Capítulo 32 (E)

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—Con este último asunto dejamos por terminada la primera parte de la reunión, les dejo invitados a comer y beber algo.

<< ¿Primera? >>

Miré aburrida al chico que aun me tenía en sus piernas, toda la reunión estuve sentada en sus piernas.

—Alexia, ¿me acompañas? —Zali se levantó junto a Sean.

—No sé dónde pero mis piernas están acalambradas —me quejé a lo bajo.

Dexter me soltó y nos levantamos.

—Iremos por algo de beber —Sean se despidió de beso en los labios con Zali.

—Cualquier cosa me llamas —Dexter me miró y asentí.

—Estoy aburrida —murmuré una vez nos quedamos solas.

—Tengo hambre —tocó su estómago.

—Vamos por algo de comer.

Caminamos hasta una de las mesas y tomamos algunos bocadillos.

—Saben a naranja podrida —me asqueé al probar uno de los bocadillos.

—Son los favoritos de Celeste —se ríe y me miró—, solo por eso están ahí, es la única que los come.

—Son horribles.

—Luna.

Zali se giró y yo miré que bocadillo probar.

—Luna —volvió a hablar el joven.

—Alexia, te habla a ti.

Giré mirando al joven, traía una bandeja con bocadillos en sus manos.

—Postres de chocolate con menta, Luna.

—¿Puedo? —pregunté emocionada.

—Son cocinados para usted, Luna.

—¿Para mí?.

—El Alfa pidió cocinarlos para usted.

—Deje la bandeja aquí, por favor —el joven asintió y luego se fue.

—¿Son para mí? —pregunté emocionada a Zali.

—Son para ti —golpeó despacio mi frente mientras reía.

—¿Chocolate? —la voz de la rubia resonó en mis oídos—, subirás más de peso con eso —se burló a mi espalda.

—Celeste, compórtate —Zali le reprochó.

—¿Qué?, ¿estoy mintiendo? —se burló.

—¿Vienes por tu naranja podrida? —giré con uno de los bocadillos en mi mano—, tómalos y nos dejas tranquilas —me moví un poco dejando sus postres a la vista.

—Eres una irrespetuosa.

—Cállate de una vez.

Giré mi cuerpo mientras me acomodaba el vestido en la espalda baja, tomé otro bocadillo y giré hasta ella, en su rostro había una sonrisa burlona.

<< ¿Qué mosca le pico? >>

—¿Seguirás comiendo? —la miré frunciendo el ceño—, engordaras y se te notaran más las estrías —sonrió burlona.

<< ¿Cómo fui tan descuidada? >>

La miré sin responder, Zali me miró, ella sabe que eso es algo que me afecta demasiado.

—Te quieres ir, Celeste. Alexia te ayudó hace un rato, deberías estar agradecida.

—¿Con alguien que come y además tiene eso en su cuerpo? —me miró de abajo arriba.

Luna Negra [El Comienzo...]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora