—¿Enserio Camila? No le hagas caso, Olivia está loca —Samantha hace un gesto con la mano de restarle importancia, yo miro mi tequila pensativa.Desde hace días pienso en lo que me dijo Olivia. No eh podido dejar de pensar en eso. ¿Y si es verdad que alguien me oculta algo...?
—Además, ¿por qué fuiste sola? —Samantha añade y me mira con los ojos entrecerrados.
—Sólo quería saber por qué le había culpado a Alan.
—Tienes amigos Camila, a mí misma, nos hemos convertido en mejores amigas, me hubieras dicho a mí y yo te hubiera acompañado.
—No me pasó por la cabeza.
—Agh, bueno... ahora, disfrutemos de nuestro día, por fín solas, nuestro día de mejores amigas...
—En realidad... no estamos solas, estamos en un bar, un sábado, acompañadas de muchas personas, bailando y sudando —sonrío señalando a la gente.
—Pero te digo, haber, solas sin nuestros novios, me siento libre.
—¿Libre? ¿Ligarías con alguien?
—¡No! Eso no, jamás traicionaría a Matteo.
—Ni yo a Alan.
Pero lo traicionaste con tú mejor amigo.
Gracias por recordarmelo estúpida conciencia.
Samantha se pide otro tequila. Dos chicos se acercan a nosotras, un rubio se sienta a mi lado y un moreno al lado de Samantha.
Yo miro con mala cara a mi "nuevo" compañero.
—¿Y ustedes, qué? —Samantha les pregunta, el chico de mi lado sonríe y pone una mano en mi hombro, yo me aparto enseguida.
—Mi nombre es Mike, y él —señala al compañero de Samantha—, él es Toby.
—Nombre de perro, ¿no? —Samantha comenta mirando a su compañero, éste se ríe.
—¿Y sus nombres cuáles son? —el moreno pregunta, Samantha rueda los ojos.
—Yo soy Alicia y ella es Claire.
Aguanto una carcajada al ver al moreno diciéndole a Samantha que es un bonito nombre. Nunca se me habría ocurrido dar nombres falsos.
—¿Qué edad tienes Claire? —el rubio me pregunta sonríendo.
Mentir no está mal, ¿no?
—Veintidós.
—Vaya, eres mayor que yo, yo tengo diecinueve, pero no me importaría estar con alguien mayor que yo, o sea, no me importaría estar contigo.
—¿Y que te hace pensar que yo sí estaría contigo?
El rubio hace silencio.
—Yo tengo veinticinco —escucho a Samantha, y me río sin poder evitarlo.
—Yo veinte, dios, me llevas cinco años —el moreno exclama sorprendido.
—Me gustan las pelinegras —el rubio toca mi cabello, yo le doy un manotazo.
—A mi no me gustan los rubios.
—Que pena...
—Hey chica, no te alteres, solo vinimos a hacerles compañía —el moreno le dice a Samantha, ésta lo a empujado.
—Pero casualmente ellas no necesitan su compañía —me doy la vuelta, Alan y Matteo están detrás de nosotros, con los brazos cruzados. Nuestros compañeros se van apenas los ven.
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Solo él✔
Fiksi Remaja¿Una historia de amor? Mmm, tal vez. ¿Diversión y aventuras? Sí, las encontrarás aquí en mi historia. ¿Alguna vez han pasado por algo terrible que los ha hecho derrumbarse ya que esa persona era tu estabilidad y tu felicidad sólo dependía de ella? S...