Capítulo 46: Parte 2

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JAMES

En la sala de juegos del Desca's solo estábamos nosotros y ya llevábamos nuestra segunda ronda de cervezas. Los chicos también llevaban su segunda partida de billar mientras que yo solo los miraba sentado en un taburete y Nate apoyado en la barra porque ahora les tocaba jugar a West y Thomas. Nunca entendí la diversión de ese juego, pero lo que, si me divertía, era ver los piques que tenían.

– Elijo las rayadas – comenta West tras dar el primer golpe.

– Da igual que elijas las rayadas o las lisas, pienso darte una paliza. – lo reta Thomas preparando su taco para golpear.

De los tres creo que Thomas era el que más se pica a la hora de jugar al billar y es algo digno y muy gracioso de ver como pierde o incluso verlo ganar.

– Y ¿se puede saber que celebramos? – inquiero dejando la cerveza en la barra y cruzándome de brazos.

No me importa si hay una razón o no para tomar cerveza. Solo se toma y ya pero tengo una corazonada que a esta tarde los chicos van a darle la vuelta.

– ¿Desde cuando tenemos que celebrar algo para venir al Desca's a tomar cerveza y jugar? – pregunta West tras hacer un golpe de pena.

– Esta claro que no puedes hacer dos cosas a la vez – replica Thomas apoyándose sobre su palo –. Menuda mierda de golpe – le hecha en cara.

A partir de estos momentos comienzan los piques entre estos dos. Vuelvo a coger mi cerveza y le pego un sorbo a un esperando respuesta a mi pregunta.

– Bueno si quieres tener un motivo ¿porque no celebramos tu capitanía? –pregunta Nate levantando su cerveza. – me lo han contado Steve y Marcus.

Nate sigue con su cerveza en mano y alzándola esperando a que yo también lo haga, así que levanto la cerveza y chocamos tras un buen trago.

– Espera ¿Cuándo te has presentado? Y ¿Mason lo ha aceptado? – esta vez es el turno de West, pero tras escuchar la noticia para un momento y se reincorpora dejando su peso caer sobre el taco, con cara de confusión.

– Mason me la suda, siendo sincero estaba llevando el equipo a la mierda solo me he presentado porque he visto la oportunidad de intentar hacer algo. – me defiendo mientras sigo atento a su partida.

– Oh vamos tío, tira de una puta vez – le arremete Thomas.

Nate y yo nos miramos mientras comenzamos a reírnos debido al alto pique que llevaban estos dos.

– Thomas cállate, es solo una partida. – West le contesta después de dar su golpe tan perfecto que acaba por tirar una de sus bolas.

Los tres terminamos riéndonos a carcajadas después de observar la cara de mala hostia de Thomas al ver que West le lleva ventaja.

– Bueno, pues entonces volvamos a celebrar la capitanía de James, el echo de que Mason va a estar por la fraternidad mirándonos como el culo y por la paliza le que le estoy dando a Thomas – West levanta su cerveza como hace un rato había echo Nate conmigo y después se gira para observar a Thomas que está claro, tiene cara de pocos amigos.

Los cuatro alzamos las cervezas y de un trago nos terminamos nuestra segunda ronda de cervezas. Fue Nate quien a los pocos minutos volvió con otros dos botellines de cerveza más en cada mano.

– Cambiando de tema. ¿James tienes algo que decirnos? – me pregunta Nate acercándose a la mesa de billar y apoyar las manos sobre la mesa quedando a los lados los chicos, captando su atención y que se unieron a él y posaron sus miradas en mi.

Creo que todos notaron mi cara de confusión y curiosidad respecto a la pregunta de Nate. Ellos eran mis amigos y obviando mi pasado se lo contaba todo.

– ¿Qué se supone que tendría que deciros? – les devolví la pregunta con tono de confusión.

– Podrías empezar explicándonos que hay entre Michelle y tú – me declara Thomas dejando su partida de billar y dándole un trago a su tercera cerveza.

Me quedo sorprendido tras la respuesta de Thomas. No sabía muy bien que decir o que hacer simplemente me quedo callado esperando que alguno diga algo más mientras le doy un trago a mi cerveza.

– De verdad te crees que no nos hemos dado cuenta. – hace una pausa Thomas. – sabemos como la miras. No la miras igual que mirabas a las chicas con las que te lo montabas, la miras de una forma diferente. – termina Thomas

– Esta más que claro ella tiene algo que las demás no tienen, sino fuera así y solo hubiera llamado tu atención os habríais liado y ya – replica West.

Lo dudo realmente porque es demasiado testaruda como para liarla solo hacerlo en una noche. Pero tampoco mentiré si no he pensado nada guarro de ella. Su culito me parece perfectamente perfecto.

– Nunca pensé que te vería subido en un coche hasta el día que se plantó ella en la fraternidad con el ese objetivo. Crees que cuando salisteis fuera no estábamos mirando por la ventana, se detuvo delante de ti y fue igual de cabezota que tú. Y al final lo consiguió – termina de hablar Nate –. Es demasiado terca, y por eso la admiramos.

La verdad es que estoy confundido y sorprendido a la vez. No pensé que los chicos hubieran puesto tanto los ojos en Michelle y en mi.

– Michelle es una cabezota, pero es divertida... y si que es verdad, ella tiene algo que las demás no tienen y es sinceridad, dice lo primero que se le pasa por la cabeza sin pensar en lo que dirá el otro. – no sabia muy bien que es lo que quería que dijera, pero lo que he dicho es verdad, ella me importa y no solo por querer montármelo con ella sino por mucho más.

– A demás... puede que ayer nos quedáramos hasta tarde y te viéramos volver en coche con ella... y puede que también viéramos como... os besasteis. – me contesta West no muy confiado con lo que acaba de decir.

– ¿Desde cuando me estáis vigilando en cuanto a Michelle y a mi? – mascullo enarcando una ceja y levantándome del taburete.

– Desde que una simple chica de primero a captado tu atención y tú estas loco por ella – hace una pausa – desde ese momento. – me contesta Thomas con una sonrisa de capullo en la cara y pasando su brazo por detrás de mi cuello.

– No pensaba que tendría agentes del FBI como amigos – los encaro riéndome.

Lo mejor de todo esto es que tienen razón yo solo me lo montaba en las fiestas con algunas chicas, pero sin nada serio como cualquier universitario de fiesta. Pero por parte de Michelle no quería eso, quiero decir quería algo más allá, quería conocerla, quería hacerla reír y va sonar raro, pero tenia ganas de hacer un viaje de horas con ella en coche.

Ver como ella cantaba las canciones a todo pulmón, sus miradas para comprobar que seguía bien, y por supuesto sus intentos de que este a gusto. Podría decir que James White al que consideraban un bad boy y sin saber porque, se estaba enamorando.

Lo que quedó de tarde West y Thomas volvieron a su partida y a sus piques mientras Nate y yo nos reíamos a carcajadas.

– Joder – contesto Thomas al ver la ultima jugada de West.

– No jodas, ¿he ganado? – susurró West – HE GANADO AAAAHH, nunca he ganado una partida. Jodete Thomas me debes una cena y pienso pedir de todo, prepara tu tarjeta guapo.

– Y una mierda tu bola ha rebotado por el tablero. Eso es de jugar sucio. – le replica Thomas algo descontento.

– Si claro, ahora dilo sin llorar cariño – lo pica West.

Thomas explota y dejando caer su taco al suelo comienza a perseguir por el Desca's a West quien corre como si le fuera la vida en ello.

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¡SORPRESA! Hoy tenéis dos nuevos capítulos, espero que los disfruteis mucho. 1/2

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