Lady Dimitrescu
Advertencia:
Historia no apta para todo público, contiene escenas +18
Meribeth Borst es una hechizera prácticamente de distintas magias siendo la principal la magia oscura e ahí por qué el apodo de "bruja".
Tras un insistente con las...
Es imposible dormir, no puedo dejar de pensar en el evento que se aproxima, ese evento que me unirá de por vida a mi amada y a su familia.
Una crisis existencial me genera mucho más inseguridades.
Esto es realmente serio por qué estoy apunto de dejar mi libertad con la que vivía antes de conocer a las Dimitrescu. Y pensar que yo solo buscaba refugio en este castillo pero al final terminé comprometida con una sexi vampiresa.
Suficiente, mis propios pensamientos van a terminar matandome. Nesesito ver a mi Lady o no podré dormir tranquila, se que no debería pero no soporto estar en soledad con mi peor enemigo que soy yo misma en éstos momentos.
Me levanto de la cama e intento abrír la puerta pero está cerrada con llave desde afuera.
Esas niñas me han dejado encerrada... Voy a la ventana pero al abrir las cortinas la encuentro cerrada por fuera con tablas de madera.
¿No saben que puedo romperlas con facilidad?.
Abro la ventana y golpeó las tablas asta derribarlas.
Salgo volando asta el balcón de mi Lady y comienzo a tocar la ventana con mi pico de lechuza intentando llamar la anterior de mi Lady que esta dormida plácidamente.
Al no ser escuchada comienzo a graznar, pero la única atención que llame fue de las moscas que comenzaron a rodearme.
- No deberías estar aquí pajarito - las moscas toman la forma de Cassandra, la chica aprovecha la forma que tengo ahora para tomarme de las alas entre sus manos con guante negro. Forcejeo picando sus dedos - Oye tu pico es filoso.
Al final término llevándome asta su habitación donde tenía una jaula con otros tipos de pájaros y si me metió ahí con ellos, dónde me hizo pasar toda la noche. ¡Estúpida Cassandra!...
Al amanecer el sol entra por la ventana de la habitación de Cassandra alumbrando su cara, la luz la hace despertar.
En toda la noche nunca le aparte mi mirada asesina desde dentro de la jaula.
- Beth, das más miedo en tu forma de ave - se burla acercándose - Acéptalo esto tu te lo buscaste - me libera y me arroja por la ventana - Vuela libre pajarito.
°°°
Me miro en el espejo enorme mientras Donna ajusta el corset de el vestido. Es en color negro al igual que los otros vestidos que me a fabricado Donna, su diseño deja al descubierto mis piernas de adelante mientras que de atras es tan largo que se arrastra al piso.
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Estoy emocionada de ver cómo lucirá mi Lady en su vestido. Sonrió al imaginarla.
Estando aquí todas mis inseguridades y dudas desaparecen, siendo remplazadas por una gran felicidad.
- Te vez mucho mejor ahora Beth, no pareces esa loca que se embriago unos días antes - se burla Bela.
- Por qué no estaría feliz si me casarse con una diosa maravillosa, hermosa y sexi - digo sin borrar mi sonrisa.
- Eres muy afortunada de haberle gustado a madre a primera vista - dice Daniela.
- ¿Eso es verdad?.
- Claro Beth, ¿O no recuerdas como te miro cuando te encontramos mis hermanas y yo?.
- Si lo noté, pero aún así me trató como una pricionera más y no dudo en atacarme - rio con nostalgia.
- Ya estás lista, te vez hermosa - dice Donna viéndome atraves de el espejo mientras complementa mi atuendo de novia con un velo negro transparente que se acomoda asía atrás.
Entonces Bela y Daniela se apresuran y me llevan casi a arrastras asta el tocador dónde arreglan mi cabello, uñas y maquillaje.
- Definitivamente luces mucho mejor con un maquillaje completamente negro.
- Te daré la razón solo por hoy.
- Aceptalo siempre tuve la razón.
- Está bien tu ganas, ahora vayan ustedes a arreglarse.
- Eso haremos Beth, solo no intentes ir con madre de nuevo.
- No me gustaría ser encerrada en una jaula por su hermana...
- ¡Los invitados ya están en el templo de la abuela Miranda! - exclama Cassandra entrando en la habitación.
Donna y yo nos subimos en una carroza y vamos en dirección de el lugar donde sera la boda, a lo largo de el recorrido miles de ideas de cómo será el vestido de mi Lady pasaron por mi cabeza asta que llegamos al templo.
Cassandra tenía razón ya están todos los invitados en sus asientos, incluso está Moreau que seguramente a llegado siguendo a Miranda.
La mayoría de los invitados son mis compañeros de mi escuela de magia a la que asistí en mi juventud. Que conmovedor es que ver qué han aceptado mi invitación al final.
Aunque todos me miran extrañados, algunos se acercan a interrogarme sobre mi decisión y otros me reprochan diciendo palabras como.
" Una hechizera de tu nivel no debería estarse molestando en este tipo de cosas " frase dicha por mi mentora.
Pero al final que se le va a hacer, estoy dispuesta a pasar toda mi vida al lado de mi Lady incluso si llego a morir ahí estaré siempre para ella.
Me acerco a Donna y Miranda.
- Descuida cuervo no pienso comerme a Eva - bromeo.
- Será mejor que cierres el pico lechuza - levanto las manos como si Miranda me estuviera apuntando con un arma.
Después de eso Miranda se despide confiandonos a Donna y a mi su más preciado tesoro para ir en dirección de el castillo Dimitrescu y acompañar a mi Lady. Mientras nosotras nos acomodamos en el altar.
