Capítulo 30

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Regresaron al Complejo, no sin antes pasar por tu antojo: las hamburguesas. De las que estuviste insistiendo a Rogers hasta que hicieron una parada para comprarlas.

Al llegar al Complejo Vengadores, ayudabas a Natasha a ir a la enfermería junto con Sam, pero Rogers te tomó del brazo y te llevó hasta la sala de reuniones. Puso con actitud molesta las bolsas de papel sobre la mesa y se apoyó como derrotado sobre una silla. Te sentaste en silencio, observándolo con detenimiento. Su rostro reflejaba tristeza y preocupación, tenía la mandíbula tensa y las manos entrelazadas. Estuvieron así por mucho tiempo, el olor de la comida te abría más el apetito; intentaste contenerte, hasta que para tu vergüenza, tu estómago volvió a rugir. Rogers se recompuso y te acercó una de las bolsas de papel, a la vez se sentó un poco retirado de ti. Tenías mucha pena y por la tensión de la situación con Rogers, estabas indecisa si comer o no.

- Tienes hambre, ¿no? - Rogers divagó la vista por la sala y se dejó caer en el respaldar de la silla  - Come...

Con mucho sigilo tomaste la bolsa y sacaste la hamburguesa, su olor era tan delicioso que se te hizo agua la boca de inmediato.

- Esto debe ser una broma, ¿verdad?- Stark entro de golpe a la sala, traía una tableta en sus manos - Tú, - dijo mirandote - pareces un imán de desastres.

- Rogers dijo que era tu culpa - tenías un bocado en la boca, así que hablaste despacio.

Stark te miró suspenso y luego miró a Rogers, buscando una explicación a tus palabras. Rogers se pasó la mano por la cara, rogando tenerte paciencia y consideración.

- No lo puedo creer... - susurró molesto Steve, volvió a rodar la vista por la sala, tomó aire y luego te miró - ¿De verdad, T/N? Eres un dolor de cabeza.

- Pero si lo dijiste... - le mirabas con obviedad. Era cierto, él lo dijo.

- ¿Estás... - Stark te miró intentando no reírse, tenías mayonesa en la comisura de los labios y un poco de lechuga en la barbilla - ...estas comiendo hamburguesas?

- Si... - Rogers volteó hacia otro lado para que no vieras que se estaba riendo de ti - Fue una parada casi obligatoria - puso su mano cubriendo su boca, conteniendo la risa.

Stark se sentó junto a ti y tomó su propia bolsa de papel de las que había llevado Rogers e igual que tú, disfrutaba del manjar. Pero Tony te veía aun riéndose, tú sin saber por qué. Stark tomó una de las servilletas de papel y te limpió la mayonesa, te dio pena saber que estabas embarrada. Stark te limpió con mucha delicadeza, bajo la mirada seria de Rogers que dejó de reír al ver el gesto de Tony contigo.

- Gracias... - susurraste a Stark, tomando la servilleta de su mano para terminar de limpiarte - Por cierto... - miraste a Rogers, que tenía de vuelta su cara de limón - ¿Quién fue el tipo que nos atacó? Me pareció que lo reconociste.

Rogers agachó la cabeza, de nuevo le viste triste y pensativo. Stark levantó las cejas y resopló.

- Su nombre es James Barnes - Steve miró hacia la nada por el ventanal de cristal y luego te miró a ti - y es mi amigo.

- Mmm... - te confundiste - Me explican... por favor...

- El Sargento Barnes combatió junto con Rogers hace ya muchos años - Stark no dejaba de disfrutar su hamburguesa - Se creía que estaba muerto, pero al parecer HYDRA lo ha estado empleando como su mercenario y lo bautizaron como el Soldado del Invierno. Hay que investigar si lo esta haciendo libremente...

Dejaste el último trozo de tu hamburguesa sobre la bolsa de papel en la mesa, de pronto se te fue el hambre. Stark acababa de resumir con pocas palabras tu historia en la vida de alguien más. 

- Ese no es Bucky, Stark... - Rogers se puso molesto - El sujeto que nos atacó en la carretera no era Buck. Algo han hecho con él.

- Seguramente lo controlan de alguna forma - dijiste más para ti que para ellos, pero te quedaron viendo - Él te vio y no te reconoció - miraste a Rogers - o le hicieron un lavado de cerebro y no tiene ni la mínima idea de quien es él mismo o lo tienen bajo un tipo de control neuronal, y lo usan como marioneta.

Caíste en el respaldar de la silla, suspirando con tristeza. Rogers y Stark se miraron de reojo, comprendieron por que te habías puesto así.

- ¿Y van a hacer algo? - levantaste la mirada a Rogers y luego a Stark.

- Si Bucky esta siendo controlado, - Rogers se puso de pie y caviló por el rededor de la mesa - voy a hacer lo que sea necesario para ayudarlo.

- Pues yo... - te cruzaste de brazos - ...Quisiera ayudarte... si me dejas...

Stark y Rogers te vieron al mismo tiempo sorprendidos. Stark no podía creer que te estabas ofreciendo ayudar a alguien que al parecer no soportabas; cuando tuvo que casi obligarte a que socializaras con él hace unas horas. Rogers te veía como intentando descifrar algún código en tu ofrecimiento.

- ¿Qué? - te sentiste ofendida de que al parecer no tomaran muy en serio que querías ayudar a Rogers.

- Esto es muy personal para mi, T/N - Steve agachó la cabeza, se veía claro que le afectaba lo de Barnes.

- Rogers... - te pusiste de pie y te acercaste un poco - Pasé al parecer quinientos años de mi vida siendo controlada y haciendo cosas terribles... que nunca quise hacer. Si tu amigo esta pasando por lo mismo, me imagino lo que está sufriendo por dentro y en silencio - Steve Rogers te miró a los ojos, encontrando una mirada sincera en ti - Su historia, es muy similar a mi historia... también se vuelve personal para mi.

Rogers bajó la mirada, estaba indeciso de aceptar tu ayuda. Volviste a sentarte. Comprenderías si él no quería que te involucraras, después de todo ni llegaban a ser amigos.

- La ayuda no está de más, Steve - Stark tomó otra bolsa de papel y escudriño su interior - entre más... mejor. Natasha está herida y supongo que no quieres que más se involucren, al ser un asunto personal.

- Esta bien - Rogers pareció pensarlo un poco - Pero solo harás lo que te diga - te sentenció con su dedo. No quisiste pero le sonreíste.

- Adoro estas cosas - Stark devoraba con gusto su segunda hamburguesa.

¿QUIÉN ES ELLA?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora