Golpe del destino...

74. Sentimientos en conflicto.

Luego de regresar de España, las cosas andaban bastante bien, estaban a tan solo días de celebrar la navidad y con ello venían muchos compromisos que cumplir antes de finalizar el año. Valentina parecía estar mejor después de haber arreglado las cosas con Franco, aunque aun no se acostumbraba a hablar mucho del tema, por otro lado, Juliana había hecho una muy buena dupla con el pintor, era sabido que se conocían desde hace años, pero ahora tenían una relación más cercana.

- Has hablado con Franco? – le preguntó Juliana

- De qué o por qué? O sea, hemos hablado lo normal, de ningun tema en específico, aunque es extraño, ¿sabes? Por momentos siento que me quiere decir algo más, pero no.

- Creo que lo intimidas un poco, aun no se siente en total confianza contigo.

- Juls, la confianza se gana y ahí vamos poco a poco. Él me agrada, te lo juro, sé que tiene buenas intenciones y de verdad quiero que nos demos la oportunidad de conocernos, el hecho de que quiera que esté en nuestra boda ya es un gran avance, ¿no crees?

- Sí y me alegro mucho por esto, por ti y por él.

- Yo sé bebé! Pero como te digo, vamos poco a poco, tal vez más adelante podamos compartir más cosas, como cumpleaños, navidad, etc, por ahora sería muy precipitado y de verdad no estoy preparada para eso.

- Sí, claro! Te entiendo...

Lo cierto es que ese ultimo comentario de Val, desanimó un poco a Juliana y esto debido a que había estado hablando con Franco y este le había comentado que quería hacer una celebración especial de navidad y que quería que todos estuvieran presente, solo que no encontraba la manera de decírselo a Valentina. Por lo visto tampoco tenía caso que Juliana le dijera algo, no después de saber que Val aún no estaba preparada para algo como eso.

La situación se puso peor para Juliana en cuanto se enteró que Mario viajaría a España junto con Eli y Max, el plan era celebrar allá navidad y año nuevo y así enseñarle al niño todo lo que hizo su nueva mami durante los años que vivió en ese país. También la desanimó el saber que no estaría junto a sus mejores amigos para esa fecha especial, Alejandro y Gabriela compartirían con la familia del chico, todo esto significaba que solo quedarían ella y Valentina porque hasta Lupe tenía sus planes y no es que Juls se quejara por celebrar a solas con su morrita, solo que se había acostumbrado a estar siempre rodeada de la gente que quería.

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Juliana se encontraba en su oficina, no había tenido un buen día y eso se lo había hecho saber a toda persona con la que llegó a tener algún contacto desde que se levantó. Valentina le había preguntado que si se encontraba bien y su respuesta se resumía a que era un tema de trabajo que la tenía alterada, eso no era del todo mentira, las cosas no estaban avanzando tal y como quería en lo que consideraba su proyecto más importante.

- Escúcheme bien Domínguez! Me importa un carajo si hay que contratar gente extra, tengo presente que viene navidad y año nuevo y que muchos de ustedes comparten con sus familias, pero eso no significa que tenga que mandar a sus casas a quienes quieren seguir trabajando. – se quedó un momento escuchando lo que el otro le decía – No señor, entienda que necesito que eso esté listo a más tardar la ultima semana de enero, sé que han estado trabajando el doble para concluir antes de lo normal y así se les ha pagado, se les reconoce el esfuerzo, así que si es necesario pagarles el triple no hay ningún problema.

Luego de estar varios minutos debatiendo con el supervisor de la obra, vio como entraba la luz de su vida con 2 cafés en la mano.

- ¡Hola mi vidaaa! – saludó la castaña - ¿Estás ocupada?