Día de llamadas

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-¡No puedes hacer esto mamá!

Los gritos de Park Jimin podían escucharse a kilómetros, su departamento estaba ubicado en el último piso de uno de los edificios más lujosos de Seúl, en una villa extremadamente exclusiva. Si caminaba una tarde o en la noche era normal ver a algún actor, modelo o idol por las instalaciones. Un ambiente tan alejado de su casa como le fue posible encontrar, esa era su ambiente sagrado en el que sus padres estaban vetados de por vida desde que empezaron con esos estúpidos planes de hallar un prometido para él.

-Cariño ya hablamos con los padres del hombre con el que te vas a casar, es muy guapo, me enviaron una fotografía de él, te envíe una y espero que la hayas visto, no está nada mal. Tiene un par de años más que Taemin, pero no es tan mayor y muy pronto va a heredar la empresa de su padre y lo mejor de todo es que su familia no ha estado envuelta en escándalos jamás, además debes estar agradecido que ellos fueran los primeros en buscarnos, quieren tener genes hermosos para sus nietos, ¡gracias a Dios que tu rostro es precioso...!

Sin querer escuchar más de lo que decía su madre, Jimin dejó su teléfono en la mesa de centro de su sala y fue a prepararse para sus clases en la universidad. Ya había faltado un par de días por el escándalo del padre de Taemin, sin embargo no podía seguir faltando, mucho menos cuando estaban próximos los exámenes trimestrales.

A diferencia de sus padres, Jimin no esperaba tener la vida resuelta casándose con un millonario, quería estudiar para poder alguna vez encontrar un empleo e irse muy lejos cuando ahorrara lo suficiente.

-¡Eunwo!-gritó desde la base de la escalera-¡vamos a llegar tarde!

-¡Ya voy!

Al menos en medio de todos sus problemas había una persona que no lo dejaba pese a las dificultades y ese era su amigo Eunwo. Un chico alto de su misma edad que tenía una beca en la universidad y era tan inteligente como él. Era agradable poder hablar de algo más que de ropa y marcas con alguien, con Eunwo podía pasarse horas charlando de libros, documentales, música, películas, teorías de cómo surgió vida en el planeta y también teorías de si fueron extraterrestres los que implantaron al ser humano en la tierra.

-Espera...mi celular-recordó Jimin corriendo velozmente a la sala.

-¿Dejaste hablando a tu madre sola de nuevo?

-Claro que si, no quiero escuchar más planes de bodas y compromisos.

-¿Ya te consiguió un nuevo prometido?

-Sí-contestó Jimin con incomodidad desviando su mirada de los ojos de Eunwo. Desde dónde estaba podía escuchar los gritos de su madre salir por el celular-dime.

-¡¿Escuchaste lo que dije?! Ni se te ocurra llegar tarde esta noche a la cena, vas a conocer a tu prometido y a sus padres.

-Como digas-contestó luego colgó la llamada.

Entre evitar las miradas de sus compañeros y el aguantar los cuchicheos que paseaban por aquí y por allá, Jimin pasó el día en la universidad sin intención de ir a la dichosa cena. Definitivamente no estaba dispuesto a presentarse.

.Tengo el leve presentimiento de que no vas a ir a la cena-comentó Eunwo llegando donde estaba Jimin en una de las bancas bajo un árbol cerca de uno de los edificios principales de la universidad, le entregó un batido de leche y fresa para luego sentarse a un lado con un batido de chocolate en sus manos.

Por un largo momento Jimin se dedicó a tomar su batido y Eunwo también tomó el suyo, no dijeron nada hasta terminar los batidos y luego se dedicaron a mirar las nubes en el cielo tornándose de color naranja. 

-No voy a ir, si quieren casarme con un desconocido está bien, pero no voy a ser partícipe de los preparativos, que me llamen cuando tenga que ir al altar.

-No seas tan duro con tus padres.

-Me han tratado como una moneda de cambio este año, no los puedo seguir tratando como antes. Creen que es un capricho mío no querer casarme por conveniencia...siempre quise una boda hermosa con el hombre que amo, con el que quiero pasar el resto de mi vida...¿Cómo pueden quitarme eso?

-Lo que hacen está mal, pero...

-No lo digas de nuevo-dijo Jimin poniéndose de pie-lo que a ellos les preocupa más en este mundo es su estatus, dinero y cómo los ve la sociedad, no yo.

Sin más que decir Jimin tiró el vaso de plástico a la basura para luego dirigirse a su auto. Para ese momento su cabeza ya estaba hecha un lío sin la capacidad de pensar en nada más, sintiéndose como una res esperando a ir al matadero.

-¿Sí?-contestó su teléfono celular luego de desviar un par de veces la insistente llamada de un número desconocido.

-Jimin primito, te tengo buenas noticias, ¿a que no adivinas dónde estoy?

-Ya dime dónde estás Jinnie-entonces una sonrisa apareció en sus labios al escuchar la voz de uno de sus primos.

-Estoy en el hospital, ya va a nacer el primogénito de los Min, si quieres ver como puede ser tu hijo ven ahora mismo, y por favor para la próxima contesta tu celular cuando alguien te llama.

-Pues deberías de cuidar mejor tus celulares y no cambiar de número tan seguido, voy enseguida, ¿al hospital de siempre verdad?

-Claro que sí y no necesitas regañarme por mis hábitos, recuerda que soy mayor a ti mocoso.

-Olvidaba que ya estás a un paso de la tumba, adiós-colgó rápidamente antes de escuchar los regaños de Jin al otro lado de la línea.

Al menos por un momento pudo relajarse conduciendo en dirección al hospital.

El sonido de la música envolviendo el interior del auto, el viento que entraba por las ventanas abiertas y el ligero aroma a fresas del ambientador apartaron su mente de la realidad, introduciendo sus pensamientos en la melodía y divertida letra de las canciones de la radio.

Su cuerpo relajado cambió totalmente al entrar a una de las salas de espera donde estaban esperando todos sus familiares, entre ellos Jin y su esposo Namjoon, un amigo de la familia llamado Taehyung, su tía Shin Hye y su esposo Rae Won, que sorpresivamente se encontraban calmados a diferencia de todos los demás que estaban a punto de comerse las uñas.

-¿Por qué tardaste tanto cariño?-preguntó su tía Hye con una tierna voz-estaba ansiosa por verte, ha pasado tanto tiempo-luego se acercó para darle un cálido abrazo.

-Usé la ruta más larga tía, necesitaba un poco de aire-devolvió el abrazo con una sonrisa pensando en lo fácil que sería su vida si tuviera una madre como su tía Hye.

-Por más que te mire me sorprende el parecido que tienes con mi Jimin, hace un par de años se veía igual a ti, claro un poco más rellenito pero son tan iguales-comentó Rae Won El esposo de su tía saludándolo con una palmada en su hombro.

-Es bueno verlo tío.

-Bueno el rostro es lo único que tienen en común porque este chico es un demonio-exclamó Jin llegando hasta dónde estaba para darle un corto abrazo-¿porque no llegaste ayer a la celebración de mis votos? Te estaba esperando.

-Tuve un pequeño inconveniente en el camino-se excusó Jimin sin dar más detalles-¿y dónde está el futuro padre?

-Dentro de la sala de parto dándole ánimos a mi hermanito-respondió Jin.

Mi Compañero de Matrimonio (HopeMin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora