100.- La situación se complica

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- ¡Para, Tsukuyomi! - exclamó FatGum - ¡No puedes marcharte!

Igualmente, Tokoyami logró escapar del abdomen de FatGum con la ayuda de DarkShadow.

- ¿¡Se puede saber qué haces!? - inquirió Kaminari.

- ¡Regresa aquí, idiota! - le grité.

- ¡En el último piso! ¡Allí está Hawks! - dijo, volando hacia allí - ¡Seguramente esté en problemas!

- ¿¡Hawks!? - se extrañó el héroe profesional.

Pero Tokoyami ya estaba muy lejos como para oírnos, así que paró donde estaba.

- Lo siento, chicos, pero tendréis que recorrer el resto del camino por vuestra cuenta - dijo mientras nos hacía salir de su torso, para luego echar a correr persiguiendo a Tokoyami - ¡Ni se te ocurra pensar que puedes escaparte de mí así como si nada!

- ¿¡Qué hacemos ahora!? - exclamó Kaminari, nervioso.

- Busquemos a los alumnos de la UA que están en la retaguardia - le respondió Honenuki - No deben estar ya muy lejos.

Echamos a correr de nuevo, en dirección a la localización donde se suponía que debían estar los demás. Después de unos minutos corriendo, finalmente llegamos a nuestro destino.

- ¡Estáis bien! - exclamaron varios al vernos.

- ¿Dónde está Tokoyami? - preguntó Sato.

- Ha vuelto a la base, cree que Hawks podría estar en peligro - expliqué - Pero no está solo, FatGum lo ha seguido.

- ¡WAAAH! - exclamó Kyoka, desenterrando el auricular que tenía bajo tierra.

- ¿¡Qué pasa, Jiro-Jack!? - le preguntó Kaminari.

- ¡Esto es malo! - contestó ella.

- ¿¡Qué está pasando!? - inquirió uno de los héroes profesionales allí presentes, usando el intercomunicador - ¿¡Acaso han conseguido atravesar el bloqueo!?

- ¿Huh? - hizo Mineta, confuso.

- ¡Algo increíblemente enorme se acerca! - advirtió Kyoka.

- ¡Nos adelantaremos para asegurar las primeras líneas! - exclamaron los profesionales, alejándose - ¡Los internos os quedáis aquí y esperáis!

En cuestión de instantes, se desató el caos. Shoji y Jiro nos iban informando de la situación. Gigantomachia, con varios miembros de la Liga de Villanos sobre la espalda, consiguió salir de la base y se dirigía rápidamente hacia la ciudad de Jaku, donde estaba teniendo lugar el asedio al hospital y la evacuación de la misma. Numerosos héroes habían intentado frenarlo, pero era demasiado fuerte y rápido para ellos. Por lo que habíamos entendido, además, Mt. Lady había estado intentando frenarlo, pero él había acabado lanzándola por los aires; y cuando Kamui Woods había intentado acercarse a él con Midnight a la espalda para que ella pudiera dormirle, tanto Dabi como Mr. Compress les habían atacado, evitando así su plan.

En resumen, que la situación era crítica.

Estaba ya arrancándome con los dientes pequeños pellejos del labio inferior por culpa del estrés, tratando de tranquilizarme, cuando oímos a Nemuri hablar por el intercomunicador.

¿¡Estás ahí, Creati!? - preguntó ella -

- ¿¡Señorita Midnight!? - contestó Yaoyorozu.

¿Comprendéis...? ¿La situación? -

- ¡Sí, gracias la los auriculares de Jiro y los ojos de Shoji!

No podemos pararle mediante la fuerza... Así que tendrás que hacerle dormir -

- ¿Qué? - preguntó Yaomomo, extrañada.

Tal vez está contra la ley, pero... No hay otra opción en esta situación - explicó Midnight - Tienes que hacerle dormir con algún compuesto anestésico... -

- ¿¡Qué está diciendo, señorita Midnight!? - inquirió Yaoyorozu.

Si es demasiado complicado... ¡Entrégales la anestesia a los héroes...! Y entonces abandonad... ¡Ese lugar...! ¡Avanzad y evacuad la zona! Te lo dejo a ti... Y a tu juicio -

- ¿¡Señorita Midnight!?

Silencio absoluto al otro lado de la línea.

- ¿¡SEÑORITA MIDNIGHT!?

Sentí una enorme presión en el pecho al no oír respuesta alguna por parte de la heroína.

- ¡¡MIDNIGHT!! - exclamé por el intercomunicador, intentando comunicarme con ella, asustada a más no poder - ¡¡MIDNIGHT, RESPONDE!!

Nada...

- ¿Qué ha sido ese informe...? - preguntó Kaminari - ¿Lo está dejando todo en manos de Yaomomo? Si lo que hay que hacer es hacerle dormir... ¿Por qué Midnight no fue capaz de hacerlo...? ¿Por qué...?

Yaoyorozu se llevó las manos a la cabeza, agobiada.

- ¿¡Qué deberíamos hacer, Yaomomo!? - preguntó alguien - ¿¡Simplemente corremos, con el rabo entre las piernas...!?

- ¡Earphone Jack, Tentacole! - interrumpió Yaoyorozu - ¡Usad vuestra audición para determinar el tiempo que le llevará llegar hasta aquí y el camino que tome! ¡Es un gigante enorme, por lo que medirlo con la vista también debería servir! ¡Mudman y Black Alchemist, necesitamos vuestros poderes! ¡Que todo el mundo se dé prisa y se prepare!

- ¡Es imposible, ya puedo verlo! ¡Es demasiado rápido! ¡No le costará más de 10 segundos-! - exclamó Jiro, pero calló por un momento - ¡Se ha ralentizado! ¡Pero solo un poco!

- ¡Está a 25m de nosotros, y es más grande que Mt. Lady! - anunció Shoji.

- No he aprendido a ser una heroína... Que le dé la espalda al enemigo - dijo Yaoyorozu, creando los botes con el somnífero para Gigantomachia.

- ¡Tienes toda la razón! - dijo Kirishima.

- Yo... ¡Voy a pelear...! - declaró Yaoyorozu - Por vuestra parte...

- ¡No tienes que decir nada más! - le respondió Kaminari - ¡Cuando nos ponemos estos trajes y salimos a la calle, somos héroes!

- ¡Este es nuestro territorio! - exclamó Yaoyorozu.

Ya en posición, Honenuki y yo nos dedicamos a ablandar el terreno del camino por el que se suponía que Gigantomachia avanzaría; esa vez usé mi kosei directamente de mis manos y no las botas, ya que solo me quedaba una carga y no sabíamos si podría ser de utilidad más adelante, y con la ayuda de Honenuki, no necesitaría hacer tanto esfuerzo.

- Está bien... - suspiró Honenuki - Me pregunto si esto será suficiente.

- Seguro que sí - respondí, masajeándome un poco las muñecas - Hemos manipulado un terreno lo bastante grande como para atraparlo...

- Chicos, volved, volved ya - dijo Tokage, cuyo torso y parte inferior de la cabeza empezó a empujarnos - ¡Está justo enfrente de nosotros ahora mismo!

- Eh, Tokage, ¿crees que el grupo de Monoma estará bien? - le preguntó Honenuki.

- También estoy preocupada por ellos, pero ahora...

El ruido de los árboles cayendo al paso de Gigantomachia se hacía cada vez más evidente y sonaba más cercano. No había tiempo para dudar.

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¡Gracias por leer!

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