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CAPITULO 46 GOT TO GET YOU INTO MY LIFE

SHADIA

Daniel se apareció sonriendo en mi puerta.

— ¿Alguien pidió comida? —Reí un poquito.

Era demasiado encantador cuando se lo proponía —y cuando no, también—. Me pregunté cuántos suspiros les robaba a las chicas que trabajaban allí; seguro más de una moría por él o quizás más de una ya había pasado por su cama.

Olvida ya esos pensamientos tontos.

— ¿Tienes hambre ya?

—Mucha —confesé—. Siento como si no hubiese comido en semanas.

—Con calma ¿Ok?

—No soy una salvaje, solo alguien con hambre —protesté.

Sonrió mostrando su perfecta dentadura, esa que sabía los lugares exactos de mi cuerpo donde debía y quería morder.

Ya, en serio, detente.

Eso no va para ningún lado.

— ¿Te molesta si almuerzo aquí contigo?

Pensé en lo que había dicho Izzy.

—No. ¿No te dicen nada?

—Ventajas de trabajar y estudiar en este hospital. —Me guiñó un ojo y nuevamente el monitor me delató demasiado.

Ya basta de tanta tortura.

¡Cálmate!

Ambos empezamos a comer en silencio, quizás absortos en alguna clase de pensamientos indescifrables para el otro.

—El Doctor Wu me ha confirmado que vendrá en una hora a verte —rompió el silencio.

Mis labios formaron una línea recta, con una especie de sonrisa incómoda.

—Gracias.

Él no lo sabía, pero a veces me sentía extraña a su lado; en un momento creía tener confianza, las palabras fluían, el ambiente era ideal; pero otras veces había incomodidad, no sabía qué decir, sentía que sobraba y desconfiaba hasta del aire entre los dos.

Supuse que me hacía falta conocerlo más, pero no creía que eso me llevase a algo bueno.

— ¿Qué piensas? ¿Te sientes bien? —interrumpió mis pensamientos cuando ya habíamos terminado de comer.

—Sí. —Se acercó a recoger los platos y dejar todo en orden.

—Dan... —Me arriesgué—, dijiste que hoy me podría ver en el espejo...

El asintió lentamente como quien no sabía que decir.

—Le pedí ayuda otros, pero al parecer alguien a quien no voy a nombrar, les ha pedido a todos que ignoren mi petición. Y ¿sabes? Eso solo me hace sentir peor. Ya incluso me da miedo el reflejo que vaya a encontrar.