Life Haack

Allison.

*flashback*

Mi madre hace días que está ingresada, la abuela Charlotte y el abuelo Franklin han venido de España para cuidarme. Me han dicho que está muy malita pero como aún soy pequeña según mi padre, aunque tengo once años, no me han dejado ir a verla, la echo de menos.
Mi padre ha venido al colegio a por mi, cosa bastante extraña. Tiene los ojos rojos de haber llorado pero se mantiene fuerte. Entro al coche y aunque le pregunto varias cosas, él a penas me responde hasta que desisto y me callo.
Hace un día lluvioso y mucho frío. He llegado al hospital con mi padre, vamos cogidos de la mano y noto que está muy tenso. Subimos por el ascensor cuatro pisos y salimos de él. Andamos un pasillo súper largo y cuando creo que las piernas se me van a dormir de andar, entramos a una habitación.
Mi madre, tan guapa como siempre, esta tumbada en la cama viendo la tele,con cables por todas partes.

-¡Momi!- le digo corriendo hacia ella y la abrazo.
-Hola, Abi-me acaricia la espalda-¿cómo estás, mi vida?- tose.
-Bien, mamá. ¿Y tu? ¿Te pones buena ya? - la miro sonriente para darle ánimo.

Pero ella aparta la mirada y cuando me vuelve a mirar, esta implada.

-Mi vida, la mamá no va a mejorar-me acaricia el pelo y yo me encojo.

Los oídos me pitan, los ojos se me nublan y mi pulso empieza a acelerarse mucho.

-¿Qué? - empiezan a caer lágrimas por mis ojos.
-Mamá está muy malita del corazón, Abi-me sonríe.
-No puedes irte ahora, mamá. ¡Soy muy pequeña! No te mueras, por favor-le suplico como si ella pudiera hacer algo.
-Mira-me dice y se inclina como puede hacia adelante-esto es un collar que mi abuela le dio a tú abuela y ella me lo dio a mi-se lo quita con lágrimas en los ojos y me lo- ahora tiene que ser tuyo, hija. Cuídalo con todas tus fuerzas hasta que tus hijos crezcan y entonces y solo entonces, dáselo como tesoro de la familia-se tumba y me coge la mano.
-Allison-la llamo por su nombre-no me dejes sola-pongo mi cabeza en su regazo y lloro a mares.
-No vas a estar sola nunca-me acaricia-tienes a tu padre, a tus abuelos y yo te estaré vigilando desde arriba- sonríe.

No entiendo nada de lo que está pasando. Quizá mi padre tenía razón y no estaba preparada para venir. Nos hemos ido cuando me he calmado un poco aunque sigo súper triste porque no creo que vea más a mi mamá.
Cuidaré esta cadena hasta el fin de mis días y prometo que cuando me haga mayor, aprenderé todo acerca del corazón para que ningún niño se quede más sin mamá.
*final flashback*

El agua cae en mi cabeza y por un momento no respondo.

-No, Abril-digo agachándome a cogerlo.

Lo miro en las palmas de mis manos y aunque la ducha está encendida, se oye mi llanto. Miro a Abril, se le ha quitado la sonrisa y ahora tiene un poco de preocupación en su rostro.
Me lleno de ira, frunzo el ceño y con la mano derecha le suelto un tortazo en su mejilla que hasta a mí me ha picado. Ella sólo pone sus manos en la cara y me mira indignada.

-Esto es el único recuerdo que me queda de mi madre-le digo-y lo has roto-acabo susurrando.

Abril se ha quedado sin palabras. No ha rechistado nada y las demás han salido detrás de mi. ¿Qué hago ahora? Siento que he decepcionado a mi madre.

Me pongo una falda de volantes con unas medias transparentes y unas botas con la suela muy alta. Una sudadera de Calvin Klein ancha y me recojo el pelo en un moño bajo. Plancho mi flequillo y me maquillo como puedo porque sigo llorando.
Estoy frente al espejo del baño y veo como se arrima Abril.

-Abi, yo...
-Mira, no quiero ni que respires el mismo aire que yo. ¡DÉJAME EN PAZ! ¡DÉJAME VIVIR! -le grito enfadada-yo no me he metido en tu vida y tu solo haces que joder la mía - me giro y la veo cabizbaja- ve a molestar a otra persona-paso por su lado, le empujo del hombro, cojo la mochila y me voy.

Salgo fuera, respiro aire fesco y limpio mi última gota de la mejilla. Menos mal que el maquillaje es waterproof. He guardado el collar en la caja de las gafas y he llegado a la puerta para esperar a Nico que pasa a por mi para ir a comer.
He estado súper ausente toda la comida pensando en cómo decirle a mi padre que he roto la cadena o si debería escondérselo aunque siempre la llevo y sería sospechoso. Y esque me siento mal si miento a mi padre más de lo que le estoy ocultando las cosas.
Voy en la moto con Nico. Llevo puesto el casco de su novia, que por cierto va a ballet juvenil y no lo hace nada mal. El aire me da en la cara, voy agarrada a Nico y lo cierto es que, aunque tenga muchas ganas, sigo igual de triste por mí cadena.
Aparcan todos las motos, Mateo sale y yo miro desde fuera la ventana de Hugo. Su cortina blanca está corrida asique tenemos que aprovechar para entrar todos corriendo.

-Como lo hacemos-nos mira Mateo a todos.
-Que suba antes Abigail y luego que baje con él-vota Telmo y a todos les parece buena idea.

Asique nerviosa, subo las escaleras y en la última, me agacho para asegurarme que su puerta está cerrada. Corro de puntillas hasta la puerta de Mateo, toco a la suya y me escondo.
Oigo abrir la puerta y cerrarse al segundo asique repito lo mismo. Esta vez la puerta se abre más de rápido y maldice en voz alta pero la vuelve a cerrar de golpe.
Me pongo delante de la puerta. Mi corazón va tan rápido que si fuera un martillo, partiría la puerta por la mitad. Llamo de nuevo.

-Me cago en todo-lo oigo desde de dentro-Mateo tío, para de hacer el sub...nor...mal...- dice a la vez que abre la puerta-Abigail-dice con esperanza mientras ríe.
-Feliz cumpleaños Hugo Haack-me tiro a sus brazos.

Hola, hola familia!!! ¿Cómo estáis? Hace unas semanas empecé de nuevo mi rutina de ejercicio y ¡NO PARO! ¿Vosotros hacéis ejercicio? 😂 ¿Desde donde me leéis?
¿Creéis que Hugo se alegrará de ver a Abi?
¿Como reaccionará Hugo al ver de nuevo a Abi después de una semana pasándolo mal?
Espero que os esté gustando, 🌟 si es así. Besos. No vemos mañana! ❤️