin romper el contacto visual ni un segundo, de manera casi cronometrada, dieron los dos un paso al frente y poco a poco sus rostros se acercaron, hasta que por fin sus labios se encontraron. El roce entre ambos era divino, cálido, hermoso, seductor, sensual; los adjetivos eran innecesarios en ese momento; las manos de Gohan tomaron a Haku por su cadera atrayéndola hacia él; mientras que las de la chica tomaban las mejillas del Son para después pasar con sus brazos alrededor de su cuello, así se quedarían por un rato sin poner atención al tiempo. Haku en silencio dejaría cae unas cuantas lágrimas de sus ojos cerrados, ella solo podía contemplar la perfección de ese momento que quisiera que fuera eterno; pero ella sabía de su misión, de su compromiso, aunque eso la matara por dentro... no podía fallar.

Los Son Padre e hijo en el mundo shinobiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora