Los Son Padre e hijo en el mundo shinobi

Capítulo 34: Del sentimiento de la niebla al miedo de la nube

Al finalizar la tremenda demostración de poder el Son solo volteó a ver a la mujer de largos cabellos castaños, esta se aproximó lentamente al hombre pelinegro que ya se había tranquilizado, ella se detuvo a un metro de él y lo miró fijamente al rostro. Lady Terumi pudo ver en sus bellos ojos oscuro un gran dolor y vacío que la primera vez que lo conoció no estaba, algo en ese hombre había cambiado, su espíritu estaba apagado, su sonrisa era inexistente; su rostro en general había cambiado para mal, solo podía ver un tristeza profunda y abismal.

· Son Kun, gracias por salvarme – la mujer daba su gratitud al saiyajin con una sonrisa tierna pero sumamente conmovida y con una lágrima que escapaba de su único ojo visible

· No hay nada que agradecer, era mi deber proteger a mis amigos, esta vez sí pude hacerlo – respondía con tristeza el azabache

· Goku yo... - Mei no pudo terminar de hablar cuando el hombre paso de lado y se fue caminando lentamente y cabizbajo

· Lady Mizukage, que bueno que está bien y a salvo – un Ao que llegaba corriendo y casi sin aliento

· Ao, descuida, me encuentro bien – respondía la mujer con mente perdida

· My Lady, el sujeto que me encargó cuidar, se levantó y... - el hombre fue silenciado por Mei al instante

· Si Ao lo sé, él fue quien me salvó – se limitó a contestar Mei

Ahora bien, un rato más tarde, casi al anochecer, Goku se encontraba sentado en un muelle, el poderoso hombre estaba callado, sin muchas ganas de nada, comenzaba a creer que su poder no era la respuesta para todo, que sus habilidades eran insuficientes y más aún que incrementarla no resolvería nada; al fin y al cabo, su poder, aunque muy superior al de cualquier ser en ese mundo no sirvió de nada para salvar a su gran amor. Lo cierto es que extrañaba mucho a Kushina y se sentía fatal por haberle fallado, por fracasar en lo que le había prometido, cuidar de ella.

El Son mayor estaba tan inmerso en sus pensamientos que no se percató de que una persona llegó a su lado, esta no era otra que la hermosa Mei Terumi, sin que se diera cuenta Goku, se sentó a su lado. El guerrero finalmente notó su presencia y la miro con indiferencia, pero no con molestia, de hecho, en ese momento vería a cualquier persona de ese modo, esa era la razón por la que se había ido de Konoha en primer lugar, él sabía que en ese momento no podría estar bien para los chicos, en especial para Naruto, quien más lo necesitaba, pero justo en ese momento, la castaña interrumpió sus pensamientos.

· Goku, sé que no es asunto mío, pero solo quiero decirte que lo siento mucho, yo de verdad lamento tu perdida – Mei daba sus condolencias sinceras a su acompañante

· Mei ¿cómo? ... - el Son no tuvo tiempo de preguntar cuando la mujer respondió

· Es un mundo pequeño Goku, una noticia de ese calibre no pasa desapercibida. Ella era muy especial, era la última de un linaje legendario, el clan Uzumaki y además era una ninja excepcional – la líder hablaba con franqueza

· Ya veo – el Son seguía triste

· Son kun, quiero serte muy honesta, yo envidié a Kushina Uzumaki cuando la conocí ahora veo que tuve razón en hacerlo – la hermosa dama de ojos verdes se sinceraba con el azabache

· ¿A qué te refieres? – interrogaba Goku

· Ella era muy afortunada, ella te tenía a ti, puedo ver que tú le serás fiel por mucho tiempo, sino es que por el resto de tu vida. – Lady Terumi respondía con honestidad

· Para lo que sirvió, mi poder no fue de ayuda en absoluto, no pude salvarla – respondía el hombre al borde del llanto

· No hablo de tu poder hablo de ti como persona, tú de verdad llegaste a amar a esa mujer y te entregaste en espíritu a ella. Casi ninguna persona puede hacer eso – continuaba con su enseñanza la Mizukage