Capitulo 50

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- Entonces si el vino está hecho tiene un porciento de mi sangre ya no sería sangre de virgen - digo mientras dreno mi propia sangre en la tina.

- Tendría que cambiarle el nombre, claro que esto sería temporal.

- ¿También sería en latín?.

- Claro que sí, querida o nadie lo reconocería.

- Pongamosle, sangre de hechicera entonces. Suena interesante la gente lo comprara por el morbo de probar la sangre de un ser magico.

- Sigo sin estar de acuerdo de el todo - hace puchero.

- Prefiero dar litros de sangre a que sigas embriagandote en las noches - dejó salpicar un poco de sangre sobre su vestido.

- ¡Meri! - yo simplemente rio, pero mi Lady como venganza por arruinar su vestido me arroja por completo dentro de la tina.

- Eso fue muy Bela de tu parte mi Lady - digo jugueteando con el líquido carmesí moviendo mis manos de un lado a otro aún dentro de la tina.

- Tu le lo búscate pequeña ave - sonrie mirandome con sus brillantes ojos dorados - Ya sal de ahí Meri, es suficiente de tu sangre.

- Alcanzame - me alejo asta en fondo de la tina nadando en la sangre.

- Que chica tan mala - ríe.

Efectivamente las ventanas de el vino de mi Lady comenzaron a subir de golpe pues la nueva marca temporal "sanguinem auguratricis:" fue un éxito junto con "sanguis virginis".

- No es justo que todo mundo allá probado tu sangre menos nosotras - se queja Bela.

- Si madre, tenemos mucha curiosidad de que es a lo que sabe - dice Daniela.

- Beth es deliciosa - responde Casandra maliciosa al recordar.

- Vasta niñas, no crean que estube muy de acuerdo con eso.

Las tres se retiran, Bela y Daniela iban haciendo rabietas mientras que Cassandra se burlaba de ellas.

- No volverás a usar tu sangre en mi vino - dice irritada por el comportamiento de sus hijas.

- ¿Celosa?.

- Si.

- Arreglemoslo así mi Lady - me siento sobre sus piernas y dejo al descubierto mi cuello - Castigame chupándome asta la última gota.

- Tu lo has dicho querida - lame mi cuello antes de morder y beber de mi sangre.

Esto no deja de sentirse tan satisfactorio, duele y mucho pero al recordar el como se ve mi Lady chupando mi piel me pone tan exitada y más si a esto le sumamos la sensación de sus labios y lengua.

Comienzo a gemir a medida que mi Lady se concentra más en la mordida, mis gemidos también la exitan por lo que me manosea por por todas partes de mi cuerpo mientras sigue succionando mi cuello.

Me tira sobre el sofa cuando queda satisfecha, se pone encima mio y me besa de lengua, aún puedo sentir el sabor de mi sangre en su boca.

Levanta la falda de mi vestido dejando al descubierto mis piernas baja para beber ahora de ellas.

- Estás muy sendienta hoy Lady - digo picara.

- Lo estoy - vuelve a besarme.

Nuestras lenguas se mueven descontroladas, todos esas caricias me calentaron tanto que llegue a morder el labio inferior de mi Lady.

Subimos a su habitación donde continuamos dándonos más amor y placer.

Estoy yo frente a mi Lady con mi cara metida entre sus piernas mientras que mi nariz se hunde en su monte de venus y mi lengua recorre muy alegremente su clítoris, de su vulva salen cálidos fluidos que nunca me cansaría de probar. Mi Lady ya estaba apunto de venirse.
Meto mi dedo dentro de su culo haciéndola gritar de placer y sorpresa.

Rio maliciosa y le doy la vuelta teniendo una mejor vista de sus nalgotas. Tomo un dildo de su tamaño para introducirselo entero en el coño.

- Meri, ahhh, ahhh - gime al ser follada en cuatro.

Muerdo sus nalgas al verlas rebotar y moverse como gelatina con la cogida que le estoy dando.

- Que sexi eres mamasota - lamo atrás de su muslo desde del dobles de su rodilla asta su nalga.

Azoto sus nalgas con palmadas fuertes justo como le gusta sentirlas a mi Lady asta ponerlas ligeramente rojas y calientes.

°°°

Continuando con lo de Donna está es una noche tranquila en la que tal vez su alma está vez si quiera manifestarse. Donna no merecía irse de esa manera, pues aún tiene una familia que la valora.

Mi Lady, sus hijas y madre Miranda.

Vamos Donna tienes que volver.

Ave Del ParaísoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora