39

4.4K 751 65
                                    

—¿Y? —Miré a ambos individuos frente a mi.

—Mamá quiere verte, a ti y a Sanzu. —Dijo Takeomi.

—¿Pues no era que ya no éramos parte de la familia y eso?

—Suran, fue un momento de enojo, ninguno sabía lo que decía.

—Si claro. —Viré los ojos y me mordí el interior de la mejilla.

—Solo... ¿Puedes ir a ver a mamá y ya? No es tan difícil, maldición. —Dijo Senju.

—No tengo por qué ver a una mujer que prácticamente dijo que los dos, Sanzu y yo, éramos peores que papá, que nosotros ya no éramos familia y que no quería volver a vernos. Ni siquiera sé por qué mierda estoy hablando con ustedes.

—¿Cuando fue que cambiaste tanto?

—¿Disculpa? Yo no cambié, ustedes lo hicieron, se apartaron de mi, me abandonaron y cuando yo lo hice con ustedes yo fui la mala. —Bramé levantándome de la silla. —No volveré a casa, y mucho menos iré a ver a esa mujer.

—Suran, ¡Vuelve aquí! ¡Waka!

Waka me interceptó a medio camino, cuando quise evitarlo Arashi apareció por un lado, y Shinichiro por el otro.

—Maldita sea. —Gruñí pateando las rodillas de los tres chicos haciendo que los tres cayeran pues de rodillas vaya, y luego salte dándoles una patada en la cara a cada uno.

Takeomi iba a sujetarme de los hombros pero logré escabullirme y correr hacia mi auto, ya estando ahí arranqué.

Pero ellos no se quedaron de brazos cruzados, y se subieron a sus motos para tratar de perseguirme.

Definitivamente no iría al departamento, ellos no tenían que saber dónde nos quedabamos.

El sonido de una llamada entrante me asustó, pero aún así contesté.

—¿Alooo?

—¿En donde estas? Dijiste media hora.

—Resulta que me querían llevar a la fuerza con mamá.

—¿¡Qué!? ¡Dime en donde estas ahora mismo!

—Estoy en mi auto, dando vueltas para ver si los pierdo porque se pusieron a perseguirme en sus motos. —Bufé molesta.

—¿A dónde piensas ir?

—¿Recuerdas el accidente Akashi?

No, ni lo pienses. La última vez no salió bien.

—Es mi última opción, trataré de perderlos yendo a los suburbios.

No te atrevas a colgarme, quiero saber que pasa en todo momento.

—Bieeen. —Gruñí.

—¿Suran? ¿En donde estas? —Ese era Mikey.

—De camino a los suburbios, ¿Por?

—Trata de llevarlos hacia Rokuhara Tandai, al parecer tienen malos entendidos.

—Jalowin. —Sonreí y aceleré.

La cosa es que pronto llegué hacia donde generalmente se encontraban, pero estando ahí me encontré con una multitud.

Frené el auto de golpe casi arrollando a alguien. Vi como South le dio un puñetazo a Draken y luego se giró hacia Takemichi.

—¿Pato? —Pregunté a la nada.

—¿Qué? ¿Suran?

Me bajé del auto y tras golpear a alguien lo lancé a los pies de South.

—¿Se nuevo jugando con las personas? Eres un asco. —Reí.

—¿Suran? —Cuestionó Pato.

Comencé a caminar haciendo sonar mis tacones, sonreí levantando el mentón y a su vez moviendo mis caderas, ya saben, super femenina.

—Agh, ¿Ya se están metiendo en problemas? —Cuestionó Takeomi.

—¿¡Qué está haciendo Brahman y una miembro de Kanto Manjikai en mis rutas!? —Exclamó South.

—Oh ya sabes, yo trataba de escapar de esos malditos. —Señalé a la Brahman.

—Ah ya comenzó a llover. —Dijo Takeomi.

—Tu presencia siempre hace que llueva. —Dijo burlón Shinichiro.

Takeomi comenzó a decir que quería reclutar a Pato, así que qué buena forma de hacerlo ahora frente a todos. Pero un tipo con una cicatriz peor que la de Takeomi apareció diciendo que no lo permitiría.

—Ugh, son tan imbéciles. —Dije recargandome en el toldo de mi auto.

—Tu lo eres más, por ser tan malditamente terca. —Bramó Senju.

—Cierra la boca porque se te cae el teatrito cuando todos sepan que eres una chica. En este país no pueden haber dos chicas fuertes, solo una, y esa soy yo.

—Eso lo veremos. —Dijo y lanzó su sombrilla para después cubrirse la cabeza con su capucha, pronto salto a golpear a South.

—Siempre tan dramática con las entradas, yo prefiero algo... Impactante. —Dije codeando a uno de Rokuhara. —¿A poco no es sorprendente mi entrada?

—Oh, si lo es, señora.

—¿Señora? Tan vieja no estoy, baboso.

—¡Lo siento mucho! ¡Por favor no me golpees!

—Nah, haré algo mucho mejor. —Sonreí llevándolo a mi auto para después subir yo y finalmente irnos. —Serás mis ojos y oídos en Rokuhara Tandai, me dirás qué es lo que ves y escuchas, pero solo finge que somos primos o lo que sea.

—¿Pero qué...?

—Ya bájate. —Ordené y él lo hizo, bajé la ventanilla. —Si no haces lo que te pido, voy a matarte, ¿Entiendes?

—S-Si.

—Largo. —Gruñí y entonces arranque mi auto.

Ah, me agrada cuando se pone tan molesta.

—Callate es mi hermana.

—Tu hermana me gusta.

—¡Sanzu suelta a Koko!

—Imbeciles. —Dije avergonzada, tomé mi celular y colgué la llamada.

W O M A N  [Tokyo Revengers] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora