★La Favorita Del Narco★

C. 55

Aurora

7 meses después

Luego de unos largos meses, me harán mi último examen, dependiendo de cómo salga el resultado, se tomará una decisión sobre mí, el tratamiento debieron dividirlo en dos, primero eliminar el veneno que me fue inyectado por Conny y finalmente el de la boa de cristal. Muchos de los medicamentos suministrados, fueron bastante bruscos con mi cuerpo, desde el primer día de tratamiento me dijeron que había posibilidades de yo caer desmayada por lo potente de los antibióticos. Tan débil fue mi cuerpo al inicio, que de 6 días con tratamiento a la semana, me desmayaba de 4 o 5 días y mis desmayos no duraban unos minutos, no, ojalá, estos duraban horas, dos, tres, cuatro, cinco o en lo peor de los casos, seis o más horas, en las cuales era completamente monitoreada por si ocurría algún bajón en mis signos vitales.

No todo fue tan malo, los chicos venían cada domingo a visitarme, Cooper me comenta las últimas novedades de él, como su relación con Elena, la cual va casi a la perfección, le dije que fuera sincero con ella, pues, su hasta ahora no había dicho cosas insignificantes, no creo que lo haga con los temas mayores. Se resignó, según él, nos quiere proteger al costo de lo que sea. La terquedad es algo muy característico de él y yo.

Por los inicios mi cuerpo bajo de peso notablemente, mi piel se torno tan pálida, que parecía una momia andante, las ojeras debajo de mis ojos parecían hematomas, habían personas que inclusive preguntaban por ellas, creían que los doctores me golpeaban o yo misma lo hacía, ridículo, pero entendible su preocupación.

Estoy ansiosa por ese examen, ojalá y salga perfecto para volver a casa.

- Muy bien nena, vamos a llevar un par de muestras de sangre para ver los resultados, apenas estén listas, yo misma te los traerte, ¿Vale? - habla Freyja

- Perfecto.

Mi cuerpo completo suda y tiembla, estoy hecha un torbellino de emociones; estoy feliz porque posiblemente todo termine, pero a la vez, estoy angustiada, por miedo de que los análisis salgan malos.

- Tranquila, todos deseamos que todo salga bien, he orado mucho a mis dioses para que puedas ir a reunirte con tu familia.

- Gracias por todo Freyja, tú y tu equipo han hecho maravillas con esas toxinas, realmente no se cómo agradecerles todo lo que se han esperado para yo poder salir bien.

- Esto viene de todos, incluyendo te. Nosotros podíamos con gente que llega sin esperanza, que ya se ven muertos en vida, no hay poder humano que les levanté el ánimo, muchos de esos casos se pierden, por la misma cobardía de la gente. Contigo fue totalmente diferente, hasta de eso hablábamos con los chicos. Tú tenías y tienes unas ganas de salir de este agujero, que tu alegría la has contagiado a otros pacientes y a nosotros para esforzarnos más y dar lo mejor que tenemos para verlos bien nuevamente... Y listo, llevaré esto y luego te aviso. - asiento con los sentimientos a flor de piel por sus palabras anteriores

Ella retira el catéter intravenoso y lo desecha en un resiliente del carrito que trajo, las muestras de sangre las guarda en una pequeña hielera. Se despide y me deja sola en la habitación. Me levanto del sillón que hay a los pies de la cama para mirar por el gran ventanal, el cielo está un poco nublado, pero deja que unos pocos ratos de sol lleguen.

Dominick

- ¿Aurelio, puedes callarte? Por favor. Ya me dió jaqueca.

- ¡Estamos hablando de una chica que es como mi hija! Así que no te atrevas a pedirme que me calme.

- Todo va a salir bien, Freyja nos comentó que sus avances fueron totalmente positivos.

- ¿Y si todavía no han eliminado alguno de los venenos totalmente? - camina de un lado a otro por mi despacho, agarrando su cabeza

- Vas a hacer un hueco en el piso. - me levanto pesadamente de la silla y me acerco a él para sostenerlo por los hombros - Todo va a salir bien, ¿Si? Ella es una chica muy fuerte, además... - lo suelto - Con esa gran actitud tuya, no ayudas mucho, imagínate dónde mamá estuviera aquí - suelto una carcajada - De seguro te estaría dando uno de sus sermones. Relájate parcero, todo va a salir re chévere.

- Puedes dejar de usar ese hablado colombiano, por favor

- ¿Qué tiene de malo? En algún momento te llevaré conmigo, así cambiarás ese pensar, los colombianos son muy chéveres, son muy alegres, así como los mexicanos, ¡Órale wey!

- A veces pienso que tú eres adoptado.

- Ya quisieras tú qué eso fuera cierto. - carcajeo nuevamente

Narrador

El peso de los resultados aterran a todos, pues, el miedo carcomiendo desde lo más profundo, no es el sentimiento más bello de todos. Freyja con resultados en mano, junto a su equipo y en videollamada con los Parker, todos ansiosos por saber la verdad. Aurelio cruza los dedos al igual que el equipo de Freyja, Dominick está un poco más calmado, tiene fe en que la chica salio de ello son total certeza. Mientras que estos están a punto de saber los resultados finales, Aurora está con un sudor frío en su cuerpo, con una desconcentración aterradora, con un huracán de emociones, las cuales no se saben quiénes reinan, si la angustia y el miedo, o si la alegría y la convicción total.

Volviendo nuevamente con los que revisarán los resultados, Aurelio entra en un pánico que grita a Freyja sin querer.

- ¡Carajo! ¿Puedes abrir eso ya? Estoy muriendo lentamente.

Freyja hace caso total a las apresuradas indicaciones del habré, que rompe el sobre y saca las hojas. Lee atentamente dando más suspenso a la situación, unos dos minutos, le tomo a la mujer leer las partes importantes, esos dos minutos que por poco hacen que todos pierdan el control.

- ¿Qué dice? - pregunta Aurelio con susto a la respuesta, pues, para él, tanto misterio no era bueno

- Dice... - despega la mirada del papel que tiene en manos para mirar a sus compañeros y en la pantalla del portátil, todos atento a una respuesta que defina de una vez por todas, cuáles serán las emociones dominantes del momento. - ¡Dice que todas las toxinas se lograron extraer totalmente de su cuerpo!

Todos empiezan a gritar de la felicidad, al otro lado de la pantalla, Dominick sacude por los hombros a su hermano, recalcando le que él tenía razón. Aurelio, por otro lado, desbordado de tantas emociones, se desploma a un lado de su hermano, quien rápidamente vacía sobre él un vaso de agua que tenían cerca. Aurelio reacciona, ya que, del líquido, una parte cayo dentro de su nariz, haciendo que no recibiera oxígeno.

Freyja se despide conmocionada del par de hermanos, eso significaba que, ya era hora de que la joven paciente supiera sus magníficos avances y que por fin, regresaría a casa.

Toca la puerta e instantáneamente, Aurora aparece frente a ella. Está, coge la mano de Freyja y la adentra bruscamente a su habitación, con unas ansias abrumadoras.

- ¿Cómo estás? - rompe el hielo Freyja

- Dios mío, no se ni que responderte. Estoy con los sentimientos a flor de piel. Y bien, ¿Cómo salieron los resultados?

Freyja le entrega el sobre previamente abierto, con las manos temblorosas, aurora lo sostiene y lentamente lo abre para saber lo que tanto había esperado. Leyendo atentamente, los ojos de Aurora se abren de una manera impresionante, luego, de una manera sorpresiva para la doctora, se abalanza hacia ella y le da un fuerte abrazo, sus lágrimas de felicidad brotan y empapan sus mejillas.

- ¿Cuando podré volver a casa?

- Mañana vienen los hermanos Parker, firmarán los documentos correspondientes y te podrás ir

- Ay Freyja, te agradezco todo lo que tú y todo tu equipo han hecho, sin ustedes esto no sería realidad. No habrá manera de recompensar todo su esfuerzo.

- A nosotros nos da un gran gusto verte tan feliz y totalmente limpia.

Aurora vuelve a abrazar a la doctora por un par de minutos más, hasta que ella, finalmente decide irse, pues, su deber como doctora la llama desde lejos. Dejando nuevamente a la chica sola, pero con una sonrisa de oreja a oreja. Lee de cabo a rabo la hoja y sigue sin creer la gran noticia que le fue brindada.

Tantos meses, tantos momentos sola, con ganas de dejar todo tirado, pero recordando que hay quienes la esperan ver bien y sana.