Life Haack

Fight.

Por eso Kimberly no nos cogía el teléfono. Lo he pasado por alto, pensaba que estaría ocupada con su abuela, haciendo cosas para el niño, pero ignoraba que pudiera estar con Steff. Cosa que no me sorprende pero sí me enfada.
Frunzo el ceño, Hugo me mira pero permanece callado aunque evita mirar para alante, este tipo de personas le ponen nervioso y yo lo puedo notar.
A mi no me ponen nerviosa, ni me dan miedo, son dos niños de mamá que se cambian al salir de casa por ropa chunga para aparentar lo que en realidad no son.
Toco el claxon para que se aparten de mi puerta de entrada, pero en lugar de ello, me miran y se ríen.
Vuelvo a pitar, Kimberly que me ha visto, se pone nerviosa y empieza a menearse.

-Vamos chicos, apartaros que pasen-dice acercándose a mi ventanilla- hola chicos-dice cortada sin mirarme a la cara.

Hugo no le contesta, está mirando por su ventanilla y yo la miro mal.

-Ellos ya se iban-me responde a mi cara de pocos amigos.
-Ellos no tendrían que haber venido-le respondo-por eso no me cogías el móvil intuyo-levanto una ceja.
-Bueno... Esque me aburría y me han dicho de quedar-le tiembla la voz.
-¿En la puerta de mi casa?
-Em... - responde ella sin saber qué decir.
-Abigail-me dice Hugo saliendo de mi enfado-da igual, entra a casa y déjalos aquí-mira a Kim- luego hablaremos, si esque quieres-vuelve a mirar su ventanilla.

Subo las ventanillas, veo como Kimberly se rasca el pelo. No se lo esperaba, esperaba que Hugo y yo viniéramos a la hora de cenar.
Vuelvo a tocar el claxon, esta vez, insisto hasta que uno de ellos se gira, frunce el ceño y me hace un corte de mangas.

-Abigail, para ya pesada-me dice.

Miro a Hugo. Se ha puesto tenso y ahora en vez de mirar por la ventanilla, mira fijamente al grupo de personajes que está en la puerta de mi casa. Suspiro, quito la llave de contacto por si decide venir alguno a subirse y salgo con mis humos acelerados.

-Jeorge, que te quites de la puta puerta para que pueda entrar a mi casa-le exijo.
-O qué-me amenaza.

Yo suspiro, camino de lado a lado mientras todos se ríen y se chocan los puños por la contestación que me ha dado. Sí, pésimo.

-Vamos Jeorge, por favor quítate- le dice Kim con voz dulce.
-Cállate ya, Kimberly-le digo con angustia.

Me vuelvo a girar, los miro pero ellos me ignoran.

-Si a la de tres no os habéis quitado, llamo a la policía para que os aparte is. UNA- me giro hacia el coche y veo a Hugo con los ojos puestos en un punto, esta molesto- DOS- digo mientras me paro en la parte de su espejo, lo miro y me sonríe. Que cosa más bonita me ha presentado la vida- Y TRES- voy a girarme pero antes pasa por detrás de mi Jeorge y me toca el culo.

Me giro bruscamente y lo veo corriendo para irse con su grupo de amigos que le está aplaudiendo. Suspiro y rezo para que Hugo no lo haya visto. Mi rubio es muy flexible, no es para nada celoso y más que mal genio, es muy vergonzoso. Pero claro, hay que conocerlo. Miro a Hugo que se está desabrochando el cinturón y me voy corriendo a su puerta.

-Hugo, no hace falta que vayas, no ha sido nada-le cojo del brazo.
-Solo voy a hablar con él - me dice sin mirarme. Solo con la vista fija en el grupo.
-En la que te has metido-oigo decir a Kim.

Y cuando le dice eso, los hermanos Steff y Jeorge se levantan con el pecho sacado.

-¿Qué? - dicen al unísono.

Hugo se queda plantado delante de ellos y de repente se ríe por su reacción.
Ellos son dos chicos medianamente altos, pero no más que Hugo y Mateo. Son castaños, tez muy blanca como es típico aquí y los ojos marrones. Tienen bastante volumen de músculo, porque no tienen otra cos que hacer aparte de ir al gimnasio, porque se negaron a seguir estudiando y claro, trabajar no les viene bien.

