Stark estaba bastante serio y te hizo pasar a la misma sala de reuniones, el rubio de ceño fruncido entró con ustedes y se sentó en una esquina. No le tomaste importancia, así que buscaste una silla junto a la mesa y te sentaste. Te dolía la cabeza y tenías una hambre terrible, apoyaste tus codos sobre la mesa y hundiste tu cara entre tus manos.
- Ah ver, - Tony tomó asiento frente a ti - creía que estabas demasiado deprimida para salir de tu habitación. Imagina mi sorpresa cuando fui esta mañana a buscarte y no estabas.
Quitaste tus manos de la cara y miraste a Stark con mucha pena, mordiste tu labio y te sumiste en el asiento.
- Luego pregunto donde estás y para mi sorpresa me entero que has salido, - Stark rio con ironía y se cruzó de brazos - No conmigo, no con Fury... sino con Peter...
- Stark... - quisiste decir algo, pero él te veía muy serio. Obstaste por callar.
- Tus salidas condicionadas y supervisadas estaban en lo que acordamos. ¿Si te acuerdas, no? - Stark se puso de pie y caminó un poco por el rededor de la mesa - Aposté mi pellejo por ti con Fury.
Stark tenía razón, tenía toda la razón de estar molesto contigo. Habías traicionado la confianza que había depositado en ti. Pero ya estaba hecho, no tenías más remedio que tratar de corregir y enmendar tu falta. Miraste a Tony, seguía muy serio. Le sonreíste con timidez y pediste perdón con la mirada. Stark sonrió tenuemente y caminó hacia ti.
- ¿Y que fue lo de Peter? - dijo al sentarse nuevamente, mirándote de forma curiosa.
- Nada... - pareciste dudar, - Stark, él solo me llevó a una fiesta. Quería animarme. Pero el tiempo voló y cuando nos dimos cuenta ya estaba amaneciendo - le miraste y sonreíste - Pero ya estoy aquí, no.
- No, T/N. Teníamos un acuerdo - Stark te miraba dudoso - ¿Estás... estás saliendo con Peter? Pasa mucho tiempo en tu cuarto...
- ¿Qué? - no sabías como interpretar esa pregunta y reíste nerviosa. Stark te miraba muy interesado.
- Vaya, Tony - el rubio en la esquina, casi habías olvidado que estaba ahí - Casi puedo sentir los celos. ¿Pepper sabe de esto? ¿Tú y... tu nueva amiga?
Giraste la silla y le miraste asombrada y molesta por lo atrevido de su insinuación. Él te devolvió una mirada muy seria, examinándote de pies a cabeza. ¿Qué se creía este? ¿Estaba juzgándote?
- ¿Y a ti quien te dijo que te metieras? - estabas verdaderamente molesta - Es una conversación entre Stark y yo. Solo... los dos... - señalaste a Tony y luego a ti - ...dos personas... ¿Captas?
- Además de torpe... - el rubio sonrió burlón y te miró desafiante, - irresponsable y respondona.
- ¡¿Disculpa?! - te pusiste de pie muy enojada, apretaste los puños. Tenías unas ganas de darle un bofetón por lo menos. No te conocía, era la segunda vez que se veían y ya se había hecho un juicio de ti.
Él también se puso de pie y te hizo frente. Estaba demostrándote que no te tenía miedo. Era más alto que tú, así que quedaste mirando para arriba cuando se puso delante de ti, su mirada seria chocaba con la tuya, que estaba fulminándolo. Ay... si tan solo...
- Ya... los dos, - Stark rodó los ojos, recordaste que tenías que enmendar las cosas con él.
- Stark, - volviste hacia él - te prometo que no volverá a pasar. No saldré así de nuevo - el rubio se rio de lo que acababas de decir - ¿Tienes algún problema? - las ganas de propinarle un bofetón eran cada vez más grandes. Te embargaban unas ganas de quitarle esa perfecta sonrisa que tenía.
- Parece que se llevarán muy bien - Stark se puso de pie y se paró en medio de los dos, parecía adivinar tus ganas de golpearlo. Te tomó del hombro y te apartó, pero seguías con la mirada al rubio tonto que igual te miraba arrogante.
- Es un pesado, Stark - estabas del otro lado de la sala, sin quitarle la vista de encima - ¿Pero quien se cree que es? ¿Don dientes perfectos?
- Mi nombre es Steve Rogers - se cruzó de brazos, su ceño fruncido volvió a aparecer.
Le sonreíste de una manera exagerada por un momento, para luego acribillarlo con una mirada indiferente. Steve tampoco apartaba la mirada de ti.
- Ya basta, - Stark pareció sentirse molesto con la atmósfera tan incómoda que estaban provocando - T/N, este asunto de salir sin avisar no esta bien.
- Lo siento - miraste de inmediato a Tony y suavizaste la mirada. ¡Cierto! Tenías que enmendar ese asunto.
- No basta que lo sientas, - Stark relajó su postura - Quiero que te comprometas. No quiero ser el que te diga que hacer, pero si el que te dirá que cuando uno da su palabra, la cumple. Yo di mi palabra a Fury que me haría cargo de ti y tú diste tu palabra de que cumplirías las normas que los tres acordamos. ¿Te comprometes, T/N?
Asentiste con firmeza a Stark. Él te tendió la mano y tú la estrechaste.
- Esta bien, - tomó tu mano entre las suyas y te sonrió muy contento, le devolviste una sonrisa igual de grande.
- Espero que Tony sepa que hace contigo - Steve Rogers arruinando el momento. Lo miraste furiosa.
- Volveré a mi habitación - dijiste amablemente a Stark, le tomaste el hombro con confianza y sonreíste animosa.
- No te pierdas - Stark levantó las cejas y te sonrió.
Tu sonrisa se esfumó al toparte de nuevo con la fría mirada de Rogers. Caminaste hasta la puerta, pero al pasar junto a él, le diste un golpe con el hombro, y muy molesto te quedó viendo. No volviste la mirada, simplemente saliste de la sala sin mirar atrás. Quien se reía de la escena fue Stark.
- Ya en serio, Tony - Steve le miró molesto - ¿Quién es ella?
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¿QUIÉN ES ELLA?
FanfictionUna historia con Tu Nombre (T/N). Haz llegado de forma accidental a la Tierra después de haber escapado del Acusador, que te utilizaba como su mercenaria. Te encuentras con un grupo de protectores que se hacen llamar Los Vengadores, los cuales decid...