Margarita

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Luego de ir por Sana al orfanato Jimin y Hoseok caminaron por un sendero que iba a un lugar tras el orfanato donde se encuentra un pequeño espacio donde los árboles crecen frondosamente.

Sana sonríe al caminar junto a Mochi, el gatito que también parece feliz de haber salido a la naturaleza y de estar en compañía de una niña, la cual acaricia su pelaje con suavidad.

-¡Tengan cuidado!-grita Jimin como si ambos fueran capaces de escucharlo.

-¿En verdad crees que van a obedecer?-rio Hoseok observando a Sana empezar a correr con Mochi alrededor de un enorme árbol jugando a las escondidas.

-Supongo que no.

-Déjalos libres por un momento, seguramente no han podido divertirse así-suspiró Hoseok tomando asiento bajo la sombra de un árbol mediano cuyas ramas se extendían bajo hasta tocar el suelo.

Estando en ese lugar Hoseok observó a Jimin con atención, sus brazos abrazaban su cintura y en sus ojos se encontraba un sentimiento de alegría al ver a Sana a lo lejos, en aquellos ojos azules se extendía un sentimiento lleno de ternura al ver a esas pequeñas criaturas a los lejos divertirse juntas, en ese instante Hoseok pensó seriamente en tener algo más que una relación con Jimin. Dentro de su pecho creció una sensación de anhelo, ese que había experimentado al ver a la familia Min en el hospital cuando nació el primer hijo de su antiguo cliente.

-¡Jiminnie ven a jugar con nosotros!-gritó Sana corriendo hasta llegar a Jimin para tomar su mano y llevarlo a jugar a las escondidas en medio de los árboles junto con Mochi.

Hoseok negándose a quedar fuera de ese ambiente tan cálido decidió unirse al juego siendo el primero en contar del uno al diez tapando sus ojos mientras Jimin, Sana y hasta Mochi se escondían en los alrededores.

-...diez, ¡listos o no, allá voy!-gritó bajando la mano que usó para cubrirse los ojos y mirar a todas partes encontrando a Sana primero, sin embargo fingió no verla e ir por Jimin, quien no estaba en su rango de visión.

-¿Me preguntó a dónde habrá ido Sana?-dijo en voz alta al pasar a un lado de Sana escondida en medio de un pequeño arbusto junto con Mochi-¡Ah!-suspiró cruzando sus brazos fingiendo buscar por todas partes-Sana es tan buena escondiéndose que no sé por dónde empezar-añadió escuchando la rosa baja de Sana entre los arbustos, luego caminó lejos intentando no reir escuchando la risa de la pequeña Sana.

Hoseok empezó a buscar a Jimin sin dejar de vigilar a Sana con el rabillo del ojo y cuando caminó un poco lejos siguiendo unas cuantas pisadas sobre la hierba dejadas por Jimin, Sana salió corriendo de su escondite cargando a Mochi entre sus brazos volteando su mirada par ver si Hoseok la estaba mirando sin tener en cuenta lo que estaba frente a ella y cuando estaba a punto de chocar con un árbol el cuerpo de Jimin la tomó antes de que eso pasara haciendo que Sana se asuste, después de ese pequeño susto Jimin tomó a Sana en silencio para llevarla a esconderse de vuelta.

Hoseok que estaba un poco lejos simplemente contuvo la respiración al ver que Sana estuvo a punto de chocar fuertemente con un árbol y su respiración volvió cuando vio a Jimin detenerla justo a tiempo.

Ese chico después de todo no era tan irresponsable como había pensado antes.

Cuando lo conoció creyó que era ese tipo de niños ricos que solo se preocupaban por ellos, irresponsables con todo y que pedía cosas por capricho, no obstante en todo el tiempo que pasó junto con Jimin se dió cuenta de que el exterior a veces puede ser una pantalla, la cual no es nada más que una imagen, pero en el interior hay mucho más que solo un niño mimado y con dinero.

Se preguntó por un milisegundo si Jimin y él en verdad podrían criar a una niña, en ese momento creyó que sí y lo deseo, más que nada de lo que había deseado antes.

Sintiéndose ridículo por pensar en Jimin como un padre siendo tan joven caminó en dirección a donde habían ido los tres encontrándose con que no había ninguna señal de ellos por ninguna parte. Hoseok buscó muy bien por todas partes e incluso siguió el rastro que dejaron al caminar por la fina capa de maleza que había en el suelo, la cual lo llevó a una parte mucho más lejana y tras un tronco encontró a Jimin tomando pequeñas flores del suelo junto con Sana, quien tenía en sus pequeñas manos ramilletes de flores silvestres.

-Los encontré-dijo Hoseok tomando asiento junto al tronco del árbol-ganar es bueno.

-Solo nos encontraste porque nos dejamos encontrar-dijo Jimin tomando asiento junto a Hoseok para luego extender en su dirección algunas flores sonriendo plenamente-para ti.

-Me siento mal de ser el primero en recibir flores.

-Ni tanto-opinó Sana observando las margaritas en manos de Hoseok-esa flores son amistad.

Jimin y Hoseok observaron con atención las margaritas y luego a Sana.

-La maestra nos dio margaritas el primer día de clases y dijo que dar margaritas significa amistad...-Sana intentaba recordar la palabra que la maestra dijo luego-...como era...-susurró frunciendo el ceño profundamente-...¿in-indonicional?

-¿Incondicional?-preguntó Jimin.

-Sí, eso, es cuando la amistad es muy especial y...frate...frate...

-Fraternal-habló esta vez Hoseok observando las flores en sus manos-una amistad fraternal.

-Sí, eso-asintió Sana recolectando más margaritas en sus manos-estas se las voy a dar a mis amigos y estas son para ustedes-añadió extendiendo dos flores para Jimin y Hoseok-seamos amigos por mucho tiempo.

Ambos sonrieron asintiendo, sin dejar de observar las margaritas en las manos de Hoseok.

-Esto...-dijo Jimin cuando estaban volviendo al auto por la comida que llevaron de un restaurante-no es lo que quise decir con las margaritas, no es que solo quiera tu amistad, digo quiero mucho más que eso...

-Lo sé-interrumpió Hoseok sonriendo-la próxima vez yo voy a darte flores, tal vez rosas rojas, creo que esas simbolizan amor.

-Amor-repitió Jimin en voz baja observando a su esposo adelantarse para sacar de la cajuela los contenedores de comida-amor...

En medio de su ensoñación que lo elevó a las nubes sintió la vibración de su celular en su bolsillo y cuando lo tomó contestó inmediatamente al ver que era Eunwoo.

-Eunwoo, ¿dónde estás?¿por qué no te vi hoy en clases?¿Hasta cuándo piensas faltar?

-Luego te voy a contar todo lo que pasó en estos días, pero antes necesito saber donde estás.

-Estoy en medio de algo importante-sonrió Jimin observando a Sana y Mochi rodear a Hoseok saltando pidiendo comida.

-Necesito hablar contigo de algo importante, ¿podemos vernos hoy?

-Estoy con mi esposo jugando con Sana y Mochi, ¿te parece si nos vemos otro día?

-Entonces podemos vernos mañana.

-Mañana voy a ir a visitar a mis primos y a mis tíos.

-¡Jimin!¡ayuda!-gritó Hoseok sin poder controlar a Sana y Mochi.

-Tal vez la otra semana Eunwoo o el fin de semana, hablamos luego-colgó Jimin para ir en ayuda de su esposo que estaba siendo hostigado por dos pequeños monstruos hambrientos.

Mi Compañero de Matrimonio (HopeMin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora