🌺CAPITULO 50🌺

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"El destino busca siempre regresar ciertas cosas del pasado... Solo el sabe que tanto pueden cambiar"






...





Esa noche, por un instante, le sonrió a la tierna pareja. Una que a pesar de ser tan desiguales, encajaban completamente a la perfección.

Dulzura y Peligro.

Oscuridad y luz.

Ángel y Demonio.

Las manos del ojigris continuaban brindando suaves caricias a su pareja. Ya su vientre era notorio, había pensado que tardaría más en versele. Sin embargo, allí estaba. Mostrando una pequeña barriguita abultada que lo engrandecía enormemente.

Un momento más paso y la frisa fría de la noche soplo un poco más, haciendo que el pequeño cuerpo de la mujer temblara un poco.

Vladimir supo que ya era momento de entrar. No queria exponerse a que su pequeño ángel se enfermera por estar tanto tiempo expuesta a la frialdad de la noche.

-Entremos.

La pareja ingreso nuevamente a la mansión. La mente de Anna aun tenia muchas dudas, pero que por esta noche las dejaría pasar.

Ya habían sido muchas emociones por un dia.

Al llegar a la gran estancia, Flor ya se encontraba allí platicando con el hombre que había ayudado al dulce angel en dos oportunidades.

Estos al verlos se giraron y Vladimir no pudo evitar acercar aún mas el cuerpo de su pequeña a su cuerpo al desconocer al hombre que allí estaba.

-Vladimir...

-¿Quien es este sujeto?- pregunto sin rodeos el ruso.

Bill inclino un lado de su boca hacia arriba, por extraño que parezca siente que ya había vivido una situación igual. O quizás si, pero fue hace muchos años atrás.

-Cariño, el es Bill Lombard. Es el hombre que me salvo esta tarde- explico Anna con voz suave.

-Usted debe ser...

-El prometido de la mujer a la cual salvo- le corto Vlad sin dejar de retar con la mirada al francés.

-Oh...

Anna quiso rodar los ojos por la necedad de su marido de siempre marcar territorio.

La puerta de la mansión se abrió y por ella entro Bryan, seguido de Javier.

Los ojos del coreano inmediatamente cayeron en su amada, no obstante al caer en el francés automáticamente su mirada cambio.

-¿¡Que mierda estas haciendo en mi casa Lombard!?- su grito logro llamar la atención de las otras personas que se encontraban en la mansión.

Adrián, al oír el grito de su padre se acerco a la estancia. Miro con interrogación la situación, mientras que los demás observaban con curiosidad todo.

-Bryan cariño, calma- intervino Flor colocando su mano en el pecho del coreano.

Los rasgados ojos de este la miraron, logrando suavizar un poco su expresión.

-Park.

-Lombard- menciono con desprecio el apellido del francés.

-Veo que no has cambiado en nada chinito- el tono de burla utilizado solo hizo que el coreano apretara sus puños a cada lado de su cuerpo con furia.

Siempre fue un hombre tranquilo, las personas que lo conocen saben que no es de esos hombres que pierden los estribos con facilidad. Sin embargo, cuando se trata de su amada Flor cerca de algún otro sujeto, eso siempre lo hace explotar. Y mas si se trata del hombre que tiempo atrás tenia intenciones de arrebatarle lo que era suyo.

Una Flor para Mi Angel [#3 Saga Flores]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora