Capítulo 52: El regreso de un ángel

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Tal y como habían dicho Goku y Vegeta se teletransportaron al planeta del Kaio del norte para comenzar con el entrenamiento especial que el hombrecillo azul y regordete les había prometido, este último pregunto sobre Gohan y Trunks, a lo que el Son respondió que ellos se quedaron en la tierra shinobi para entrenar a los ninjas en el uso de ki y fortalecimiento físico y mental. Además, ambos progenitores creyeron que sería mejor que ellos dos desarrollaran sus estrategias y estilo de pelea por su cuenta y no volverse dependiente del de ellos.

Kaio sama notó de inmediato que su querido discípulo saiyajin estaba muy cambiado, el tomar su responsabilidad como Padre le hizo madurar mucho, pero sobre todo la aparente muerte de su querida Kushina Uzumaki. Por su parte Vegeta también se notaba distinto, este estaba muy emotivo ya que ahora que su esposa había fallecido, él no tuvo otro remedio que acercarse a sus hijos y fungir también como Papá, para finalmente cuidar tanto del bebe como de su contraparte crecida.

· Bueno muchachos es hora de empezar el entrenamiento – el supervisor de la galaxia del norte hacía un movimiento de manos y aparecía en las muñecas y tobillos de los saiyajines unas enormes pesas de diez toneladas

· ¿Para qué es esto? – preguntaba Vegeta

· Eso chicos, serán sus indumentarias estándar de ahora en adelante – se limitaba a responder el Kaio

· Por mi está bien – respondía Goku en tono de burla

· ¡Qué dijiste insecto! – rezongaba Vegeta

· Nada... - resoplaba Goku con ironía

· Así, pues te reto a darle mil vueltas al planeta, veras como muerdes el polvo – el príncipe lanzaba su desafío

· Acepto el reto, Vegeta – los dos comenzaba a corres como locos

· Oh Dios, espero que estos dos no acaben con mi planeta – se decía el hombrecillo azul dando un suspiro de resignación

Selvas del mundo Shinobi

Una pequeña niña pelirroja con el cabello largo y crespo se encontraba sola entrenando a la mitad de un bosque del país del cielo, la pequeña que solía ser solitaria y con un carácter muy aguerrido se alejó de sus compañeros de equipo y sensei ya que, ella no se sentía parte del equipo. La ruda y temperamental Karui trataba de descubrir como funcionaba el misterioso báculo rojo que el señor Goku le había prestado, él azabache le dijo que era un arma muy poderosa y en efecto su resistencia era incomparable ya que todos los kunais y shurikens que chocaban contra él se rompían.

Aun con lo anterior la chica no lograba aprovechar todo su potencial, estaba segura que esa magnífica reliquia guardaba muchos secretos; había pasado semanas buscando algún hecho o uso superior, pero por más que buscaba no lo encontraba. Por si no fuera poco otros niños de la aldea la molestaban e intentaban quitarle el obsequio que el poderoso visitante le otorgó, eso ocasionó peleas y discusiones de las cuales la pelirroja no había salido bien librada, luego de un día de duro trabajo la niña se recargo en un árbol y apoyando su frente con sus rodillas se puso a llorar, estaba harta y ya no soportaba que los demás chicos se burlarán de ella por ser la poseedora del instrumento del saiyajin.

[Inicio de flashback]

· Ya les dije idiotas que es un regalo de alguien especial y no se las daré – la pequeña Karui estaba tirada en el suelo mientras un grupo de niños la golpeaba e intentaba quitarle el báculo de Goku.

· Vamos mocosa estúpida, entréganos ese palo rojo y ya deja de sufrir – un brabucón le decía con aires de superioridad a la pequeña en el suelo

Los Son Padre e hijo en el mundo shinobiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora