[ 88 - Namjoon ]

429 63 1
                                    

Hoy era la primera nevada lo que te ponía de un semblante muy feliz. Te gustaba sentarte a ver como la nieve caía y adornaba la ciudad con un profundo color blanco.

Desafortunadamente, no pudiste pasar aquella primera nevada junto a Namjoon ya que él estaba en cuarentena por 10 días luego de regresar del extranjero realizando actividades en la banda a la que pertenecía. Pasaban las horas, hablabas con Namjoon por llamada para hacerse compañía.

—Tengo malas noticias —Decía Namjoon en un tono dramático— Estoy muy afectado.

—¿Estás bien?, ¿Necesitas algo?

—Se rompió el molde para hacer patitos en la nieve, era mi posesión más preciada para estas épocas y ahora no está. No puedo comprar otro por cuarentena y si lo pido por internet, llegará cuando la nieve termine.

—Me asustaste, pensé que te había pasado algo

—Pero si me siento triste por eso, ¿minimizas mi dolor? —Si que sabía actuar este chico.

—Para nada —Aguantabas la risa— Mi más sentido pésame

La conversación fluyo unos minutos más, pero en eso, se te ocurrió algo que sonaba lo más empalagoso del mundo, pero no dejaba de ser una buena idea. Colgaste la llamada y te dispusiste a vestir ropa para el frio que aguardaba allá afuera, agarraste una mochila pequeña y empacaste solamente lo necesario.

Después de una hora y media, llegaste frente al departamento de Namjoon. Lo llamaste a su celular.

—Hey, sal a tu balcón —Por suerte, Namjoon vivía en un segundo piso por lo que le sería facil verte y no estaban tan lejos.

—¿Qué?, ¿Para qué?

—Es una orden —Decías burlona. Namjoon suspiraba al otro lado de la línea mientras se escuchaba como caminaba hacía el balcón. Cuando entró en tu campo de visión, se veía confundido sin saber a dónde mirar— Aquí abajo.

—¿Qué haces ahí? —Al mirarte, abrió los ojos en sorpresa y sonrió dejando ver aquellos hoyuelos que tanto te gustaban.

Dejaste la mochila a un lado y la abriste para sacar el molde de pato para la nieve.

—Mira, haré patitos para ti —Sonreías mirándolo a el— Es la única forma en la que podemos estar juntos en lo que terminas la cuarentena, tienes suerte de que se acumulo una buena cantidad de nieve aquí abajo para poder hacer tus patitos.

—¿Es enserio? —El no salía de su asombro

—Si, tan enserio como que busqué por una hora y unos cuantos minutos más, este molde. Fue difícil, están descontinuados, al parecer la fiebre patuna esta en su pico de éxito —Conectabas tus audífonos y pusiste tu teléfono en el bolsillo de tu chaqueta para poder hablar y tener las manos libres— ¿De cuanto quiere su ejercito de patos?

—Mil por favor —Hablaba en un tono cortes, pero sin dejar el humor.

Tú lo mirabas cuestionándolo y él sonreía, Namjoon no dejaba de ser bromista.

Comenzabas a hacer tus patos de nieve mientras hablabas y reías con Namjoon. El se escuchaba muy feliz y tu estabas tan satisfecha por eso que no pudiste evitar en sonreír todo el tiempo.

—Hey, ese esta torcido —Decía Namjoon— El último de la derecha, el que acabas de hacer

—¿Disculpa?, aquí no venimos ser tan perfeccionistas, solo a pasar el momento —Mirabas hacía el balcón donde estaba Namjoon

—Pero se ve horrible

Comenzaste a tirar nieve hacía arriba apuntando a Namjoon, sabías que no alcanzarías, pero lo hacías para demostrar tu descontento en broma, pero en uno de esos tiros, perdiste el equilibrio y caíste para atrás aplastando los patos de nieve.

—¡No! —Decía Namjoon— ¡Los patos!

Tu te levantabas y sacudías tu ropa de la nieve que había en ella.

—Si, estoy bien —Decías— Solamente me golpee un poco la espalda, pero todo está bien

Namjoon sonreía y en esa sonrisa te dio la seguridad de que lo habías hecho feliz. 

𝚋 𝚝 𝚜 - 𝚘 𝚗 𝚎 - 𝚜 𝚑 𝚘 𝚝 𝚜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora