Life Haack

Próxima vida.

No acostumbro perder nada nunca. Soy muy controladora de mis cosas desde que soy bien pequeña. No es que no comparta, sí que lo hago. Si no que lo mío es mío y tengo que saber donde está.

-No puede ser que hayan desaparecido-meneo las manos en el aire-las cosas no se evaporan-me siento en una silla de la mesa.
-Pero si se pierden-dice Abril sonriendo- eres un poco despistada.
-Mira niña, yo nunca, ¡NUNCA! pierdo nada. Jamás. Asique no vas a venir tú a decirme que soy despistada. Porque es lo único que no soy-le señalo con el dedo.
-Aha- me dice ignorándome y al final, me saca de mis casillas.
-¿Porqué se ha venido a vivir aquí? - miro a Mónica.
-Sus padres son grandes amigos míos de la infancia. Por lo visto, - dice mirándola- se estaba desviando del camino y haciendo cosas que no tocaban, asique me preguntaron si podía entrar en el colegio privado de Hugo y Daniela para ver si volvía a encarrilarse- me mira-su padre me diseñó y construyó esta casa-me explica.

Se me hace un nudo en el pecho. Malditos compromisos que se crea la gente. Miro hacia atrás, todos están callados y Abril, que cuando la conocí parecía buena, se está riendo tras Mateo y Hugo.

-Voy a buscar yo misma si te parece bien-cambio de tema mirando a Mónica.
-Nosotros te ayudamos-dice Hugo mirando a Mateo mientras este asiente-nos cambiamos y bajamos.
-Yo no, lo siento- Abril se pone la mano en el pecho-voy a comer que estoy muy cansada-sonríe y se va.

Daniela no sabe qué hacer. Me mira un poco tensa y seguidamente a Abril. Está en una edad un poco complicada, como todos. Supongo que le doy pena pero se muere por comer y sentarse en el sofá a ver cualquier video de YouTube.

-Dani, puedes ir a comer, tranquila-le sonrío porque ella aún es pequeña para entender las cosas.
-No, voy a ayudarte-al final se decanta por ello y Abril nos mira seria.

Daniela y yo nos hemos bajado al sótano a buscar aunque estoy segura al cien por cien que es imposible que estén aquí, porque yo no bajé ayer en ningún momento. En efecto no encontramos nada.
Los baños, los cuartos, el comedor, cocina, hasta dentro de la lavadora hemos buscado. Nada. No hay absolutamente nada. Estoy perdiendo la cabeza.
Tengo una copia de las llaves en casa pero me niego a no encontrarlas porque cualquier persona puede abrir mi coche y si llamo a mi padre para contarle lo ocurrido y poder cambiar la cerradura, me quitará el coche y estaré lamentándolo el resto de mi vida.

-¿Nada? - miro a Hugo.

Él niega con la cabeza.

-Nada-responde Mateo.
-Esque no puede ser, chicos-me pongo la mano en la frente-yo estoy segurisima de que mis llaves estaban dentro del bolso y el bolso en el cuarto de Hugo.

Se han sentado todos a comer y yo estoy al lado de Hugo con la mirada fija en un sitio. No he comido ni voy a hacerlo. En dos horas tengo que irme a baile y no he encontrado las llaves.
Me levanto y noto que todos me miran pero sin hacerles caso, salgo al sol que hace en la terraza, me siento en una cama balinesa que tienen y pienso.
¿Yo me merezco estar así? ¿Cuanto hacia que yo no tenía un nudo en el pecho? ¿Debo alejarme de ellos para evitar problemas con su nueva compañera de casa?
En caliente diría que sí. Que por mi bien, debería alejarme una temporada para poder aclarar mi mente porque no puedo permitirme el lujo de estar tensa siempre que veo a Abril que al final, es una conviviente más en esta casa.
En frío diría que estoy tremendamente pillada por Hugo y lo pasaría muy mal alejándome de él. Pero hay que saber superponer las cosas. Y mi tranquilidad mental va por encima de todo.
Y pienso esto porque gran parte de mi mente, piensa que esa chica, ha cogido mis llaves y están escondidas por algún sitio.
Estiro mis brazos para relajarme, respiro hondo y agacho la cabeza.

-No es real- digo alargando mi brazo para quitar algunas piedras.

Me rio cuando mis llaves aparecen justo debajo de mi escondidas por algunas piedras blancas que las tapan. Las cojo y voy corriendo dentro.

-Aquí están-grito nada más verlos.

Todos se giran, sonríen y aplauden, pero veo como Abril sopla y se vuelve a girar a ver la tele. Sé que ha sido ella a ciencia cierta, pero esta vez no diré nada. Sólo celebraré mi victoria en silencio.

-Es muy tarde, me tengo que ir a baile-le quito la mano a Hugo cuando me la coge.
-¿Abi? - mira su mano y luego a los ojos.
-Tenemos que hablar-sin decirle nada más, me giro y salgo fuera. Él me sigue.
-¿Que pasa? - me dice con un hilo de voz.
-Hugo, he estado pensando desde que Abril se perdió la otra noche en Málaga-lo miro y los ojos se me implan-yo... Siento por ti cosas que nunca jamás he sentido por nadie- lo cojo de la mano y veo como él se muerde los labios-pero esta situación me está provocando mucho estrés y eso implica no poder centrarme en mis estudios-bajo la cabeza.
-¿Que me quieres decir?- le tiembla la voz.
-Hugo, yo no puedo estar con una persona que convive con otra que me odia o me hace la vida imposible-suspiro-sé que en otro momento de la vida, esto podría funcionar, pero no ahora que estoy centrada al cien por cien en mi futuro-lo miro y cojo su rostro con mi mano- te quiero un montón-digo cuando una lágrima cae por mi mejilla-desde que me dejaste la camiseta en aquella piscina de Isla-le sonrío.

Él ladea la cabeza, la apoya en mi mano y cierra los ojos.

-Puede funcionar aún estando Abril, Abi-me mira.
-Te está utilizando, Hugo-le digo molesta porque odio que él no se dé cuenta. Quito mi mano de su cara y doy un paso atrás-cuando abras los ojos, llámame-sonrío aunque estoy rota.
-Abi, no te vayas por favor-da un paso hacia mi y me coge de los hombros-por favor.

Le cojo la mano con mi mano y le doy un beso.

-Lo siento-susurro. Él me coge la cara, me estira hacia arriba hasta que me hace ponerme de puntillas y me besa mientras lloro sin consuelo.

-Mi estado de ánimo no puede depender de una persona que me odia. Y esa persona vive contigo, Hugo-me despego de él y con todo el dolor del mundo, me giro y ando hasta la puerta- nos vemos en la próxima vida, Hugo Haack.

Él se ha quedado ahí plantado. De pie sin menearse y con la cara descompuesta. Cierro la puerta y me meto en el coche. Le pego dos puñetazos al volante tan fuertes que mis dedos crujen.
Lo quiero tanto que soy capaz de irme para evitar un desastre con esa chica.
Asique me limpio la nariz y los ojos, arranco el coche y me voy con mi dolor a baile.

😬😬😬 No se que deciros familia. Prometo que esto pasará. Pero Abi cree que si se aleja de Hugo, se calmaran las cosas con Abril.
¿Qué opináis vosotras?
¿Qué pasará con nuestra pareja tan amada?
¿Hugo la buscará?

AHHHH! Estoy nerviosa hasta yo😂
No os olvidéis de la 🌟 si os está gustando.
Comentad lo que creéis que pasará en los próximos capítulos!!
Hasta mañana, Familia❤️