Emily, sube al auto pero aún no puede ponerse en marcha pensando en lo que acaba de pasar, la forma en la que reaccionó Ciaus al verla y como Siara, sonrió para él.
— Mamá— habla Siara, - ¿Ciaus, es tu amigo?
Emily, la mira a través del espejo retrovisor. — Es un viejo amigo- afirma pero se voltea hacia ella,
— cariño, no le digas a tus abuelos sobre él, ¿si?- ¿por qué?
— ahhh, bueno...— la joven sonríe de lado, — para que sea una sorpresa para ellos cuando se vean.
Siara, dibuja una O con su boca y asiente con la cabeza, — ¡si!— luego de esa respuesta, la joven vuelve a respirar tranquilamente y se pone en marcha.
▶▶▶
Si Malia, tuviera que pensar en la conversación que tuvo con Nora, sobre Trevor, definitivamente preferiría pensar más en Ethan y es lo que hace mientras termina de preparar la mesa para la cena de esta noche.
Ya se acerca la hora que había acordado con él, así que cuando el timbre suena, no duda en ir a abrir.
Malia, abre la puerta con una de sus cálidas sonrisas, pero la misma comienza a desvanecerse al no ver a Trevor allí. El individuo que está frente a ella, mirándola fijamente con esa maldita mirada penetrante y esa expresión indescifrable en su rostro, no es nada más y nada menos que Ethan. Afuera no está lloviendo, es más, la noche está muy cálida, pero su cabello está húmedo, cayendo sobre su frente desprolijamente, alterando aún más la poca concentración de Malia
— ¿Qué haces...
- Vine a visitarte— Ethan, sonríe apenas, volviendo a su expresión seria pero se las arregla para ingresar al departamento en ese monosegundo de distracción de la joven.
— No puedes estar aquí— Malia, lo toma del brazo para sacarlo del lugar, pero no logra moverlo ni un centímetro por su cuenta.
— Mmm, una cena- sigue Ethan, obligando a Malia a soltarlo ya que avanza hacia la mesa puesta por la joven con tanto esmero,— Por lo que veo tienes una cita.
— Basta— gruñe Malia, — no puedes estar aquí y es sólo una cena con mi mejor amigo.
Ethan, la mira sobre su hombro, tensando su mandíbula visiblemente, aún así, le regala una fría sonrisa.
— ¿Con que él es tu mejor amigo?— ríe sin humor.
— No debe de importarte...
Ethan, toma entre sus manos la fuente que contiene la pasta hecha por Malia y sin piedad alguna, lo termina arrojando al tacho de basura.
— ¿¡Qué haces!?— se precipita Malia, dándole un intento de empujón pero aunque recupere la fuente, la misma ya está completamente vacía,
— ¿Estas loco? Eres un idiota— sigue Malia, mirando el tacho de basura, hasta que escucha que algo se derrama, y al darce vuelta lo ve arrojando el vino sobre la pileta de la cocina, — ¡detente!— hace el intento de llegar a la botella pero él lo aleja rápidamente.— pastas y vino, ¿una cena romántica con un final en la habitación?
— esto no es de tu incumbencia, así que vete— Ethan, deja sobre la isla de la cocina la botella y en un movimiento termina acorralando a Malia, entre él y la isla, con sus manos apoyada sobre la misma, evitando que Malia escape.
— Sólo vine aquí a hablar contigo, ¿sabes? Pero cuando dijiste que tenías una cena con él, me puse de mal humor— se acerca más a Malia, hablando a escasos centímetros de sus labios,— destruiere todo el departamento si eso hace que no te reunas con ese idiota.
ESTÁS LEYENDO
A través de tus Ojos.
RomanceLa oscuridad los encierra a ambos pero desean vivir en ese infierno, juntos... De líder de una pandilla a jefe mafioso, ¿que podría salir mal? En un mundo lleno de deseo, lujuria, adicciones, peligro y muerte....