¿QUIÉN ES ELLA?

Capítulo 45

Las vacaciones de verano de Peter habían llegado; pasabas más tiempo con él. Salían casi a diario con sus amigos, divirtiéndose en parques acuáticos, ferias y festivales, haciendo maratones de películas. Al único lugar a donde no los acompañabas era la playa, no era mucho tu ambiente. Y cuando habían fiestas, Peter aprovechaba tu "súper poder especial" para reventar la noche; te divertías haciéndolo, la resaca del día siguiente solo se te quitaba con una buena taza de café. Peter sabía el tip. Estabas viviendo de nuevo una etapa "juvenil" más divertida a la que pasaste en Asgard. También estabas en contacto con Bucky Barnes, "Querido BB" como lo tenías en tu teléfono, que ocasionalmente te llamaba por las noches o te escribía para contarte como iba su recuperación

Esa semana, estabas aburrida, Peter y sus amigos habían salido a un viaje por carretera. Stark no te dejó ir con ellos, Fury tampoco. Y al parecer todos en el Complejo habían salido a misiones. Estabas sola. Así que optaste por leer uno de los tantos libros que habían en el pequeño librero de la sala. Te acomodaste en el mueble y empezaste, no te moviste de allí hasta acabar. Justo al terminarlo, te fijaste en la firma en la pasta del libro: Steve Rogers. Una sonrisa se te escapó, al pasar tus dedos sobre la tinta azul, que ya estaba un poco desteñida. Te acostaste en el sillón, miraste perdida el techo y suspiraste. Esos días apenas habías visto a Rogers; una parte porque salías mucho con Peter, y por otra... él pasaba muy ocupado. Abrazaste el libro sobre tu pecho y te quedaste así... con la mirada puesta en el encielado, quien sabe por cuanto tiempo. Miraste el reloj de la pared, eran apenas las tres de la tarde. Se te estaban haciendo eternos los días. Te levantaste y dejaste el libro sobre la mesa del comedor; tenías hambre y buscaste algo en la cocina.

Dado por el calor que estaba haciendo, y suponiendo que estabas sola, tenías puesta una camiseta corta y holgada, y unos shorts, que te quedaban justos a la cadera y bastante cortos. Te estabas estirando para alcanzar una caja de galletas de la alacena, acción que hacía que tu camiseta se subiera y dejara ver parte de tu cintura descubierta.

- Vaya... - Tony Stark se había aparecido en la cocina, muy sigiloso, estaba sentado en el desayunador, viéndote. Vaya susto el que te había sacado.

- ¡Stark! - te diste la vuelta tan rápido como pudiste.

- No... - Stark te veía sonriente - Tú sigue... en lo que estabas haciendo...

Sentiste que tus mejillas se acaloraron levemente. Levitaste un poco a la altura de la alacena, tomaste las galletas y volviste al suelo, sin dejar de ver, muy apenada, a Stark.

- Eso fue aburrido - Stark se cruzó de brazos - y muy decepcionante.

Apretaste los labios, cubriste con la caja de galletas tu estómago descubierto y halaste tus shorts hacia abajo. Tenías mucha pena de que Stark te viera vestida en esas fachas. Pero él se rio de tu actitud tímida, te miró de pies a cabeza y volvió a sonreírte.

- ¡Cielos, Stark! - saliste de la cocina con paso presuroso hacia los dormitorios.

- T/N... - Tony estaba riéndose y salió detrás de ti - Espera...

- ¿Qué? - te cruzaste de brazos, tu cara empurrada y tus mejillas rosadas te daban una imagen muy tierna ante los ojos de Stark que sonreía encantado - ¿Qué sucede, Stark?

- No tienes planes para esta noche... ¿o si? - Stark se te acercó con cautela, te confundió su pregunta - digo... Parker no está... vuelve hasta mañana... - Stark se paró frente a ti - ¿Tampoco desaparecerás?

- Mmmm... no... - sonreíste nerviosa - A no ser que me vuelvan a secuestrar... - Stark levantó una ceja y te sonrió - ¿Por qué?

- Haremos una fiesta esta noche - Stark tomó una galleta de la caja que tenías en las manos.

- ¿Ustedes? - te reíste inconscientemente, Stark te miró serio, mientras se comía la galleta.

- Es una fiesta por el cumple del Cap - Stark metió una mano en la bolsa de su pantalón y con la otra terminaba la galleta.

- Oh, vaya... - levantaste las cejas con asombro y apretaste los labios.

- Sé que no te llevas bien con él... - Stark quiso reírse pero se contuvo - Pero te haría bien convivir.

- Yo convivo... - reíste y te cruzaste de brazos.

- Con adultos... - aclaró Tony.

Te reíste un poco más. En verdad, era cierto. Tus salidas solo eran con Peter y sus amigos últimamente; algunas veces con Wanda, Vision y Pietro. Quizás tu semblante juvenil te ayudaba a mezclarte con ellos.

- Si... bueno... Entiendo... - cavilaste en tu puesto, también te daba curiosidad cómo sería esa fiesta con los Vengadores - Pero si me aburro me voy temprano.

- ¿Qué crees que hacemos? - Stark te miró confundido - ¿Jugar bingo? - dijo con tono sarcástico.

- ¿Qué es bingo? - le miraste intrigada. Stark te quedó viendo asombrado, luego rodó los ojos.

- Olvídalo - volvió a tomar otra galleta y dio media vuelta, dispuesto a irse.

- Stark... - no querías quedarte con la duda y lo seguiste. Él se detuvo un momento en la puerta, te volvió a ver de pie a cabeza y sonrió.

- Ponte algo lindo... ¿Quieres? - dio la vuelta y se fue.

- ¿Qué? - te miraste en el espejo de la sala, obviamente no irías en esas fachas.

Pero ahora tenías dos situaciones. Primera, ¿Cómo carajos ibas a ir vestida a una fiesta de "adultos"? y segundo, en el cumpleaños de un amigo de Peter, todos llevaron regalos, seguro también habría que llevar para Steve Rogers.