Nuestra primera noche

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Jimin camina feliz por los pasillos del supermercado eligiendo cada artículo interesante que pasa por su visión colocándolo en el carrito empujado por su esposo siguiendo sus pasos con una sonrisa tenue al ver la emoción de Jimin provocada por pequeños artículos ridículos de hogar.

Si su pequeño esposo miraba un cojín con orejas de gato peludo lo colocaba dentro del carrito, también tomó una lámpara de forma extraña en forma de pájaro, era muy linda si la miraba con detenimiento, de ese modo el carrito se fue llenando de varios artículos los cuales Hoseok tuvo que pedir a la tienda los lleve hasta su casa en un envío.

Y luego siguieron las compras de la alacena, algo que no emocionó demasiado a Jimin pero sí a Hoseok, quien escogió innumerables alimentos saludables y unos pocos no saludables hasta llenar el carrito de compras.

-¿Vamos a comer todo eso?-preguntó Jimin asombrado por la cantidad de alimentos y bolsas de supermercado llenando la cajuela del auto.

-Claro que sí, yo voy a cocinar todos los días y también voy a enviarte comida para que la lleves a la universidad.

-¿Me vas a enviar una lonchera?

-La comida de los restaurantes no es tan saludable, debes comer mejor.

-Si eso es lo que quieres esta bien, me encantaría comer todos los días lo que prepares, pero con una condición.

-¿Mmm,,.?

-Que me dejes ayudar y también quiero aprender a cocinar.

Hoseok estaba tentado a mencionar el asunto con Eunwoo, el amiguito de su esposo que le ayudó y trató de enseñar a cocinar, sin embargo decidió no decir nada y mantener silencio para sonreír amablemente recordando su promesa de hacer feliz a Jimin.

-Te enseñaré si quieres.

-Gracias-respondió emocionado Jimin acercándose a Hoseok para darle un beso en la mejilla.

Aquellos pequeños acercamientos de Jimin estaban colocando nervioso a Hoseok, quería apartarse y la vez no, deseaba elevar un muro tan alto a su alrededor para que este chico no sobrepasará los límites pero eso iba en contra de su promesa, por lo tanto decidido a no alejarse del todo. Sonriendo ligeramente tomó el mentón de Jimin con una de sus manos en un ligero movimiento, después cerró la cajuela para abrir la puerta del copiloto a Jimin.

-¿Te sientes feliz?-preguntó Jimin dentro del auto descolocando a Hoseok con su pregunta.

-¿Por qué lo preguntas?

-Sonríes más seguido, eso es lindo, aunque tu rostro serio también es atractivo.

-Deja de decir tonterías-respondió Hoseok calmando a su corazón por las palabras de Jimin. Definitivamente este chico lo sorprendía a cada paso que daba.

Una vez todo estuvo en su lugar en la cocina Hoseok preparó una comida ligera para esa noche y Jimin hizo pequeñas cosas como cortar las verduras y lavar algunos platos y cucharas.

-Todo estuvo delicioso-suspiró Jimin estirando sus brazos arriba-¿puedo lavar los platos mañana? Ya lave las ollas.

-Solo por esta vez-advirtió Hoseok, este día había sido demasiado largo que él estaba exhausto, seguramente Jimin también debía estarlo.

-Y ahora que terminamos de comer es hora de...-empezó a decir Jimin caminando a la cocina para luego reaparecer con algunas botellas de soju en sus manos-la hora de celebrar por nuestra nueva casa-terminó de decir alegremente.

-Esta noche estoy demasiado cansado para beber-expresó Hoseok su malestar y al mismo tiempo queriendo evitar esa bebida.

-Pero debemos celebrar-repitió Jimin entristecido con unos ojos suplicantes, los cuales ya hacían efecto en Hoseok.

-Solo una botella-dijo pero una botella se transformó en varias hasta que ambos estaban ligeramente ebrios.

-Estoy tan feliz de haberme casado contigo-dijo Jimin abrazando a Hoseok.

Ambos se trasladaron a la sala tomando asiento en el suelo alrededor de la mesa de centro por lo que con el entusiasmo con el que Jimin abrazo a Hoseok ambos terminaron en el suelo con sus rostros cerca el uno del otro.

-Deberíamos ir a dormir-opinó Hoseok volteando su rostro en otra dirección, no debía acercarse demasiado a Jimin, no debía caer ante esos ojos azules y ese rostro suplicante de cariño, mucho menos a esos labios que constantemente buscaban una oportunidad.

-¿No te gusto ni un poquito?-preguntó Jimin en voz baja entrecortada-a mi...a mi si me gusta mucho mi esposo, pero yo no le gusto.

-Eso...no es que no me gustes, es solo que creo que debemos conocernos un poco más-habló Hoseok desconcertado por la confección de Jimin.

-¿Cuanto más?¿no te parezco lindo?-preguntó Jimin desabrochando los botones de su camisa dejando ver su tersa y suave piel.

-Eres muy lindo-dijo Hoseok sin pensar en voz alta observando atentamente aquella piel suave de un color precioso que lo estaba llamando con desesperación, luego sus sentidos volvieron y apartó la mirada, no debía, no debía dejarse tentar por esa piel joven, por esos ojos precioso que lo miraban con deseo y esos labios rellenos que se miraban tan suaves, ¿por qué este chico era tan cruel?-Estas ebrio, no estas en tus cinco sentidos.

-No estoy tan ebrio, estoy totalmente conciente, el alcohol hizo que mi lengua se despertara un poco y ahora puedo decir que me gustas, me gustas mucho, me gusta mucho tu cuerpo y tus brazos, quiero que me toques y me beses y quiero que me...

Entonces Hoseok tapó la boca de Jimin con su mano, no quería escuchar más, su voluntad era fuerte pero no demasiado.

-En otro momento-dijo saliendo de debajo del cuerpo de Jimin.

-¿Cuando no esté ebrio?

-Ya veremos-dijo caminando apresuradamente lejos de esa pequeña tentación con piernas para ir directamente a la ducha, lo menos que deseaba era que Jimin observe lo que provocaba en su cuerpo, si se daba cuenta que en realidad él deseaba los mismo no habría nada que lo detuviera esa noche.

-No caigas Jung-se dijo a sí mismo bajo el agua fría-no te involucres con ese chico, es demasiado joven.

Además de ser demasiado joven para él, la cuestión principal para no involucrarse era el caso, si lo descubren involucrándose sentimentalmente con Jimin lo iban a sacar y luego no sabría que serían capaces de hacer, la probabilidad de hacer que finja un divorcio era muy alta y luego seguramente harían que los padres de Jimin lo casen con otro agente que simule ser otro heredero. No podía permitir eso, solo de pensar en esa posibilidad le revolvía el estómago.

-No hagas nada estúpido Jung-se reprendió decidido.

Mi Compañero de Matrimonio (HopeMin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora