Capitulo 65

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El día y la noche no pudieron ser más perfectos al lado de la mujer que amo.

- Esto es como un sueño - me pego al cuerpo de mi Lady.

- Un sueño eterno querida - me toma en brazos y yo nos adentramos a las oscuras aguas profundas y transparetes de la isla siendo iluminadas solo por la luz de la luna.

Algunas aves cantan bajo es cielo púrpura de la noche.

- Me pregunto que estará pasando en el castillo - rio ante la idea.

- Espero que este todo en orden - dice preocupada.

- Tienes miedo de que las niñas hagan explotar a Miranda, ¿cierto?.

- Y sobre todo Cassandra.

- Ellas se portaran bien - digo para tranquilizarla - ¿No es que esto está muy apretado? - digo picara desatando el brasier de su bañador.

- Yo creo que esto también está muy ajustado - desata los lazos de mi panti de el bañador.

- ¡Lady! - digo avergonzada al sentirme expuesta de forma repentina.

Alcina ríe maliciosa.

Terminamos por desvestirnos por completo y pasamos repartiendonos besos mientras que el agua fria a nuestro alrededor se volvía tibia con la temperatura de nuestros cuerpos.

°°°

Llegamos volando al castillo con el aleteo de mis enormes alas de dragón moviendo las hojas y flores de las plantas en el jardín.

- Eso fue un viaje mágico - dice Alcina agitada aún sobre mi espalda sosteniendo su sombrero y con sus rizos despeinados por el viento - Tu eres magia mi amor - acaricia mi lomo de dragón antes de bajar deslizandose por una de mis alas.

- ¡Madre! - las niñas aparecen volando con sus moscas.

- Y...¿Madre? - dicen sorprendidas al verme

Vuelvo a mi forma - Que tal mis niñas - las saludo.

- ¡No sabía que podías hacer eso Beth! - Cassandra me sacude de los hombros.

- Eso es magia - acomodo mi cabello después de la sacudida.

Nos despedimos de Miranda después de darle sus debidos agradecimientos por todo la ayuda que nos brindó durante estos largos días de nuestra boda y compromiso.

Después de todo el acontecimiento de los preparativos de la boda y de el viaje de luna de miel, se siente un gran impacto al regresar a una nueva realidad que ahora estamos viviendo mi Lady y yo en el castillo. Sabiendo que estaremos acompañadas para siempre y que será el momento de empezar a trabajar en equipo.

Aunque siempre a sido así desde que nos conocimos, solo con la diferencia de que las chicas comenzarán a llamarme madre y a tratarme con sierto respeto, se siente extraño pero ya iré acostumbrandome, quiero ser amiga de las niñas para que así podamos formar una mejor relación de madre e hijas.

Es sierto que nunca me imaginé a mi como madre pero valdrá la pena por mi Lady.

- ¡Beth!...digo madre - Daniela me llama.

- ¿Que pasa Daniela?.

- ¿Podrías distraer a madre?, es que voy a salir...- susurra.

- ¿Irás a ver a un chico?.

- Mamá, ¿cómo me descubriste tan rápido? - dice apenada.

Rio - Eres muy evidente Daniela, no se me olvida con quién hablabas en la fiesta - digo picara.

- Por favor no le digas nada a madre y déjame salir - suplica.

- Está bien, solo se discreta o nos meteras en peligro las dos.

- Gracias mami enserio te amo - me da un beso en la mejilla tomándome por sorpresa.

- De nada creo...

- Meri - llama mi Lady con los pasos de sus tacones acercándose.

- Apresúrate y que no te vea - susurro.

Daniela sale sigilosa por la ventana de la sala principal.

Definitivamente no podré manejar muy bien este papel que tengo por cumplir ahora.

- Meribeth aquí estás esposa mía - sonríe al encontrarme.

- Mi amada Alcina - digo amorosa.

- Estuve esperando tanto tu llegada - nos abrazamos - ¿Cómo va la venta de tus pociones?.

- Mucho mejor que antes, esta nueva gente de la aldea lo da todo por la magia - rio - ¿Cómo van las ventas de el vino Lady?, ¿nesesitas ayuda con mi sangre otra vez? - hace puchero.

- No - responde algo molesta.

- Lady solo estaba bromeando, mi sangre es completamente tuya.

- Entonces demuéstramelo dándome un sorbo - sus ojos dorados brillan con apetito mientras se reclame los labios sin apartarme la mirada.

- Soy toda tuya Lady - digo descubriendo mi cuello y parte de mi hombro.

Me toma en sus brazos y sin perder el tiempo me lleva asta la habitación donde me despoja de todas mis ropas para satisfacer su sed de sangre mordiendo y chupando las partes de mi cuerpo que son sus favoritas.

Ave Del ParaísoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora