Solo él✔

53- Buscando a Rick

                   

«Rick»

Tiro mi gorro sobre el sofá con más fuerza y rabia de la que debería. Ya es todo, lo han descubierto, han descubierto que Camilo sigue vivo, que mi Camilo está vivo.

—¿Por qué estás así, Rick? — Camilo me pregunta, frunciendo el ceño y sentándose en un sillón.

—Por... —suspiro, tratando de calmarme —Por nada, solo estoy cansado.

—No lo creo, estás muy... nervioso, desde que esos chicos te cayeron atrás, ¿quiénes eran esos chicos,y por qué sentí que conocía a dos de ellos?

—No los conoces.

—Siempre me dices lo mismo Rick —protesta calmadamente —Yo siento que los conozco, especialmente la chica, hasta he notado el parecido que tiene conmigo, ¿que me ocultas?

—No te oculto nada, ¿no entiendes?

—No entiendo Rick, está claro que no entiendo, hace días estás más extraño de lo normal, ¿qué te pasa?

—No me pasa nada Camilo.

—¡No mientas joder! —se levanta y se acerca a mi, con el ceño ligeramente fruncido.

—Arregla tus maletas, mañana saldremos de aquí —paso mis manos por su cabello, él se aparta, cosa que nunca había hecho.

—Hace tres años me estás ocultando cosas, soñaba con alguien, con una chica, y esa chica es la de hoy, también soñé con un chico, y ese chico estaba hoy, los vi, no se qué tienen que ver conmigo pero siento una conexión con ellos, ¡así que no haré ninguna maleta hasta que me digas quienes son!

—Dios mío, Camilo, confía en mí, mañana saldremos de aquí, ve a hacer tus maletas.

—Y una mierda, no voy a hacer nada, tus estúpidos secretos me tienen cansado.

Sale de la casa dando un portazo.

                         «Camila»
                            

Abro mis ojos, pero me obligo a cerrarlos y volverlos a abrir por la luz. De momento no sé donde estoy, pero pestañeo varias veces y me doy cuenta que estoy en la casa de Samantha y Alan.

—Por fin despiertas —Alan pasa una de sus manos por mis mejillas, y me mira preocupado.

—¿Qué ha pasado? —pregunto confundida.

—¿No recuerdas nada? —esta vez Louis me pregunta, yo frunzo un poco mi ceño y me siento torpemente en la cama.

Y como no acordarme, lo vi, vi a mi hermano, a la persona que llevo tres años creyendo que estaba muerta y no, no ha estado muerta...

Una punzada en mi cabeza hace que deje de estar pensando.

—Fue real, ¿no fue un sueño verdad? —les pregunto, ellos niegan con sus cabezas.

Mis ojos se llenan de lágrimas rápidamente, un nudo se forma en mi garganta, pero trago saliva.

—¿Y Matteo? —pregunto preocupada.

—Está en la habitación de Samantha, también se ha desmayado al verlo —Alan aprieta sus labios, yo me hecho a llorar.

«Matteo»

Siento a alguien acariciar mi cabello, abro mis ojos lentamente. Samantha sonríe al verme y me da un beso.

—Qué bueno que despertaste, estaba preocupada.