-¿Cuál de los dos le ha tocado el culo? - les señala.
-Yo, que pasa-doce Jeorge acercándose a Hugo.

Hugo reacciona y da un paso para atrás. Lleva las manos entrelazadas en la espalda.

-Te agradecería que no lo volvieras a hacer, por favor-le advierte con buenos modales, aunque todos sabemos donde va a acabar esto.

Hugo se gira y hace intención de volver al coche, pero algo le frena.

-Quién me lo impide-y antes de que Hugo pueda girarse, me vuelve a tocar el culo.

Hugo se gira, esta vez con cara de pocos amigos, se acerca a él y en a penas dos mili segundos, ha clavado su puño en la nariz de Jeorge. Él retrocede, tropieza con una piedra y cae al suelo.
Yo empujo a Hugo hacia atrás, Hugo reacciona de la mejor manera, se rasca la mano, porque se ha hecho daño, retrocede y se va al coche, pero Steff no le deja. Lo persigue, lo coge por el cuello de la camisa y tira de él.

-Subnormal-le grita Steff a Hugo.
-Ay-dice Hugo removiéndose hacia atrás, luchando para no caerse.

Hugo se gira, se encara a Steff y yo me acelero.

-Hugo, para-le digo cuando levanta una mano.

Él me mira, Steff le da un golpe en el pecho, pero a Hugo le ha hecho cosquillas, porque no ha dejado de mirarme, baja la mano, mira a Steff y suspira.

-Por ella no te pego un puñetazo y te dejo como tu hermano-le dice con rabia en sus palabras.
-Tu eres un pringao - le dice Steff ahora achantandose.

Hugo intenta reprimir sus ganas de pegarle, pero Steff no se lo pone fácil. Hugo rasca su nariz, luchando por no soltarle una hostia y dejarlo tonto, pero al final no lo consigue.

-Tu eres el retrasado de la familia, ¿no? - se ríe de nuevo Steff intentando picarle.

Finalmente Hugo se gira y al volver lo empuja y cuando lo va a tirar al suelo, mi padre sale corriendo por detrás de mi coche y coge a Hugo.

-Vale ya, Hugo-lo empuja hacia atrás.
-Han empezado ellos, Taylor-le grita a mi padre.

Yo abro los ojos por las confianzas que se ha tomado Hugo en hablar así a mi padre. Steff y Jeorge se han puesto nerviosos y Kimberly está llorando. Mi padre se gira, mira a Hugo serio y le asiente.

-Lo sé, Hugo. Tu no te preocupes-le responde mi padre.

Yo me voy detrás con Hugo y le miro el cuello, le ha dejado marca de la camiseta, pero se irá pronto. Él me coge por la cintura y me aprieta.
Mi padre ve a Jeorge sangrando por la nariz pero lo pasa por alto.

-Quiero que os vayáis de aquí y que no se os ocurra volver a venir a no ser que lo hagáis para pedir disculpas-les dice mi padre- esta noche llamaré a vuestros padres para explicarles cómo os habéis involucrado en una pelea con mi hija y su novio recién llegados de España-se gira, me mira y me giña el ojo-en mis propiedades-se señala a él mismo.
-No, por favor señor Baker, no les diga nada-le suplica Steff.
-Cada acto tiene su consecuencia- le dice mi padre-a lo hecho, pecho-coge a Hugo por los hombros-vámonos dentro chicos-se queda mirando a Kimberly-luego hablaremos seriamente.

Nos giramos y nos vamos.

¡QUIERO PEDIR DISCULPAS! Se que estoy ausente últimamente, lo siento. Esque entre lo ocupada que estoy y el poco tiempo que tengo... No tengo excusa, intentaré subir más amenudo aunque tampoco me he demorado mucho.
Espero que lo estéis disfrutando tanto como yo lo hago escribiendo.
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¿Creéis que Kimberly hace bien las cosas?
¿Debería dejar a sus "malas compañías" de lado y centrarse en su bebé?
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