Eres Mi Medicina

Cap. 11 - Noche de pesadilla

NARRA KAGOME — NOCHE DONDE VOLVIÓ A VER A INUYASHA

La noche nunca fue mi mejor compañera, desde hace mucho se volvió una celda. El frío me rodeaba sin dejarme respirar, no servían de nada las sábanas blancas y peluches a mi lado porque no me daban calor, solo sentía como el viento helado atravesaba mi pecho y espalda. La soledad me estaba haciendo su títere, no podía cortar los hilos que me sujetaban. Solo conseguía ahorcarme más en cada intento de liberarme.

Una de esas noches volvió, de verdad no creí que pasaría de nuevo, pero aquí estoy. Las horas pasaban como el viento. No dormí nada, el dolor no me lo permitió. Solo quería que llegue la mañana. Quería que me sacaran de la oscuridad de mi habitación y de mis pensamientos.

Fue una noche muy dura, un insoportable dolor de cabeza no me dejó dormir ni un poco, al principio trate de soportarlo peo no podía más. Un grito de auxilio salió de mi garganta. Todo pasaba en cámara lenta. Vi a mi familia correr en mi encuentro, estaba tirada en el suelo tomándome con fuerza la cabeza por el horrible dolor, rápido llamaron a una ambulancia para llevarme de urgencia al hospital.
Perdí la conciencia luego de ver como un médico entraba a mi habitación.

Desperté en el hospital luego de varios meses sin tener estos episodios. Los ojos me ardían y no sabía si eran por no dormir absolutamente nada en toda la noche o por llorar en esas horas que debía estar durmiendo.
Mi madre entró al cuarto a los minutos de despertar, por instinto me arroje a sus brazos en bus ca de su calor. Detrás de ella entro un hombre de camisa azul y bata blanca, de su cuello colgaba un estetoscopio, así que sin duda era el doctor.

Sus instrucciones eran las mismas, que debía descansar por unas horas para recuperarme, al final concluyo con que sufro de migraña. O tal vez las patillas eran muy fuertes para mi organismo. Ni él parecía ponerse de acuerdo.

No recordaba tener dolores de cabeza antes, supuse que en estos momentos no lo recordaba por lo agotada que me sentía. Decidí dejar de ser negativa y hacerle caso al doctor, nadie sabe más que un doctor sobre temas de medicina.
Estuve en el hospital todo el día, intenté comer, pero no podía sentir su sabor, aunque igual comí un poco. Miraba el techo blanco de la habitación, quería convencerme de estar aquí solo por un dolor de cabeza y no por la repentina aparición de Inuyasha otra vez en mi vida. Quizás si haya tenido dolores de cabeza antes pero ahora no los recuerdo, eso debe ser, siempre tuve migraña, pero no lo recuerdo ahora. ¿Verdad?
Tomé mi teléfono para distraerme un momento, le quise escribir a Sango para contarle lo que paso, pero grande fue mi sorpresa al ver que tenía una llamada perdida y mensajes de "Sesshi", así se guardó Sesshomaru en mis contactos había olvidado cambiarlo, en fin. Entré al chat de Sango y le avisé la situación, no estaba en línea así que apagué nuevamente el celular.
Seguía mirando al techo cuando me distrajo el sonido de mi teléfono, supuse que era Sango y respondí la llamada.
Resultó que era Sesshomaru, le dije para hablar por chat ya que me molestaba la garganta.
Sin mucho rodeo le dije que estaba en el hospital.

—De verdad??? ¿¿¿¡Que paso!???
—Un fuerte dolor de cabeza, es todo :)
—Dame la dirección.
—Emmm, ¿no?
—Entonces te buscaré en los hospitales de la zona :D
—Bien, te lo daré, estás loco.
—Así es :D

Luego de mandarle mi ubicación no respondió más, decidí dormir así no entraría a la habitación a molestar con sus incansables preguntas, mi madre fue por mi ropa a casa ya que mañana recién me darían de alta, estaba sola y no quería compañía de Sesshomaru.
Mis ojos se cerraron y me quedé dormida muy rápido, lo agradecía mucho.

No sé cuánto tiempo paso exactamente, solo que al abrir los ojos me encontré con un dormido Sesshomaru, fue tanta mi sorpresa que me caí de la camilla gritando, tanto por el susto como por el golpe. Haciendo que Sesshomaru se levante también.