Anna...
En mi vida he visto cosas simples, otras no tanto. Lo que acabo de presenciar era algo que la verdad jamás espere vivir.
Mis oidos aún podían escuchar las detonaciones. Entendía que este mundo era peligroso, que lo que pasaban en las noticias o en la televisión no solo era eso, que la realidad resultaba peor.
Por la ventanilla de la camioneta veía como la nieve bajaba con lentitud. No había dicho una sola palabra, los nervios y la adrenalina del momento me habían dejado muda. No voy a negar que me asuste, que sentí miedo al no saber que me harían o que ocurría. Pero más que todo fue temor a la situación.
Moví mi rostro y mire al hombre junto a mi, que solo observaba su celular.
Su perfil era elegante, con una tenue barba de apenas unos días. Poseía un cabello de color castaño oscuro, el cual hacía contraste un poco con su blanco tono de piel. Baje hacia sus brazos, los cuales se encontraban muy marcados debido a la camisa blanca que vestía. Pero eran sus ojos los que se me hacían familiar, era ese gris con pequeños detalles en azul que me daban la sospecha de haberlos visto en alguna parte...
¿Pero en donde?
-Te parezco atractivo?- su ronca voz logro que pisara tierra.
No me había fijado que lo vi más de la cuenta.
Este giro su rostro, y me quedo mirando con tanta frialdad que me cuestione la idea si era un ser humano o un cubo de hielo.
Gire rápidamente antes de que se diera cuenta lo avergonzada que me sentía.
Un par de minutos pasaron, antes de que al fin tomara la iniciativa de cortar el silencio tan incómodo que se había formado.
-Como te llamas?- pregunte con algo de cautela.
Pero este no respondió, solo siguió con la vista en su celular.
Me estaba ignorando.
Infle mis mejillas un poco exasperada. Y continúe hablando para ver si podía aclarar un poco mis dudas.
-Mi nombre es Anna- no dijo nada- ¿Puedo saber a donde me llevas?
Este dejo a un lado su celular para luego colocar sus ojos grises en mi. Eran muy bonitos.
-Eres muy habladora- hablo con un asento que pude identificar como ruso.
Y por alguna extraña razón puede sentir como si esta situación la había vivido antes. Frunci el ceño, al no comprender lo que ocurría.
No pude pensar tanto en eso, ya que la camioneta se detuvo en ese momento. El me dedico una mirada antes de bajar del vehículo.
Baje de igual manera, para luego abrazarme a mi misma cuando el fuerte frío me impacto.
Este al verlo, paso sobre mis hombros un grueso abrigo, igual al que ahora el llevaba puesto. Cosa que agradecí infinitamente. Aunque aún tenía mucho frío debido al vestido simple de tirantes que portaba en estos momentos.
-Ven- dijo para que lo siguiera, lo cual hice.
Ante de nosotros se deslumbraba una hermosa mansión. Por fuera pude detallar que plasmaba un estilo histórico, pero elegante con unos pilares y una hermosa fuente al frente. Cabe mencionar que esta última se encontraba congelada, pero eso no le quitaba el atractivo.
Camine hacia las escaleras de la entrada, visualizando a mi paso todo a mi alrededor. Me di cuenta la multitud de hombres armados, que como guardianes, vigilaban todo lo que sucediera en su entorno. Eso sin duda causo cierta curiosidad en mi.
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Una Flor para Mi Angel [#3 Saga Flores]
RomanceElla... Ella es la definición de dulzura, inocencia y pureza. Era la luz de su familia, con una sonrisa y belleza capaz de cautivar a cualquier hombre. Pero dentro de toda esa bondad y buen corazón escondía demonios que noche tras noche la torturaba...