Mi Lady, yo y sus hijas despedimos a las dos mujeres que han venido de visita al castillo.
La reunión fue mejor de lo que me esperaba, para nada hubo conficto entre Alcina y Miranda, la segunda todo el tiempo se mantuvo muy tranquila, asta puedo decir que fue más silenciosa que la misma Donna.
Moreau también estaba aquí pues llego siguendo a Miranda quien por sierto lo ignoraba por completo, aún así el pez no se daba por vencido y seguía intentando llamar su atención a toda costa.
- Esa no es la Mirada mandona que conozco - dice mi Lady asombrada - ¿Segura que no le has echo ningún hechizo en el cerebro?.
Rio por la ocurrencia de mi Lady - Ya lo dije Lady solo le e entregado a su hija.
Bebe de su copa - Yo no podría imaginarme el dolor de perder a una de mis hijas.
- Eso nunca pasará Lady, tu lo has dicho con mi magia ahora son indestructibles.
- Es sierto querida - deja la copa sobre la mesa.
Me acerco para tomar la copa - ¿Estás tomando de el vino echo con mi sangre en lugar de beberme directamente Lady? - digo indignada.
- No le veo lo malo, es mucho mejor que el vino de las doncellas.
- El problema es que me vas a reemplazar por un vino.
Mi lady ríe - Meri eso no va a pasar.
- Acéptalo Lady, prefieres un vino con el sabor de mi sangre a mi sangre por qué quieres embriagarte - me cruzo de brazos volviendo a poner la copa sobre la mesa.
- Me juzgas demasiado rápido cariño - dice divertida. Se acerca para abrázame - Que pequeña tan amargada - me da un beso corto en los labios.
- Eso no será suficiente para que yo esté contenta - digo pícara.
- Meri si eso era lo que querías me lo hubieras dicho - sonríe de la misma forma que yo - ¿Que es lo que quieres?.
- Que almenos no tomes de ese vino cuando estamos juntas.
- Está bien Meri, pero ya está servido y no se puede desperdiciar, bebelo tu por mi.
- Me harás tomar mi propia sangre - digo fingiendo terror.
- Solo un trago - me entrega la copa.
- Será la única vez que lo haga - tomo la copa y doy un sorbo, mierda tiene razón esto tiene un sabor adictivo - ¿Esta es mi sangre?.
- Si lo es Meri, ¿entiendes ahora por qué me encanta? - vuelve a besarme pero está vez de forma apasionada.
°°°
Los meses pasan rápido asta que a llegado el momento en que Eva tiene que nacer.
- Volveré en unos días Lady.
- Más te vale no tardar demasiado - dice haciendo puchero.
- Descuida Lady en cuanto salga Eva de el vientre de Miranda volvere volando al castillo - beso a mi Lady para hacerla sentir segura.
- Te vamos a extrañar mucho Beth - dice Daniela fingiendo el llanto.
- Si como no - digo sarcástica.
- Oye no es broma - se indigna la chica.
Después de una última despedida emprendo el vuelo al paradero de Miranda. Si algo sale más en el parto y la bebé termina perdiendo la vida no se que es lo que pasará pero seguramente no será algo bueno por qué seguramente ese cuervo perderá la cabeza y tal vez pueda llegar a ser afectada mi Lady y sus hijas pues al no cumplir con mi trato seguramente querrá recuperar lo que considera que fue "suyo"
Esto lo hago por ti mi Lady, no vayas a pensar mal de mi de nuevo.
Al llegar a la cabaña con Miranda se ve acompañada por Donna quien le sigue sirviendo aunque ya no deba.
- ¿Está decidido? - digo refiriéndome a dónde querrá la mujer que se de el parto.
- En la ciudad.
- Bien allá vamos.
Las tres emprenderemos el viaje en una carroza, aunque preferiría ir volando, esto va muy lento. Podría transformarme en un dragón e irnos volando pero creo que no sería muy saludable para Eva y Miranda.
Pienso viendo por la ventana de el veiculo.
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Ave Del Paraíso
FanfictionLady Dimitrescu Advertencia: Historia no apta para todo público, contiene escenas +18 Meribeth Borst es una hechizera prácticamente de distintas magias siendo la principal la magia oscura e ahí por qué el apodo de "bruja". Tras un insistente con las...