Capítulo 66

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Salieron de la cafetería y volvieron a la camioneta, dirigiéndose al lugar al que habías señalado. Se detuvieron en un callejón a unas cuadras de edificio en donde sabías que Barnes estaba viviendo. Rompieron la puerta de una bodega abandonada y allí ocultaron la camioneta. Sam y Rogers se dispusieron a ponerse sus trajes, mientras marcabas por última vez a Bucky.

- T/N , - Steve te llamó, bajaste de la camioneta y fuiste hasta donde estaba él, traía puesto su traje; se veía tan sexi - Solo una última cosa - te dio una maleta.

- ¿El qué? -le miraste confundida y tomaste la maleta.

- Es solo una medida de precaución - Sam se acercó a ustedes, ajustando sus alas metálicas a su torso - Para que no te reconozcan.

Abriste la maleta con prisa, la miraste primero con asombro, luego molesta. Miraste a Rogers y a Sam, volviste a ver el interior de a maleta, no podías creerlo.

- Dime que no es verdad - miraste a Rogers, un tanto molesta. Pero él solo agachó la mirada, parecía que quería reírse - ¿Rogers?

- T/N, - Steve tomó aire - después de lo de Lagos... - tu cara se entristeció - No quiero que si esto se sale de control, se te reconozca de ninguna forma. Tu cara ya fue vista en las noticias y después de hablar con Ross, no es bueno que sepan que estuviste aquí.

- Steve... - le hiciste un puchero.

- Te dije... - Steve acarició tu mentón - Que era bajo mis términos. Sino, te quedarás aquí.

Diste un golpe de reproche con tu pie al suelo y diste media vuelta, Rogers tenía razón. Te pondrías el estúpido traje por mucho que tu orgullo te doliera. Steve y Sam te dieron la espalda, a modo de brindarte privacidad para que te vistieras. 

- ¿Cuándo ibas a decírmelo? - Sam se cruzó de brazos.

- ¿Qué cosa? - Steve tragó nervioso.

- Vamos, Cap - Sam se rio - Tú... T/N... ¿No que no?

- Sam... - Rogers volvió su mirada hacia ti, viendo tu espalda desnuda. Sam quiso voltear pero Rogers lo empujó impidiendo que te viera.

- Me costó un poco entender - Sam seguía riendo, Rogers lo miró frunciendo el ceño - Tu cabello revuelto, las mejillas de T/N ruborizadas... - le miró de reojo - ...el chupón en su cuello...

- Sam... - Rogers se cruzó de brazos.

- Ya - saliste vistiendo con el traje.

El Capitán y Falcon se volvieron, te veías excepcional vistiendo ese traje táctico negro, que te ajustaba perfecto. Ambos se quedaron boquiabiertos.

- ¿Y tengo que usar esta tontería también? - levantaste un antifaz.

- Sin eso, - Rogers se aproximó hasta ti con una amplia sonrisa - El traje no serviría de nada - te colocó el antifaz, te veía encantado. No sabía que necesitaba en su vida verte vestida así. Tus ojos resaltaban esplendidos al contraste del negro antifaz.

- Yo me voy adelantando - Sam se acercó y dio a Rogers los auriculares. Luego salió de la bodega con trote seguro.

- Ven, - Rogers te colocó el auricular y luego dio un suave beso en tus labios - Vamos.

Llegaron con mucho sigilo al edificio de Barnes, subieron por las escaleras y llegaron a su apartamento. Abriste la puerta con sumo cuidado; pasaron dentro, procurando hacer silencio. No había nadie, el apartamento estaba solo. 

- ¿Es aquí? - Rogers miraba curiosamente el apartamento, era pequeño, pero modesto.

- Debimos esperarlo antes de entrar - tomaste un diario que había en la mesa de la pequeña sala, en primera plana estaba la noticia de tu desastre en Lagos.

¿QUIÉN ES ELLA?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora