¿QUIÉN ES ELLA?

Capítulo 41

Ibas a gran velocidad. Acababas de salir de un estado crítico y ahora estabas consumiendo la energía del Bifrost. Sentiste recorrerla en todo tu cuerpo, como leves escalofríos; era una energía más limpia y pura, las luces multicolores a tu alrededor comenzaron a calar tu piel, dándole un aspecto tornasol, tus ojos alcanzaron una visibilidad inmensa: podías ver las estrellas y cúmulos estelares que ibas surcando. Tus dedos comenzaron a rasgar el portal del Bifrost, estabas deteniendo tu trayectoria, pero pronto llegaste a tu destino.

Aterrizaste bruscamente, cayendo de rodillas, sobre un terreno árido. La tierra parecía cenizas que mancharon tus manos; el cielo estaba cubierto de nubes marrones y amarillentas, parecía de noche porque la luz de la estrella que alumbraba el planeta apenas penetraba la espesa atmósfera. Te sentaste sobre tus piernas, hincada; no había nada vivo en aquel desolado lugar. El viento resoplaba violento, alboreando tus cabellos.

- Pero... - miraste contrariada al ponerte de pie - ¿Dónde estoy?

- Entonces no reconoces el lugar en donde estás parada - una voz a tus espaldas hizo que se te erizaran los cabellos de la nuca, junto con un helado escalofrío que recorrió tu espalda. Volteaste de inmediato.

- ¿Odín? - contuviste la respiración, el Padre de Todo estaba parado frente a ti, te veía inquisitivo de pie a cabeza.

- Hola, T/N - Loki también estaba allí.

- ¿Thor? - ambos hijos de Odín estaban presentes, te sentías acorralada - ¿Qué es todo esto?

- T/N... - Thor te miraba compungido - ¿Es cierto que tu destruiste este planeta... tu planeta?

Sentiste una pesadez en el estómago y tu manos sudaron. Miraste confundida y nerviosa a tu alrededor. Mientras el Padre de Todo te juzgaba con una dura mirada, Thor se veía dolido, Loki te miraba con asombro, esperando que desmintieras, miraba ocasionalmente a Odín, que no te quitaba la vista de encima.

- ¿Qué? - un nudo en tu garganta comenzaba a quemarte, inmediatamente tus ojos se llenaron de lágrimas. Miraste a Thor con súplica y negaste con la cabeza.

- No creo que no lo recuerdes - el tono de Odín era áspero y prepotente.

A tu mente vino el latente recuerdo, de un planeta entero siendo consumido por fuego como si estuviera hecho de papel. ¿Cómo no ibas a recordarlo? Si todavía escuchabas el crujir de la tierra, los gritos de los inocentes cuando sus cuerpos se calcinaron por el calor; el olor a humo que se te quedó impregnado por mucho tiempo. Ahogaste un doloroso lamento tapándote la boca. Tus lágrimas caían como cálidos torrenciales sobre tus mejillas.

- Sabes que eres una bomba de tiempo, en donde quiera que estés - Odín caminó unos pasos alrededor de ti, como león asechando a una gacela.

- Padre, - Thor tenía los ojos llorosos - tiene que haber una forma... en que podamos ayudarla...

- Ya viste lo que estaba a punto de pasar en Midgard - Odín hablo con voz fuerte a su hijo - Es un peligro a donde quiera que vaya. T/N debe permanecer en el exilio si no quiere dañar a ningún mundo más. Ya no hay forma de ayudarla.

Thor se echó para atrás y te miró apesadumbrado. Loki se sorprendió de las palabras de su padre y te miró con preocupación. Odín pretendía dejarte allí. ¿Qué? Comprendiste el porque estaban en ese lugar. Quería dejarte justo en el punto en donde tu vida se fue al carajo. El lugar en donde te encontró completamente indefensa el Acusador, Ronan. De solo imaginarte que él volvería a encontrarte y caer de nuevo en su dominio, hizo que te diera coraje. Habías batallado mucho para escapar de sus garras y no ¡No volverías a ser usada por nadie! Sentiste hervirte la sangre. Odín dijo que ya no podían ayudarte ¡¿Cuándo el Padre de Todo siquiera intentó hacerlo?! Un grito desgarrador y colérico salió de tu garganta e hiciste estremecer a los presentes.

- ¡¡¡Odín!!! - tenías mucha rabia, el Rey de Asgard te miró con indiferencia, él no estaba sorprendido - ¡No más mentiras! - empuñaste tus manos colérica, haciendo que se encendieran en vivas llamas azules - ¡Di toda la verdad!

Odín agachó la cabeza pensativo, pero volvió a verte con dureza, no ibas a doblegarle tan fácil, el Padre de Todo tenía su temple. Loki y Thor te miraban anonadados sin comprender lo que estabas diciendo, ¿De qué acusabas a su padre?

- ¡Dinos, Odín! - estabas sofocada, cada vez sintiéndote más colérica - ¡¿Por que?! - te plantaste con furia - ¡¿Por qué mejor no me mataste cuando supiste que era?! ¡Cuando me encontraste siendo aún niña! - Odín pareció reaccionar ante tus palabras - En vez de llevarme a Asgard y dejarme crecer con tus hijos. ¿Acaso tenías un plan para mi? ¿Querías que hiciera algo por ti? - repelaste con desprecio.

Thor y Loki estaban confundidos por lo que estabas diciendo. ¿Acaso Odín sabía de tus habilidades mucho antes de que se manifestaran?

- Tú dejaste que provocara esto... - extendiste tus manos, señalando el terreno árido - Me enviaste a esta tierra de inocentes. Sabiendo el peligro que yo era - miraste a Thor y Loki - Este no era mi planeta natal como les dijo - un doloroso lamento ahogó tu garganta y te acongojaste, poniendo tus manos en el pecho, en donde sentías el mayor dolor - Él me envió aquí... sabiendo lo que podía pasar... - miraste a Odín  - ¡Y así me enviaste a este planeta...! - nuevamente te embargó el coraje - ¡¿Por que no me matas de una vez?! - tu cabeza lanceteaba de dolor - Yo ya no puedo con esta culpa... - tu voz salía entrecortada por los sentimientos - ...Culpa que también es tuya, Padre de Todo.

- ¡No me culpes por tus errores! - Odín se plantó molesto y empuñó su cetro.

- ¡Tú lo sabías! - le sentenciaste furiosa con tu dedo - ¡Eso te vuelve responsable también!

- ¡Padre! - Thor se mostró enojado - ¿Es cierto todo lo que está diciendo T/N? - Odín le miró contrariado.

- ¡¿Es cierto?! - también reclamó Loki. Odín permaneció callado.

- Te odio, Odín - te erguiste y le miraste furiosa, ahora las lágrimas te brotaban del coraje, el Rey de Asgard te miró con el ceño fruncido - Te odio por haberme arrancado de Asgard, el lugar que consideré mi hogar - caminaste con pasos decididos hacia él - Por apartarme de mi amor - Thor ahogó un suspiro lastimero - Por quitarme mi familia... - Loki se vio conmovido.

- ¡Basta! - Odín te lanzó un rayo con su cetro, pues te estabas acercando muy amenazante hacia él. Caíste adolorida en el cenizo suelo - Mi deber... es proteger los mundos de cualquiera que sea la amenaza.

- ¿Amenaza? - golpeaste con furia la tierra con tus puños y te pusiste de pie de inmediato, tus ojos se encendieron del coraje - ¿Quieres ver, Odín? - empuñaste tus manos y se encendieron nuevamente con llamas azules y violetas - El mounstro que dejaste vivir... 

- T/N... - Thor te miró estupefacto - Detente, por favor...

Pero tu rabia no te dejaba escuchar razones, que hasta mezcló los sentimientos que sentías en ese momento, el dolor de tu rompimiento con Thor lo confundiste con la furia que tenías contra Odín y por impulso lanzaste a Thor el rayo acumulado que recibiste del Padre de Todo, lanzándolo por el aire a varios metros de allí. 

- ¡Ya basta! - Odín se planteó delante tuyo con suprema autoridad.

- NO, Padre de Todo... - te entregaste por completo al desmesurado ímpetu que sentías, tu cuerpo se cubrió por completo de feroces llamas - Tu voluntad ya no se cumple en mi.