OVA.- Entrenamiento en la USJ

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Ya habían pasado varios días desde la invasión en la USJ, y cómo no, tuvimos que volver para hacer los ejercicios que no pudimos hacer la última vez.

- No me gusta estar aquí... - susurré, nerviosa.

- Es comprensible... - respondió Izuku, a mi lado - Pero se supone que se ha aumentado la seguridad, ¿no?

- En principio, sí - suspiré - Pero eso no quita que nos atacaran como 50 villanos o más aquí mismo hace unos días.

Izuku me miró con un semblante algo triste, así que suspiré y sacudí la cabeza en un intento de quitarme esas ideas.

- Da igual, tienes razón - dije - Todo estará bien...

Nos reagrupamos toda la clase delante de mi padre y Número 13, que parecía estar en mejores condiciones que nuestro tutor.

- Bueno, todos sabemos lo que ocurrió, pero las clases son clases - comentó 13 - Así que daremos inicio al entrenamiento de rescate.

- ¿Realmente está bien que se mueva, 13-sensei? - preguntó Uraraka con preocupación.

- Mi espalda aún me duele un poco, pero no es nada comparado con senpai - respondió mientras daba una vueltita como bailarina y le daba el turno de palabra a mi padre.

- Estamos en condiciones de hacer clases. Empecemos de una vez, estamos desperdiciando tiempo - interrumpió con mal humor.

Después de esas palabras, Aizawa dio media vuelta para ir al lugar donde tendrían las pruebas dentro de la USJ, pero Izuku sobresalió de entre los compañeros para preguntar algo.

- Aizawa-sensei...

El aludido se paró.

- Se supone que All Might vendría a vernos a parte de ustedes dos. ¿Dónde está? - preguntó Izuku.

- No lo sé, olvídate de ese hombre - respondió mi padre de mala manera.

- Siento su tono, hoy se ha levantado con el pie izquierdo - susurré a Izuku.

- Eso parece... - susurró él.

Así nos fuimos dirigiendo a la zona de escalada, que fue donde según Kaminari "él salvó a dos hermosas señoritas"; aunque la versión de Jiro, en que Kaminari había cortocircuitado y había sido tomado como rehén, sonaba más creíble. Paramos de caminar al llegar a un barranco, y allí fue donde Número 13 empezó a explicar de qué iría la prueba.

- ¡Iniciaremos con el entrenamiento de rescate! Habrán tres estudiantes en el fondo del barranco, uno de ellos estará inconsciente, otro tendrá una pierna herida y el otro estará muy preocupado.

Kaminari y Kirishima se asomaron al barranco.

- ¡Qué gran altura! - exclamó Kaminari.

- ¡¿Cómo llegaremos allí?! - inquirió Kirishima.

- ¡¿Qué demonios decís?! - preguntó Iida, asomándose también - ¡¿Se encuentran bien?! ¡No se preocupen, los salvaremos! - gritó en el barranco para después llevarse la mano a la oreja, como si así pudiera escuchar mejor.

- Eres muy veloz... Aunque eres el único... - dijeron Kaminari y Kirishima al unísono.

- Bueno, parece que esta clase será interesante - comenté.

Miré a Izuku, pero algo detrás de él me llamó la atención.

- ¿Pasa algo? - me preguntó Izuku, extrañado.

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