Analizo al golem con mi aptitud "experto". Constitución, inteligencia y magia tiene una E; en el resto C+ y en fuerza una S+. Bueno, parece lento, mientras no encaje ningún golpe, Selin estará bien.
Creo que es el momento de usar mi heterocromía, a ver qué puede tener un constructo interesante. Comparte ciertas aptitudes conmigo... Oh... esto es bueno y a la vez tiene mucho sentido: "inmunidad al control mental". No me gustaría ser un héroe que cualquiera pudiese controlar con su magia, pero Selin me ha dicho que me quede atrás. A ver para qué miro... Espero encontrarme con otro constructo.
Selin comienza el combate clavándole una flecha... Esto va a ser muuuuy largo.
¡BUUUM!
La flecha explota y me quedo embobado al ver la potencia de esas flechas. Nada mal. Con esa potencia no tardará en caer ese constructo... ¿Ah? ¿Qué? ¡¿Cómo?!
Mierda. Esto es malo. El constructo se está poniendo de pie. No mide cinco metros ¡¡Mide quince!! Es como un maldito edificio de piezas de piedra conectadas entre sí.
Selin se mueve grácilmente de árbol en árbol disparándole flechas explosivas y corrosivas sin descanso. Parece que su enemigo se está debilitando poco a poco, pero demasiado lento. No sé si tendrá flechas suficientes.
Veo cómo el constructo llega a los árboles y comienza a derribarlos de un solo puñetazo al intentar golpear a Selin. Es buena esquivando.
Se está alejando mucho de mi posición y el golem le está ganando terreno... Se queda parado, abre los brazos en forma de T y su tronco empieza a girar de forma independiente a su tronco inferior hasta alcanzar una velocidad mortífera.
A la mierda. Prefiero que me odie por incumplir mi promesa a que no sienta nada por mí porque haya tenido que enterrarla.
Conforme me acerco veo cómo arranca los árboles como una cosechadora gigante. Selin es incapaz de esquivar tantos ataques y cae al suelo al ser golpeada brutalmente por un tronco...
Mierda, mierda, mierda. ¡La va a matar! Selin está en el suelo, sangrando, no responde y el golem se acerca a ella para volatilizarla... No sé si voy a ser capaz de parar a esa bestia, pero al menos podré decir que lo he intentado.
Consigo ponerme delante, entre Selin y el golem y todo comienza a ir a cámara lenta. Veo con todo detalle el movimiento de sus brazos. Cómo se acercan a mí. Tengo miedo. Un edificio de cinco plantas se está abalanzando sobre mí... Debo resistir, aunque sea por Selin. Mis labios comienzan a moverse solos y a pronunciar unas palabras.
- ¡H...o...l...y...f...i...r...e! – exclamo mientras lanzo un bloqueo con mi antebrazo.
Mis puños comienzan a impregnarse de un fuego blanco. Mi percepción del tiempo vuelve a la normalidad. Mi antebrazo choca contra el gigantesco puño del golem y... ¿no he muerto?
Se genera una honda de aire que agrieta y hunde el suelo donde estamos debido al brutal choque que acabamos de realizar. Ninguno de los dos nos movemos. El golem parece que me mira y prepara el otro brazo para darme un puñetazo frontal.
Cargo mi brazo con fuerza y lanzo un golpe contra esa bola de demolición que se me acerca. De nuevo chocamos, hundiéndonos aún más en el suelo sin que ninguno de los dos cedamos. El fuego de mis puños comienza a quemarle la mano y en menos de un pestañeo se extiende por todo su cuerpo, quebrando parte de su cuerpo y partiéndolo en varios trozos.
El golem cae.
Me miro los brazos. Observo cómo el fuego desaparece y me siento el ser más poderoso del jodido mundo.
- ¡UH! – grito.
¡Menudo subidón de adrenalina! Y qué fuerte, acabo de frenar las hélices de un helicóptero gigante y lo he derrotado de un solo puñetazo. Si no fuese porque noto mi enorme melena acariciándome la espalda, juraría que soy calvo. Me siento excesivamente poderoso. El miedo ha hecho que no pueda saborear el momento tanto como me hubiese gustado, pero... estoy seguro que desde fuera esta pelea ha sido épica.
Siento que las palabras de Selin estaban llenas de verdad. ¿Para qué quiero la magia con esta fuerza?
Oh, mierda. ¡Selin!
Me doy la vuelta para socorrerla. La potencia de nuestros golpes la había lanzado varios metros hacia atrás. Me acerco. Está inmóvil. Sangra por la boca. Casi no respira. No tengo muchos conocimientos sobre medicina, pero noto varios huesos rotos... Joder, ¿qué hago? ¡¿Por qué no puedo usar magia?! Una curación vendría de maravilla en este momento. Espera...
Comienzo a rebuscar en la bandolera. Dime que en este mundo existen las pociones de curación y que se ha traído alguna...
Encuentro tres frascos de cristal llenos de un líquido sospechosamente verde.
- ¡Experto!
¡Mierda! Esto no sirve. Necesito un análisis mágico. Solo veo interrogaciones.
Estoy desesperado. No hago más que repetir "experto" y no sucede nada. Si al menos tuviese una herida abierta podría probar sobre ella, pero ¿y si se lo bebe y es veneno o algún material alquímico que usa para sus flechas?
Piensa, ¡piensa!
- Espero que esto sirva. – me digo en voz baja.
Agarro un cuchillo de metal y lo empuño con fuerza. ¡No me jodas reducción de daño! Me clavo el cuchillo con cierta dificultad en mi mano... Bien, me puedo autoinflingir daño. Abro la primera poción y me hecho un poco sobre la herida. La herida deja de sangrar y noto alivio.
Vacío su contenido en la boca de Selin y repito el mismo procedimiento con las otras dos. Solo una de ellas era curativa. La otra... ni idea.
Vuelvo a comprobar su respiración. Parece más fuerte, más estable.
Venga Kioshi, piensa en tu próximo paso. Piensa que si logras que sobreviva y no te odia, te aseguro que la enamorarás y podrás hacer con ella todo lo que quieras.
Meto la mano en la bandolera y encuentro exactamente lo que buscaba: un mapa. Lo abro, lo observo y comienzo a usar mis conocimientos terranos.
Las ruinas están marcadas en el mapa con una "x" y también hay un punto de civilización al sur... ¡¿Dónde está el sur?!
Vale, tranquilízate. Mira a ver si tiene una brújula o algo... Nada. Piensa... si el Sol sale por mi derecha y se pone por mi izquierda, el sur debería estar a mi espalda.
Miro el Sol, por suerte es temprano y se ve claramente por dónde ha salido. Si este fuese mi primer día aquí podría dudar de la inclinación de la Tierra dependiendo de la zona climática en la que estoy, pero es similar a Japón.
¡Bien! He localizado el Sur. Esta por...
Me caigo de rodillas al suelo... soy idiota. Esta no es la Tierra. ¿Quién me asegura que el Sol sale por el este? ¡Ah! Como siga frotándome tan fuerte la cabeza me voy a arrancar el pelo.
No, no. Clases de ciencias básica: cualquier planeta que rodee una estrella está destinada a que su amanecer muestre el este... en el Sistema Solar.
Empiezo a entender por qué mi atributo de inteligencia está por debajo de la media...
Me alejo de Selin. Cojo fuerza y doy un salto de decenas de metros para concentrarme en lo más alto y usar visión lejana.
¡Ajá! Veo un pueblo exactamente donde creía que estaba. Aterrizo sin problemas. Cargo a Selin a mi espalda y... Ah... puedo notar lo suave que tiene sus muslos. ¡No es momento para esto! Grabo la dirección que tengo que tomar en mi mente y... Me acerco a los restos del golem y lo meto en mi tatuaje. Ahora sí. Me voy.
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¿Un mundo de fantasía sin un Rey demonio?
FantasíaKioshi es un chico impopular que decidió dedicar su vida a la enseñanza infantil para poder tener una historia de amor con una hermosa profesora. Nada de eso sucedió ya que murió nada más graduarse y se reencarnó como elfo en un mundo de fantasía. G...