28- Asesinato

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¿Calor?

Sí, y demasiada calor. Estar aquí es como estar dentro de un horno, Alan y yo hemos pasado todo el día dentro de la piscina; está llena de personas y es un poco molesto.

—Agh, todo no era perfecto, hace demasiada calor, vamos a la habitación, por lo menos el aire acondicionado nos quitará la calor —Alan me dice saliendo de la piscina, yo lo sigo.

Llegamos a nuestra habitación y sí, el aire acondicionado se siente genial, entro al baño y me quito el bikini, al salir del baño Alan entra, abro el mini refrigerador y cojo un paquete de chocolates, me siento en el sillón super cómodo frente al gran televisor y pongo el canal de las modelos, no hay nada mejor para ver, lo otro solo es noticia. Alan se sienta a mi lado y coge un chocolate.

Una notificación llega a mí teléfono, es un mensaje de Duda:

          Espero que la estén pasando genial, ahora mismo estamos yo y Louis en tú casa junto a Matteo y Samantha cuidando a Rush, saludos Cami.

Miro a Alan para enseñarle el mensaje pero se ha quedado dormido. Salgo de la habitación, si Alan está dormido me voy a aburrir sola, camino por el pasillo, veo una puerta medio abierta, no me gusta eso del chisme pero se escuchan voces un poco altas, me acerco un poco y me pongo detrás de la puerta.

—... no lo haré Olivia, estás loca, nunca haría eso —esa que habló fue Kate, así que esta es la habitación en la que se están quedando.

—Kate, mírame, ¿acaso no me amas, no harías cualquier cosa por mi? —Olivia le pregunta llorando.

—Oli, yo si te amo, y haría cualquier cosa por ti menos eso, nunca haría eso.

—Entonces... entonces no me amas, nadie se va a enterar, lo vamos a hacer juntas, Kate, por favor...

—¡TE DIJE QUE NO! —se escuchan pasos acercándose a la puerta, salgo corriendo y me escondo en mi habitación.

Que extraño, ¿que será eso que quiere Olivia que Kate haga?, me parece demasiado raro. Me acuesto en la cama, no tengo nada que hacer, iba a bajar pero con la conversación que acabo de escuchar se me quitaron las ganas.

                       (....)

Ya a eso de las ocho bajamos al restaurante a cenar, nos sentamos en la misma mesa, pedimos la cena, esta vez es un hombre con un piano el que empieza a hacer música, el camarero trae nuestra cena.

Comenzamos a cenar, dos chicas se sientan junto a nosotros...

A la verga, ¿estas dos no se pudieron sentar en otra mesa?

—Nos ven más mesas, ¿por qué se sientan a nuestro lado? —Alan pregunta mirando a Kate y luego a Olivia.

—Ay cariño, tranquilo, solo vamos a cenar con ustedes, ¿algún problema amores? —Olivia pregunta sonríendo, Alan hace un ademán de  levantarse pero pongo mi mano sobre la suya, él se sienta y sigue cenando.

Un camarero les trae la cena a ellas, Olivia comienza a cenar, sin embargo Kate solo juega con la cena, observo su cara, sus ojos... sus ojos no tienen ese brillo que siempre tiene ella, tiene los ojos tristes, tiene una mejilla roja, como si alguien la hubiera golpeado.

—Kate —la llamo, ella me mira—, ¿que te ha pasado en la mejilla?

Ella pone una mano sobre su mejilla, Alan la mira con el ceño fruncido y Olivia me mira a mí.

—Kate se golpeo con el jacuzzi al salir, el suelo estaba mojado, eso es todo, ¿no es así Kate? —Olivia le pregunta y ella asiente.

Está mintiendo, y me parece todo muy raro, primero la extraña conversación y ahora el golpe en la mejilla.

Solo él✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora