Un verdadero amor. 8a parte.

💘1437

Capítulo 1437

"Kyu, ¿sabes qué le ocurre?"
Preguntó HongKi, preocupado al ver JungMin marcharse.

"Solo el amor puede hacerle tanto daño".
Respondió KyuJong en voz baja. Entonces recordó lo que JungMin le había contado y suspiró.

"El amor puede ser agotador a veces".
Respondió HongKi con una expresión de desaprobación. Luego se apoyó suavemente en el hombro de KyuJong, como pidiendo que lo consolara.

"¡Tienes razón, cariño! Por cierto, hace frío aquí. Entremos".
KyuJong envolvió sus brazos alrededor de HongKi mientras hablaba. Siempre se preocupaba por su salud, por eso lo resguardaba del viento frío.

"¿No vas a la base militar hoy?"
Preguntó mientras lo miraba. Pasar tiempo de calidad con él no era algo que pudiera hacer con asiduidad debido a su carrera.

"Hoy estoy libre. ¿Quieres que vayamos a algún lado y hagamos algo juntos?"
KyuJong bajó la cabeza y besó su frente suavemente.

Había estado muy estresado últimamente y él haría todo lo que estuviera en sus manos para hacerlo sentir mejor.

"Ya tengo muy vista la Ciudad S y no tenemos mucho tiempo para irnos de viaje afuera. Déjalo así. Quedémonos en casa".
En esos días, HongKi había pasado la mayor parte de su tiempo en casa terminando sus diseños. Por eso tenía tantas ganas de salir y viajar. Sin embargo, todavía no estaba listo emocionalmente para hacer eso con KyuJong.

"¿Qué tal si nos vamos de compras? A ustedes les gusta eso. Caminar por el centro comercial con sus novios o esposos".
Él estaba haciéndolo lo mejor que podía, aunque sintió como si su esposo estuviera fuera de su control. Realmente no podía evitar pensar que él lo dejaría pronto. Se preguntaba si su presentimiento se debía a que se encontraba bajo mucha presión últimamente o si era su intuición la que le llevaba a pensarlo.

"Los chicos hacen eso, pero yo no. Si prefieres ir de compras, podemos ir a por comida".
HongKi se había estado preparando para eso durante mucho tiempo. Como un esposo preocupado, tenía la intención de almacenar productos de uso común para él en caso de que pudiera necesitarlos en el futuro.

"¿No compraste ya hace unos días? ¿Ya se han acabado?"
Cuando preguntó, el rostro de KyuJong mostraba incredulidad. Entonces se puso erguido y lo miró con confusión. Él estaba seguro de que sus extraños comportamientos significaban algo. ¿Estaba planeando hacer algo de lo que él no tenía conocimiento?

"No. Es solo que creo que es mejor que tengamos más en caso de que se presente alguna necesidad".
Respondió HongKi, esquivó abruptamente la mirada de KyuJong y miró hacia otro lado. Parecía inseguro de sí mismo.

"¿Estás diciendo la verdad?"
KyuJong bajó la voz aún más. Nunca antes nadie le había importado tanto. Y, de todas las personas a las que conocía, no podía explicar cómo era posible que él llegara a ocupar su mente y corazón tan naturalmente.

"¡Sí! Si no ¿por qué lo haría?"
Respondió, y puso una sonrisa forzada mientras trataba de ocultar su incomodidad. No podía darse el lujo de exponer su mentira tan fácilmente.

Nacido en una familia acomodada, tenía sus listas de marcas de lujo. Se había convertido en un hábito llevar la tarjeta del banco de KyuJong todos los días. Sin embargo, rara vez la usaba porque normalmente pagaba con su propio dinero.

"Kikí, esta vez pagaré yo".
Dijo. Entonces le dio su tarjeta de crédito al dependiente antes de que HongKi pudiera sacar dinero.

"¡Está bien! Gracias".
Respondió HongKi con sinceridad, dando a entender que no le importaba quién pagara la factura. Al fin y al cabo, eran marido y esposo.

Él sería feliz si ambos lo fueran como pareja. Unos minutos después, iban cargados con bolsas de compras por el estacionamiento. Pero justo antes de que pudieran abrir el maletero del auto, un coche negro se apresuró hacia ellos sin disminuir la velocidad.

"¡Kikí, cuidado!"
Gritó KyuJong. Su cuerpo reaccionó rápidamente tirandolo hacia él. Luego apretó los dientes con resignación y se volvió hacia el auto que casi se lleva para adelante a su esposo.

Jamás se imaginarían que el conductor había hecho esa maniobra deliberadamente. Cuando el que conducía el auto se dio cuenta de que HongKi había escapado, pisó el freno, giró y se dirigió hacia ellos nuevamente.

KyuJong, notando el peligro de la situación, tomó la mano de HongKi y corrió hacia la salida. De ninguna manera pondría su vida en peligro.

"¡Qué carajo!"
Dijo HongKi todavía conmocionado por lo que estaba sucediendo. Sin embargo, la presencia de KyuJong de alguna manera lo tranquilizaba. Confiaba en él y sabía que lo protegería sin importar nada.

"Salgamos de aquí. Un coche no iría hacia nosotros dos veces si no fuera para matarnos".
Dijo KyuJong con seriedad. Él observó el auto con cautela y protegió a HongKi detrás de él. Su mente daba vueltas pensando si el conductor sería algún enemigo.

En el fondo sabía que en su trabajo pudo haber molestado a algunos matones. Y esto estaba siendo un acto de venganza contra él.

"Salgamos de aquí".
Dijo HongKi. El pánico lo paralizó rápidamente cuando escuchó la explicación de KyuJong.

Además, podía leer en el rostro serio de su esposo que, efectivamente, estaban en peligro.

"Es demasiado tarde. Apuesto a que las calles de afuera han sido bloqueadas".
Dijo él frunciendo el ceño cuando vio que otro auto se dirigía hacia ellos. Siempre había sido un hombre valiente, pero en ese instante un miedo inexplicable le entró al cuerpo.

¿Qué pasa si esas personas se acabaran desesperando y le dispararan a él y a HongKi? Si eso llegaba a suceder, era posible que no sobrevivieran.

"¿Qué hacemos ahora? ¿Qué debemos hacer?"
La verdad es que HongKi nunca le había tenido miedo a la muerte, pero saber que estaban en peligro era algo que lo asustaba. La seguridad de KyuJong era su mayor preocupación.

"Súbete al auto ahora mismo y llama a la policía".
Ordenó KyuJong en un tono tranquilo. Sus ojos estaban fijos en el grupo de hombres que bajaba de los autos. Se sintió aliviado al no ver armas por ningún lado.