NÉMESIS

La espera

Aquellos cuatro meses parecieron años. Estaba tan ansiosa por subirse a un ring e impresionar a su padre, que apenas pudo pensar en otra cosa. Los suspensos llegaban a casa sin parar al igual que las notas de los profesores. Su madre había tirado la toalla con ella hacía mucho. Del mismo modo que ella había dejado de escucharla. Sabía falsificar sus notas perfectamente. Y no tenía problemas para inventarse excusas cuando su madre no podía acudir a las citas con la tutora. En el peor de los casos, llamaban a su padre y él lo arreglaba todo.

El viernes por la tarde previo a su primer combate, su madre se arregló para salir de fiesta con sus amigas. Adrasteia estaba en el salón haciendo flexiones mientras Aura terminaba los deberes. Ambas alzaron la cabeza al ver a su madre con un vestido corto y tan escotado que casi podían verle el ombligo.

- Tenéis comida en la nevera. No abráis la puerta bajo ningún concepto. Llegaré tarde.

Prácticamente no las miró. Se limitó a ponerse su hermoso abrigo negro mientras revisaba el contenido de su bolso.

- ¿Por qué no nos vamos a vivir con papá? – inquirió Aura.

Adrasteia suspiró haciendo una pausa con la respiración entrecortada.

- Hasta los dieciséis es el estado el que decide. Pero no te preocupes, cuando me haga una profesional podré mantenernos a las dos.

- ¿De verdad quieres ser boxeadora?

- Por supuesto, llevo toda la vida preparándome para esto.

Aura no insistió en aquello, en parte porque sabía lo importante que era el vínculo que tenía con su padre gracias al boxeo. Y lo mucho que ansiaba Adrasteia que se sintiera orgulloso de ella. Pero para Aura, que había entrado en aquel mundo para acercarse a su hermana, no podía imaginarse a sí misma en un combate de verdad. Habían visto juntas decenas de veces la película de Million Dólar Baby. O al menos la primera parte. Al igual que las de Rocky. Y cada vez que las volvían a ver, tenía que apretar los puños y apartar la mirada. Entrenar y combatir eran dos cosas muy distintas, y Adrasteia estaba a punto de averiguarlo.