MICHELLE
Tres horas, llevo aquí tres horas sentada en esta silla incómoda de la biblioteca intentando sacar a delante un trabajo con unos compañeros de clase, que tenemos que entregar a final de semana y solo llevamos la mitad.
Son las cuatro de la tarde y desde que hemos venido solo me he comido unas rosquilletas, que llevaba en la mochila y dos cafés de la máquina de abajo que realmente no saben a nada, pero tengo demasiada hambre y me sirven.
Tecleo en mi ordenador las ultimas palabras de mi comentario, y reviso toda la ortografía en busca de algún fallo, mientras Natalie y Nick terminan con su parte del comentario. Pongo punto y final al texto, me levanto de la silla y comienzo a recorrer los pasillos buscando un libro de economía para que Natalie pueda cerrar la conclusión de su comentario.
– Natalie, este puede que te sirva – le contesto entregándole el libro y volviendo a sentarme.
– Gracias. – termina de teclear y gira su ordenador para que pueda verlo. – con esto quedaría mejor Michelle. – comienzo a leer la ultima conclusión de su trabajo eliminando algunas palabras repetidas y cambiándolas por algún sinónimo.
– Por esta parte ya lo tengo también solo me queda añadirle unos gráficos para que tenga más información de contraste y ya esta. – nos comenta Nick
Él termina por añadir los gráficos mientras que Natalie y yo le pasamos nuestra parte por correo para juntarlo y por fin terminarlo. La verdad es que yo puedo pasarme perfectamente toda la tarde en la biblioteca, pero con este trabajo parece que no acabes nunca y termina por desesperarte.
Busco mi agenda en la mochila y tacho la tarea del trabajo, mañana lo entregaremos y solo espero que no decidan poner ninguno más para antes de las vacaciones de navidad. Termino pensando en el reportaje de James y solo me hacen falta algunos objetivos más de la cámara para llevar a cabo las ideas que tengo, así que probablemente iré a mi casa ahora. Me llevará casi dos horas de coche, pero no es muy tarde.
Esperamos a que Nick acabe de juntar las tres parte y lo revisamos por ultima vez.
– Espero que esto tenga un diez, porque es perfecto. – contesta Natalie mirándonos a los dos en busca de apoyo.
– Espero que si, el trabajo tiene la información necesaria y bien argumentada, además tiene gráficos que contrastan los datos. – le digo colgándome la mochila al hombro. – lo entregaremos mañana mismo. Ahora tengo que irme. – hago una pausa para buscar las llaves de mi coche – si necesitas ayuda con algo me llamas – le contesto a Nick dándole una palmada en la espalda y un abrazo a Natalie.
Salgo de la biblioteca directa al aparcamiento mientras le escribo a Emily para decirle que llegare más tarde. Entro en el coche, dejo la mochila en el asiento del copiloto y pongo el contacto al coche.
Tomo la calle en dirección para salir del campus cuando me topo con una fila de coches que parecen no moverse. – Estas de coña ¿verdad? – solo espero que no tarde mucho en salir o sino puede que si llegue tarde. Subo el volumen de la música y dejo caer la cabeza en el respaldo esperando a que algún coche avance.
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Llevo diez minutos aquí parada con la cabeza apoyada en la ventana y ya estoy desesperada, solo me he movido dos sitios. Solo se que algo me saca de mi desesperación o más bien dicho, alguien. James le da un golpecito a la ventana esperando a que la baje.
– Hola – saludo mientras bajo el volumen de la música.
– Hola, ¿A dónde vas? – se deja caer apoyando los brazos en la ventana mientras me pregunta.
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Heridas
Romance¿Cuánto tiempo se supone que tardas en cerrar una herida?, ¿meses, años...?, esa pregunta ronda la cabeza de Michelle todas las noches. Todavia no hay respuesta claro. Ella tiene 18 años y este, va a ser su primer curso en la universidad. ¿Su plan...