30.Pídeme lo que tú quieras...

2.2K 251 51
                                    

Para el ultimo día en Tulum el plan fue tranquilo, disfrutaron como de costumbre rodeadas de un paraíso hermoso, dentro de esa burbuja llena de amor y confianza muy lejos de la realidad a la que debían de regresar dentro de unas horas. Era claro que extrañarían el lugar, pero al menos les quedaba la seguridad de que podrían regresar en cuanto quisieran o les fuera posible, Juliana al estar de nuevo en CDMX sería una de las primeras cosas que haría; concretar la compra de esa propiedad que ahora tenía el triple de valor para ella, dado todo lo acontecido ahí durante la semana.

 Era claro que extrañarían el lugar, pero al menos les quedaba la seguridad de que podrían regresar en cuanto quisieran o les fuera posible, Juliana al estar de nuevo en CDMX sería una de las primeras cosas que haría; concretar la compra de esa pr...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El sábado por la tarde volaron hacia la Ciudad, así tendrían todo el domingo para estar en el departamento descansando como era debido y apapachándose ahora sin ningún miedo o nerviosismo que las frenara en algún momento. Otro de los asuntos que tenía que resolver Juliana era eso que le había prometido a Valentina acerca del trabajo, no era que estuviera 100% segura, pero sabía que era un tema importante para su novia y estaba en todo su derecho de querer desempeñarse en algo, además haría cualquier cosa con tal de ver a su princesa feliz, si Val quería trabajar pues ella la apoyaría, para ello necesitaría ayuda de su fiel amiga a quien citó el lunes en la mañana en el Corporativo.

- ¡Buenos días Juliana Valdés! – entró Gabriela bostezando - Espero que sea una razón muy importante por la que me hayas hecho levantarme temprano el día de hoy y que en medio de esa razón me cuentes con detalles acerca del viaje a Tulum.

- ¡Buenos días amiguita! No existe ninguna razón importante, solo quería que me contaras como te fue en Estado Unidos, de Tulum no tengo nada que contarte.

- ¿Es en serio Juliana? Llegué anoche de mi viaje, estoy muerta y esperaba dormir hoy todo el día y solo vine porque me dijiste que era urgente y me sales que era solo para chismear. Ahora por eso como mínimo me tienes que invitar a desayunar.

- Tú viniste también por chismosa Gaby! Pide lo que quieras, yo invito pero comes aquí, tengo mucho que hacer y además mi hermosa novia me preparó el desayuno y por ahora no quiero nada más.

- ¡Mi nivia mi pripiró il disayuno! – hacía una mueca- Que fastidio con ustedes, mucho amor, mucha miel, bla bla bla... ¡ Ay bueno me encantan así! Ya dime que tal estuvo Tulum? Prometo decirte luego que tal las cosas con Ale.

- ¿Tulum? Todo bien, normal, tranquilo, la playa muy bonita, hizo un clima estupendo, en fin, todo muy bien.

- ¡Ay ya Juliana! No te hagas la loca, cuéntame porque con esa cara yo sé que pasó algo más.

- ¿Cuál cara? Tengo la misma de siempre. – sirvió café para ambas.

- Sí, la misma de siempre de las ultimas semanas, una cara de tonta enamorada. Solo que esta vez es una cara de tonta enamorada y bien cogida.

- ¡Gabrielaaaa! – escupió lo que tenía en la boca - ¿ Qué clase de comentario es ese? No tengo porque andar comentando mis intimidades o las de Val.

Golpe del destino...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora